Calderonismo

220 REPERTORIO AMERICANO ca Divagación quijotesca Por José BERGAMIN (En El Nacional de Caracas, 25 de Setbre. 1956)
Si no se ha dicho aún, podría decirse historia de España. ise parecia a Don al revés, para que nos entiendan. ΕΙ que el impresionismo ahora redivi Quijote? Creemos que no. Ni a Don estilo de los simbolistas e impresio.
vo en París por los turistas paseantes Quijote, ni a su San Ignacio de Loyola, nistas franceses hizo época, porque hifue una máscara romántica que cubria que él llamó quijotesco. Pues unamu zo su tiempo. como se dice en francés, un rostro clásico. Claro que esto no es niza el libro de Cervantes Unamuno al o pasó a la historia como decimos en decir mucho, pero puede servirnos para querernoslo quijotear. Creemos que español. Lo que, a veces, es un deshainsistir en que sus valores tradicionales sí, tendría que citar páginas enteras del cer y un traspasar. El tiempo que pinta son los más auténticamente revolucio substancioso estudio de Pierre Emma según Goya, despinta. por lo mismo, narios de la Pintura. De aquella Pintu nuel para comentarlas. Cosa que no es se venga del arte que a él le hace, desra en su tiempo. De aquella que deci ahora mi propósito, ni cabria en un ar haciéndolo. Si pensamos que con el mos época inventada por su propio tículo como este. Prefiero recomendar tiempo se hizo el Quijote. como el vi.
estilo. No todo es posible en todo tiem su lectura. Como la de todo este nú no. el Quijote que leemos hoy) en po afirmaba un maestro famoso y le mero de Esprit que tiene muy pocc cambio, nos nos atrevemos a pensar que respondía otro: todo es posible en todo desperdicio. Pues hay en todo él una con ese mismo tiempo se deshara. Dóntiempo porque no es el tiempo el que copiosa y veraz información actual de de están los límites de ese hoy de la lechace un estilo, sino el estilo el que hace España. Aunque haya también en esa tura viva nuestra que nos parece un in o deshace, al tiempo. En una pa información, o en sus comentarios, a ve acabable, por acabado, horizonte inmorlabra, es la obra de arte la que bace épo ces demasiado españolismo. no lo tal. Podremos ascender al cielo de los no la época la que hace obra de ar olvidemos, el españolismo no es espa. santos con un Quijote en la mano?
te. La máscara hace al rostro como en ñol.
Como el quijotismo no es cer. Este quinto Evangelio Cristiano, coel cuento mítico de Wilde?
vantino. yo creo que ni unamunesco mo se le ha dicho al libro de Cervantes. Pues de qué quijotismo se trata? si nos trajo su buena nueva ¿cuántc El Quijote hizo época. Su época nc ne preguntaréis. De una caricatura. tiempo nos durará? Los que han reido lo hizo a él. Por eso el Quijote no es no siempre lírica. os diria, de la tris en su tiempo, cuando lo leian; los que quijotesco. Tampoco es quijotesco le figura de Don Quijote. Aquel que le sonreían o lloraban leyéndolo tiempos Don Quijote. Y, muchísimo menos, atribuye implícitamente, toda una filo después; nosotros que lo leemos ansioCervantes. En su admirable estudio so. sofía estoico cristiana que tal vez no le samente, interrogantes, sin risa, sin sonbre la invención del Quijote. Azaña corresponde enteramente. La exaltacion risa y sin llanto, tal vez. estamos connos enseña a no tomar, como suele de extrema que de la figura quijotesca nos formes todavía con su caricaturesca vercirse, el rábano por las hojas. no to hace Unamuno en su libro admirable sión romántica, prolongada hasta su examar el libro por su protagonista, ni a en su comentario marginal, si parece tación lírica unamunesca. las genesu protagonista por su autor. Exacta una caricatura lírica como diría el poe raciones que nos siguen? Leen mucho mente lo contrario que hizo Unamuno ta de Platero y yo. Pero no olvidemos los jóvenes españoles Cervantes?
en su libro famoso: La vida de Don tampoco aquella barpoquísima afirma. Leen mucho su Quijote. cómo Quijote y Sancho. Comentando este li ción del comentarista calderoniano: que lo leen. Cómo lo ven. Cómo lo sienbro unamunesco, mi querido amigo, el el que pone márgenes al resplandor, más ten?
poeta Pierre Emmanuel, ha publicado que lisonjea, agravia la claridad. Es Mi experiencia juvenil fue un fracaso.
ahora un denso estudio sugerente en la un agravio a la claridad del libro de Cer Porque lo confieso humildemente en revista Sprit (en su número de Se. vantes como acaso pensaba Azaña, lo mi juventud no me gustaba leerlo. Pretiembre dedicado totalmente a España. que no le perdonó don Miguel ese Don fería las Novelas ejemplares. luego tratando la Teologia Quijotesca de don Quijote crucificado y asi caricaturizado el Persiles. También el teatro.
ΕΙ Miguel. Pero era Unamuno quijotesco? líricamente por Unamuno?
grande, el de las comedias mayores. ¿Lo era, lo fue, acaso, unamunesco?
Pero volvamos a lo de la época y el ahora, al pensar, como me sugiere mi Aquel ex futuro Unamuno de que él estilo. El estilo del arte barroco hizo querido amigo el poeta Pierre Emmame hablaba en una carta abandonade época de barroquismo. no al revés nuel, en una Teologia Quijotesca de Unay solo en una senda del páramo de la Aunque a muno, me siento extrañamente inquieveces tengamos que decirlo to, angustiado, como si presintiese que iba a zozobrar por su lectura en un profundo mar tenebroso. no es así. No es así, porque la máscara cómica del Libro Maravilloso no oculta otro rostro dirigida por que el que quiso ocultarnos de sí mismo su propio autor. El del hombre invisiRAFAEL ANGEL LLUBERE ble que es todo hombre según el viejísimo Lulio. del hombre muerto para PROFESOR DE ESTADO el hombre vivo sólo para Dios, según Especialidad en la enseñanza moderna del Algebra, Geometría, el Vico. es esto Teologia quijotesca, Trigonometría, Algebra Superior y Cálculo Infinitesimal.
unamunesca, como dice el poeta Pierre Emmanuel. Sabelo Dios!
Barrio Aranjuez Teléfono 3963 París, septiembre de 1956.
a ACADEMIA DE MATEMATICA Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica