232 REPERTORIO AMERICANO En El Renacimiento con WALTER PATER Colaboración de José NUCETE SARDI Singular regalo intelectual es la lectura tonces conocido.
y relectura de un libro como El RenaciEs cabal, con vigencia actual, la definimiento por Walter Pater que, al estudiarción de Pater. No fué Bacon sino Pico della lo a través de determinadas figuras, abarMirandola el autor de aquella famosa exca todo el panorama artístico y filosófico presión: el hombre es el intérprete de de la época e indaga su amanecer y sus la naturaleza: nudo y vínculo del mundo.
proyecciones, su sentido profundo y aqueY es precisamente Pico della Mirandola llas raíces de Francia que precedieron la uno de aquellos que, tempranamente, in finura italiana y que Pater nos recuerda tentan reconciliar el cristianismo con la en el capítilo que dedica a Joaquín du Beidea religiosa de los antiguos griegos, in1lay, así como en las últimas páginas estutento que, sin duda, da comienzo a la hisdia a Winckelmann y su helenismo fertoria del Renacimiento. Pater, recordando viente nacido en Alemania y robustecido a Tomás Moro exaltador de la cultura itaen el jardín itálico, en Roma, creadora y liana que dedicó iluminado estudio a della transformadora, en la cercanía de aquella Mirandola, asegura que de él parten nueHélade ansiada a la cual nunca pudo lle.
vos caminos hacia la nueva Eleusis que togar por los caminos de la tierra sino por mó sede en la colorida y viviente Florenlas rutas de su espíritu inundado de luz cia, creadora del humus renacentista. Piática.
co amó y fué bien amado por las mujeres Si con las tempranas historias de Franen las estremecidas colinas del placer cuancia y su indagación sobre Pico della Mirando Florencia no había caído bajo el terror dola, Sandro Botticelli, Luca della Robbia, virtuoso y ascético de Fray Girolamo SaMiguel Angel y su poesía, Leonardo y vonarola. No había pasado aún la hora del Giorgione nos señala el espíritu y desarroCanto del Divino Amor.
llo de la nueva era renaciente, es en el capítulo que dedica a Winckelmann como heWalter Pater tras él, en las páginas de Pater, aparelenista, fruto germano nacido dos siglos desce aquel extraño Sandro Botticelli, el único pués del amanecer renacentista, en el que contemporáneo que Leonardo de Vinci menSe ha dicho que la crítica consiste en ver se encuentran sutiles interpretaciones de ciona por su nombre en el Tratado de la lo que fué el transplante helénico, la floel objeto como es realmente en sí mismo Pintura.
ración itálica y su proyección en Alemania, y es en tal forma que Walter Pater ve el Renacimiento. El esteta debe saber graBotticcelli buscó nuevas corrientes artísdonde Winckelmann significó la más alta ticas, se alejó de las dominadas por los duar las sensaciones de placer que producifra de expansión del espíritu helénico y contemporáneos de Giotto, inspiróse en sence la belleza. Han de graduarse, pues, la del mundo renacentista, siglos después del timientos propios y en la lectura de Dante milagro griego y del magnífico esplendor comprensión y las sensaciones que despier.
del Renacimiento.
ta ese maravilloso movimiento de espíritu y Boccaccio, expresó su sensación, cautivó que se llamó Renacimiento, movimiento por su delicadeza, llevó su melancolía a la Nos recuerda la apreciación de Hégel, en el cual, por varios caminos, la mente expresión plástica y cayó bajo la influenquien al estudiar la obra de Winckelmann, humana ganó para sí nuevos territorios cia mística de Savonarola que, en Florenasegura que éste por la contemplación de del sentimiento, las sensaciones y el pencia es división de la historia de la ciudad las obras ideales de los antiguos recibió samiento que avanzó con independencia así como el diluvio bíblico parte en dos el una especie de inspiración por medio de la más allá del sistema espiritual hasta enViejo Testamento, en el amanecer del muncual creó un nuevo sentido para el estudo. En Florencia puede hablarse de antes dio del arte. Debe ser mirado, continúa y después de Savonarola.
Hégel, como uno de aquellos que, en la Boticcelli es el pintor poético. Pater lo esfera del arte, han sabido iniciar un nue.
define como el artista que mezcla el en.
vo órgano al servicio del espíritu humano.
canto de la historia y el sentimiento exY según el comentario de Pater ese nuevo presión de poesía con el encanto de la sentido, ese nuevo órgano, es de lo más línea y el color expresión plástica Coadmirable que puede calificar cualquier mo ilustrador de la Divina Comedia no se esfuerzo crítico. Es Winckelmann, quizás, conformó con realizar su traslación pictóel mejor intérprete de lo helénico y del rica de las palabras de Dante sino que dió renacer italiano no sólo en Alemania sino su propia visión pictórica del pensamiento en el mundo nórdico de su época y Walter del poeta. Pintor visionario, de una mePater lo sigue en Inglaterra, en años poslancolía inefable es, a la vez, pintor reateriores, estableciendo la continuidad de lista que sabe hundirse en simpatía humauna comprensión y de una crítica humanas na y expresarse con fresca paganía en los y profundas que interpretan con la mayor tiempos iniciales del movimiento renacienfidelidad posible el espíritu helénico y sus te.
repercusiones estéticas en la Italia del Cuatrocientos.
Luca della Robbia con su escultura alLa prosa de Walter Pater, como dice Sycanza expresividad que en su arte lo pa.
mons, es consciente y perfecta desde el rangona con Boticcelli en la pintura y con principio y revela un raro temperamento Brunelleschi en arquitectura, según la afirque tiene muchas afinidades con el arte mación de Pater. El se enfrenta al problepictórico y poético de Dante Gabrie! Rosma universal de su arte. Establece un mo.
setti y a la vez, recuerda la gracia y la delidus escultórico que está entre los cánones cadeza de Watteau. El esplendor de Ruskin, griegos y la manera intensa de Miguel Anla nitidez de Arnold y la orquestal rotundige. Une los elementos de la serenidad hedad de Carlyle, sigue diciendo Symons, eslénica y los de la expresión individual intán presentes en ella. Como Baudelaire, tensa. Un encanto secreto vivifica su obra, trabajó una prosa poética, musical, sin ritdiferenciándola de la de Miguel Angel, cumo y sin rima, agrega el crítico. Así, no es yas características son dulzura y fuerza.
extraño que sea uno de los mejores histoLos verdaderos maestros de la piedra viva riadores e intérpretes del Renacimiento, José Nucete Sardi sabían adornar la fuerza con la dulzura.
clara aurora estética de todos los tiempos. En Costa Rica, enero de 1952) La poesía de Miguel Angel iluminaba el Itquech Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica