60 REPERTORIO AMERICANO «Puerto Limón» aborda un proble se pega. Azucena, yo sabe, todo, oh cionada, es lo mismo que la ausencia ma racial que, excepto en raras excep sure, yo sabe, la voz se le quebró de regla, ya que no queda en tal caso ciones, había sido tocado por otros y no pudo continuar.
sino la regla que cada uno se da, y escritores y novelistas de América. El ni las llamadas de una prostituta, consiste en dejarse guiar por sus pade los negros. Rómulo Gallegos lo ni la violencia del amor de ocasión, le siones. No hay nada más disolvente abordó ampliamente, en escalas insu logran arrancar del lecho de la her que la coexistencia de tantas reglas perables en su obra «Pobre Negro mana leprosa. Sólo la fuerza armada distintas como individuos haya en en ese ambiente de magia, africanismo le arrastra a la defensa y a la huída. contacto.
y primitivismo, del negro trasplantado Puede ocurrir que el lector se sien Desde el origen de la humanidad, a un suelo extraño. Pero la novela de ta defraudado ante el desenlace de es siempre se ha oscilado entre la hipóGallegos es una novela de magia y de ta novela de violencias.
tesis de la vida futura eterna y la neclave, que tiene algo de hechicería La huída, la cobardía y la traición, gación de toda existencia ultravital, lo de misteriosa evocación, de una raza, hasta el último capítulo. Pero Silvano que en la práctica enseña que siempre con sus mitos, sus creencias, sus rl no abandona la selva, ni al negro, ni se ha caminado del despotismo a la tos lunares. Por el contrario «Puerto el amor de Diana de la que ya recibió anarquía y abandonado el horror de Limón. nos da la realidad del negro pruebas inolvidables. Silvano marcha la anarquía para refugiarse en el desmecanizado, esclavo de alma y de cuer en un amanecer de muertos, sobre las potismo.
po.
ΕΙ negro estadunidense, con el olas de la ilusión. Al muchacho ¿Qué precisa para salir del círculo complejo de la raza, de la servidum le llegó a saltar el corazón y tuvo que vicioso? Lo único es: no limitarse a bre, de la lucha por la vida. El negro sujetarse a una barandilla para no una enumeración incompleta de las alegre y resignado, encaprichado con caerse al agua. Se sentía, por fin, desideas relativas a la vida futura. Ora el juego de luces y las irisaciones fallecer. Pero aunque el final sea un se la niega, ora se la admite como de un vidrio o de un papel plateado. corte inesperado en todo el desarrollo siendo eterna. Completando la enu Tom, el hombre del autocar, cons de esta novela, todos sabemos que la meración, se debe admitir la posibilipirador, y tierno, amante, desespera solución está más en el fondo. Silvano dad de vidas futuras temporarias y do, en el que la llama de la sangre y volverá. La llamada de la tierra. Como demostrar su existencia. Algunos toel amor fraterno, se subliman hasta el mono que se acerca curioso después maron esa posibilidad en consideraactos heroicos, violentos, llenos de fe, que la madre ha muerto acribillada a ción; dice Boiste. Se inclina a miporque la fe sólo florece junto a la tiros. es que la tierra, a la que herar nuestro globo como el purgatorio violencia.
mos matado, a la que hemos olvida de algún planeta. Víctor Hugo te«Tenés frío?
do, llama por fin a nuestras puertas.
nía el mismo presentimiento: i«Ten Por debajo de las sábanas ella su voz resuena, honda, quejumbrosa.
gamos compasión con los castigados!
movio la cabeza negando.
Por eso «Puerto Limón, no es un Quién soy, de dónde venimos, nada puerto de partida, sino más bien un hemos hecho antes de nacer. No es Tenés hambre? Te traje unas na Puerto de Regreso.
ranjas. salí, Azucena, destapate la el hombre un reincidente de la justiSan Salvador, cia eterna? En todas partes se ve el cara, yo no te tengo asco, a Tom no 17 de Noviembre de 1953.
castigo.
Víctor Hugo comprendía pues, la Sanción ultravital posibilidad de una serie sin fin de viPor Agathon de POTTER das temporarias sucesivas, porque. Envío de en Cartago. pretender que la vida actual sirve de medio de expiación, para los que trasLa sanción ultravital es la conse vida futura temporaria: el purgatorio. gredieron la regla de las acciones en cuencia, en una vida posterior, de las La eternidad de la vida futura es eviuna vida anterior, lleva a admitir una acciones cometidas en la presente; con dentemente absurda, y aun los que vida temporaria aquí abajo, para quiesecuencia feliz o desgraciada según por convicción deberían defenderla, nes desobedecieron la regla moral, y esas acciones fueron o no, conformes dudaron de ella. Chateaubriand que así sucesivamente. Pero la realidad a la regla. Respecto a la sanción ul ría introducir en el paraíso algún su de la existencia de las vidas futuras, travital, sólo dos hipótesis hicieron frimiento, a fin de evitar la eterna no debe ser supuesta para que el ormientras hay tres posibles, lo que es monotonía del justo; quería hacer el den sea definitivo; precisa demostrarun sofisma por error de enumeración. paraíso más racional. El redentorista la irrefutablemente, Dijeron: la vida futura es eterna; otros Saintrain se ocupó del infierno; pen. La consecuencia es una sanción reafirmaron que no hay vida futura. En só que él hubiera hallado algo mejor, conocida inevitable, que constriñe motre las dos nociones, hay una tercera más conforme con la bondad divina ralmente a conformar sus actos a la alternativa: las vidas futuras son tem que el infierno eterno. Si la hipótesis regla. Se tiene por consiguiente una porales.
de la vida futura eterna es absurda, obediencia voluntaria a las órdenes La eternidad de la vida futura es sirve, por lo menos, de base al orden de la soberanía impersonal de la tablece necesariamente un juez supre despótico mientras sea aceptado como razón; se tiene, en fin, como efecto mo, una cuenta corriente de nuestras verdadero; pero la otra alternativa, de la ausencia de toda idea de rebeacciones, y, según el resultado positi negación de toda sanción ultravital, lión contra la organización social, en vo o negativo del balance, la vida fu es destructora del orden social y lleva vigor entonces, una paz imperturtura soporta una felicidad eterna o a la anarquía.
bable.
una eternidad de penas. Por un com Una regla de acciones revelada, soLa Lógica, 52 a55.
promiso con la razón, se admite una brenatural o científica, pero no san Biblioteca Nacional de San José de Costa Rica. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica