338 REPERTORIO AMERICANO Dr. García Carrillo era un hombre completo en medio de sucesivas generaciones de grandes y pequeños mutilados.
Si figura nos aparece así como el compendio y la culminación inimitables de! arte de vivir. No renunció a nada. Abandonaba sin concluir muchas obras, pero no se negaba el derecho de emprenderlas. Nunca reconoció campo ajeno o vedado. Toda la tierra, toda la sabiduría, todo el arte era la heredad recibida para disfrute en virtud de su calidad humana.
No dejó cerrada ninguna puerta que pudiera ser abierta. No se resignó a quedarse con la pintura, con la filosofía, ni con la ciencia, ni con la vida mundana y política.
Hubiera sido para él como quedarse con un solo sentido y renunciar a todos los otros. Como renunciar a su derecho de ser hombre.
Contemplarlo así, en su plenitud inquisidora y creadora, es una de las pocas maneras de vislumbrar la aleccionadora gran.
deza de ser hombre.
CARDIOLOGIA (Radioscopía y Electrocardiografía. METABOLISMO, VENAS VARICOSAS.
Caracas, abril de 1952.
Sus teléfonos: 1254 y 3754 QUÉ HORA ES ES. OSSEUM La lección de Leonardo de máquinas y aparatos. Por sobre sus labores profundas de creación artística, indagación científica y construcción técnica, se yergue también el espíritu inclinado a Lecturas para maestros: Nuevos he la meditación, que expresó en múltiples chos, nuevas ideas, sugestiones, incita pensamientos filosóficos, en su mayor parte ciones, perspectivas y rumbos, noticias, aforismos acerca de Dios, el hombre, la rerevisiones, antipedagogía.
lación del cuerpo y el alma, la naturaleza y la vida.
Esta portentosa figura del Renacimiento pintor, escultor, dibujante, ingeniero, sabio y escritor pensó siempre con obs(Es un editorial de La Nación tinado rigor. sin falsas apariencias, con es.
de Buenos Aires, 15 abril de 1952. píritu, libre y con un seguro sentimiento de la coordinación de los elementos inteCúmplese hoy el quinto centenario del y creador, mueve sin descanso su existen gradores. En él, arte, ciencia y técnica consnacimiento de Leonardo, una de las figuras cia. Desde su aldea natal pasa a Florencia, tituyen una estupenda armonía. Poseía el cumbres de la historia de la humanidad. en los años en que esta ciudad toscana era don de moverse entre los hechos, los seres El hijo natural del notario de Vinci, pue como la capitanía del humanismo, en cu y las cosas, sin presiones extrañas ni cri.
blo situado a poca distancia de Florencia, yo seno despertaba el Renacimiento con el terios hechos. Nada lo desconcierta en la constituye una prueba inequívoca de que el signo de una nueva actitud del hombre busca de la verdad y en la expresión de genio no necesita para manifestarse la cir frente a la realidad. Allí se encontró con la belleza. Su curiosidad, sus miradas, cunstancia de nacer en una cuna encun una corte de pintores, orfebres, arquitec sus potencias mentales desvanecen toda fal brada. Lo que Leonardo creía que la na tos y fundidores, y en la bottega del Ve sa ilusión en el campo de las ciencias y las turaleza es causa y origen se dió cabal rrocchio, que frecuentó siete años tenien artes. Paul Valéry ha dicho: Leonardo, de mente en él. Su naturaleza superior, des. do a este pintor por su guía espiritual, al busca en busca, se vuelve llanamente el envuelta en un ambiente de libertad y crea terno con condiscípulos que llegaron tamescudero cada vez más admirable de su proción, le permitió, desde los albores de su bién a ser artistas famosos de esa época, pia naturaleza. Encarnó el equilibrio en vida, asimilar, comprender y descubrir el Poseído de un infatigable deseo de saber, tre el ver, el comprender y el crear; y en mundo que a cada instante tenía ante sus trabajó en el dibujo, la pintura y la escul su verdadero sentido fué uomo universale, ojos. Impulsado por esa necesidad de acla tura, se relacionó con grandes maestros del es decir, el ser en el que se refleja el todo ración, muy temprano se inclinó a la con arte italiano y estudió matemáticas, hidrau y que se manifiesta con posibilidades infitemplación de las nubes, la tierra, el vien lica, óptica y otras disciplinas. Su mente nitas: todo lo ve, lo comprende, lo modela to, los arroyos, las aves, las hormigas, los enciclopédica y su natural tendencia a la y recrea.
olivos y las viñas, que constituían la reali universalidad lo llevaron a saber todo lo Leonardo supera el pasado y prepara el dad y el paisaje de su medio originario. que su tiempo sabía y a sobrepasar esa me futuro. Ha continuado hasta hoy la influenAnte ellos aprendió a colocarse no en acti. dida con descubrimientos, invenciones, hi cia de su obra, y muchas de las expresiones tud pasiva, de mero contemplador, sino pótesis y concepciones que abrieron nue del hombre moderno y contemporáneo son con el anhelo de indagar el por qué de las vos caminos al conocimiento teórico y apliherencias de su espíritu. No se lo puede cosas. Esa prematura tendencia de su áni. cado. Circunstancias políticas lo obligaron considerar como una expresión exclusiva mo también lo acercó a la música, al dibujo a pasar de Florencia a Milán, y en esta sedel Renacimiento italiano del siglo XV, ni y al cálculo y lo impulsó al estudio del la.
gunda etapa de su existencia brotan de su tampoco como un frío testimonio de la histín para poder tomar contacto con los li.
pincel los grandes cuadros que le dieron toria de la cultura. La universalidad de su bros antiguos.
celebridad y de su pluma sus famosos traespíritu le otorga extensión y proyección Lejos de la concepción medieval que aún tados de diferentes materias.
ecuménicas. Por eso el homenaje que se le imperaba, pero que él, como otros grandes Su personalidad de artista y de sabio rinde hoy no está limitado a su pueblo naespíritus del luminoso Quattrocento, con desborda en todos los campos y trasciende tal ni a las fronteras de su patria. Leonartribuyó a superar, entendía que la verdad a otros países que visita o donde se radica. do es orgullo del género humano y a tono estaba simplemente en las páginas de Su fe en el estudio directo de las cosas se dos nos alcanza el deber de honrar su imlos libros, convertidos en autoridad aca afianza cada vez más en su espíritu. Geperecedera memoria.
tada, sino en la entraña de las cosas y los nial precursor del método experimental que Por eso causa extrañeza el olvido a es.
seres del universo, porque para él la fuen propulsaron después Bacon, Galileo y New te respecto del previsor Calendario Escolar te de toda certidumbre era la experiencia. ton, sobresale como estudioso sin par de la para 1952, en el que figuran nombres y Su ansia de conocimiento y su afán de naturaleza viviente e inorgánica, de la con acontecimientos de mucho menor significaprecisión se dilatan cada día, y hasta pa figuración interna y externa del cuerpo del ción, lo que también ocurrió en 1949 con recen sobrepasar lo posible. Su genio y su hombre, de los fenómenos meteorológicos el segundo centenario de Goethe y en 1950 energía abaten extraordinarios obstáculos y topográficos, y llega también a un eleva con el tercer centenario de la muerte de que se oponen al esclarecimiento de los fe do cultivo de las matemáticas y la astrono Descartes. Sería sensible que en el día de nómenos y las cosas. Descubre en cada in mía, elaborando sutiles estudios sobre la hoy los alumnos de nuestras escuelas e ins.
dividualidad humana la medida de su desóptica y la luz que guardan estrecha rela titutos no recibiesen, en forma de hometino: El que no puede lo que quiere, que ción con la perspectiva y la pintura. Pero naje, la lección de Leonardo. En una época quiera lo que puede. Su espíritu se ensan el genio de Leonardo es, ante todo, inte de miseria moral como la presente es edicha en el continuo trato con la naturaleza gración de experiencia y pensamiento; por ficante la memoria de una figura como la y la vida y se alimenta por sus ojos que eso siempre busca la relación, el equilibrio suya, que constituye, para las jóvenes geven, por su inteligencia que escruta y, so y la unidad. El artista y el sabio se com neraciones, un testimonio de alta humanibre todo, por su voluntad que vence. Este pletan con el técnico a través de innume. dad y de nueva confianza en los poderes sentido de la vida, a la vez contemplativo rables trabajos de ingeniería e invenciones superiores del hombre. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica