DemocracyEnrique EspinozaFascismNazism

130 REPERTORIO AMERICANO Protesta honrosa de los intelectuales de Chile (En Rep. Amer. libranza: Señor don Simón: Recomiendo a Listed al maestro Simón. Simón.
De sus tiempos de Chuquisaca nárrase que el filósofo vivía con doña María de los Santos Ronco, con quien contrajo legítimo matrimonio. es el caso que cierto amigote del director de la Escuela Modelo raptó a la dama, en vista de lo cual escribióle el pedagogo la siguiente carta y desvergonzada epístola: Muy estimado amigo: Sírvase devolverme a mi mujer, porque yo también la necesito para los usos a que usted la tiene destinada.
De usted atento amigo y seguro servidor, Simón Rodríguez.
Ante la posibilidad de que las potencias democráticas, y particularmente Estados Unidos, dejándose llevar por intereses de política interna, acuerden establecer relaciones diplomáticas, incondicionales, con la dictadura española, creemos que la opinión de todos los pueblos de América debe protestar, sin ambigüedades de ninguna naturaleza contra esa torpe condonación de uno de los crímenes de peores consecuencias en la historia de nuestro tiempo. Hubiese parecido imposible que alguien olvidara el hecho de que la conspiración franquista abrió una brecha en la Europa occidental a los avances del fascismo y el nazismo, y, sin embargo, apenas un decenio después de exterminada la plaga totalitaria, se insinúa la conveniencia de absolver al complice de ella, y esto de parte de un gobierno sobre el cual ha caido la responsabilidad de apuntalar el maltratado edificio de la democracia en el mundo.
En cuanto a los gobiernos hispanoamericanos, y especialmente al nuestro, debemos hacerles presente que al poner la dictadura en el mismo pie de igualdad con los gobiernos de elección popular, estaríamos reconociendo, implícitamente, ese principio falaz de la Hispanidad, tras la cual se ocultan hoy las últimas veleidades de predominio del inicuo amo español sobre los pueblos hispánicos de América.
Y, por fin, deseamos expresar que ha sido nuestra convicción más sincera, desde hace mucho tiempo, que jamás habrá una amistad sin recelos entre España y las democracias de América mientras no alumbre el día en que aquélla también goce de la libertad que nuestros antepasados supieron ganar para nosotros; el mismo ideal que Bolivar llegó a expresar una vez diciendo que no habría independencia completa mientras los hijos de América no fuesen a libertar a España misma de sus tiranos. Pedimos, pues, en nombre del honor y de los más altos intereses de la democracia, que no se reconozca en Franco a un representante digno de esa España ideal que aún está por nacer y que, en cambio, sigamos teniéndolo y tratándolo por lo que realmente es: el representante en su país de uno de los peores vicios traídos por el militarismo español a nuestra América: el cuartelazo.
De Bolivia se trasladó Carreño Rodríguez a la vecina república chilena, en donde también ejerció la profesión de maestro de escuela, siempre con lamentables resultados. En Valparaíso, por ejemplo, había decaído tanto la escuela que dirigía, que el pobre hombre se hallaba condenado a no salir de su casa, porque no tenía más que la chaqueta, el pancalón de tela grosera y el viejo sombrero que llevaba cuando le vi. escribió el señor Vendel Heyl, uno de sus biógrafos; quien como le observara que él era un caso más de la contradicción que siempre existe entre la conducta de los filósofos y las doctrinas que predican, aquél respondióle. Tiene usted razón: yo he deseado hacer de la tierra un paraíso para todos y la convierto en un infierno para mí. Pero ¿qué quiere usted? La libertad me es más querida que el bienestar. He encontrado entre tanto el medio de recobrar mi independencia y de continuar alumbrando a la América. Voy a fabricar velas. La profesión de velero es más noble de lo que a primera vista podría parecer. En el siglo de las luces. qué ocupación puede haber más hermosa que la de fabricarlas y venderlas?
Y, evidentemente, poco después abrió don Simón Rodríguez fábrica de velas de sebo, sobre cuya puerta colocó bien caligrafiado anuncio con esta leyenda: Luces y virtudes americanas, esto es: velas de sebo, paciencia, jabón, resignación, cola fuerte, amor al trabajo.
Muchas hambres soportó en tierras de Chile el maestro de primeras letras del Libertador. pesar de su carácter férreo, mitad de sabio y mitad de loco, la desesperación hizo, a la postre, presa en él, y cuando era ya más que sexagenario comenzó a cariciar la ilusión de regresar a Europa, en donde había gozado y sufrido por espacio de cuatro largos lustros.
Sin abandonar este último ideal de su vida, pudo, finalmente, viajar al Perú, de donde pasó a Quito y después a Colombia; y ya para morir, obscura y miserablemente, regresó a Huaymas, en donde entregó su cuerpo a la tierra en 1854, a los 83 años de edad.
Antonio Acevedo Hernández (Dramaturgo)
Francisco Coloane (Novelista)
Angel Cruchaga Santa María (Premio Nacional de Literatura)
Jacobo Danke (Poeta y cuentista)
Luis Durand (Novelista)
Ernesto Montenegro (Ensayista y escritor)
Dr. Yolando Pino Saavedra (Ex Decano de la de Filosofía)
Chela Reyes (Poeta y Secretario del PÈN Club)
Alberto Ried (Escritor y poeta)
Alberto Romero (Novelista)
Juvencio Valle (Poeta)
Enrique Espinoza (Fnsayista y Director de BABEL)
Eugenio González (Senador, catedrático y escritor)
José Santos González Vera (Escritor)
Nicomedes Guzmán (Novelista)
Ricardo Latcham Presidente del PEN Club y escritor)
Luis Merino Reyes (Presidente del Sindicato de Escritores)
Manuel Rojas (Novelista)
Mireya Lafuente (Presidente de la Alianza de Intelectuales)
Víctor Castro (Poeta)
Tomás Lago (Escritor)
Santiago del Campo (Dramaturgo)
Julio Salcedo (Escritor)
Santiago de Chile, 31 de marzo de 1950.
Octavio Jiménez Si quiere suscribirse al Repertorio Americano dirijase a FAXON Cº Subscription Agents 83 91 Francis Str.
Back Bay Boston, Mas.
Una suscrición al Rep. Americano la consigue Ud. con Matilde Martínez Márquez LIBROS REVISTAS Avenida Los Aliados Nº 60 Apartado Nº 2007 Teléfono FO 2539 La Habana, Cuba ABOGADO NOTARIO Oficina: 25 vaars al Oeste de la Tesorería de la Junta de Protección Social TELEFONO 4184 APARTADO 338 Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica