Civil WarLeninURSS

REPERTORIO AMERICANO 91 La casa de Máximo Gorki MAX Gorki vive a cuarenta kilómelos almacenes, repletos de mertros de Moscú, en un pueblecito cancías, y en las calles, llenas de llamado también Gorki, pero que, flores. Es muy corriente ver a Por MARIA TERESA LEON por una letra muda, en vez de hombres con un ramo de ellas; y significar De Todo. México, amargo quiere decir no a hombres bien arreglados, simontaña. Los pinos, esos acomno a obreros que al dejar la obra pañantes fieles de todas nuestras piensan en su casa.
salidas de Moscú, forman un bos.
Los escritores extranjeros esque espeso. Bajo los árboles, altán atentos, en torno a la larga gunos hombres recogen setas. Demnesa, a la voz de Gorki. Todos jamos a un lado del camino un piensan, estoy segura, en la macampo de tiro, y las casas de manera de contar aquellas pocas padera, propias del paisaje rural labras que se oyen y valorizan los ruso, nos avisan la llegada al largos silencios. André Malraux pueblo.
pregunta con insistencia asuntos La casa de Gorki es de estilo relacionados con la creación de Alejandro: columnas imperio, pala obra de arte. Gorki se ve cogiredes amarillo oro y alegorías do entre dos fuegos. Jean Richard blancas. Las flores se tumban en Bloch dispara desde el otro lado.
jardinillos bajos y los pinos se El tema se generaliza más. Hay yerguen dando guardia al repoque dar confianza al escritor. ha so de Gorki. Alexis Maximovich propuesto en el Congreso de esGorki, es el escritor más popular critores soviéticos la delegación entre los lectores de la Unión Sofrancesa. La libertad del escritor viética. Ningún escritor del munes una de las grandes conquistas do puede contar, como él las cbtenidas. Gorki se debe en cuenta, miles de ediciones y migran parte esta depuración del llones de ejemplares.
buen gusto que observamos. EsGorki nos recibe en la entrada.
cribe diariamente artículos para Tiende la mano cuadrada de artoda la prensa. En ellos defiende tesano, con esa confianza fraterla pureza del idioma, la calidad nal y abierta que tienen todos sus en el estilo, la originalidad en los gestos. Un aire polar de vieja temas. No importa que sus trabamorsa dan a su cara los bigotes jos lo tengan tan cansado que se espesos, rubios y caídos. Es tan encorve al subir las escaleras. En alto que, a pesar de encorvarse, su casa hay siempre diez o doce sus hombros sobrepasan nuestras obreros o escritores que le ayucabezas. Junto a él, una de las Máximo Gorki dan en la gran tarea de escribir más bonitas mujeres de Moscú, Madera de Max Jiménez una Historia de las fábricas rusu nuera, la que fué mujer de su sas y otra de la Guerra civil.
hijo muerto pocos meses antes. en la caradas españoles.
ticos. Porque hay un nivel de vis Pero su tarea menor la lleva perdesea la bienvenida nos en y alegría auténtico también. sonalmente. Defiende, ataca, coitaliano. Son recuerdos de Capri lle y en el teatro y en todos los da Nosotros notamos la diferencia de menta. Salen elogios o críticas y de Amalfi, de aquellas largas sitios de reunión se siente esta temporadas en la rivera amalfiigualdad moral de los hombres, las masas de 1932 y las actuales. suyas en todos los periódicos. Su tana cuando el levísimo clima de iguales auténticamente en la ma La tensión del esfuerzo ha cedi revista Más allá de las fronteras nera de sentirse ciudadanos sovié do. El bienestar se advierte er. es esperada con impaciencia por Nápoles cuidaba los pulmones helos miles de lectores que abren ridos del escritor, cuando hasta el su ventana al mundo a través de mismo Lenin conversaba con los sus páginas.
pescadores al sacar las redes de?
Me recuerda mucho la clase de agua; cuando Lunatcharski, busuna escuela esta reunión de intecando a Dios entre los cielos azules, los viñedos y los limoneros Neurastenia lectuales de todos los países. El delegado japonés toma apuntes encontró la Revolución. Todos estos recuerdos llegan en la voz como quien dibuja flores para bordados. La prima de Chesterque habla en el dintel, que luego nos ayuda a dejar los abrigos y ton, alta inglesa discutidora, plantea interrupciones continuamente.
nos hace subir por la escalera iluminada como para un gran baile El holandés Lask no puede estarson las dolencias al gran salón del piso primero.
se quieto. Teodor Pliyer, viejo La confianza entre los hombres que se curan marinero del Kaiser, investiga es una característica de este país.
rápia amente con con sus ojos azules las paredes, Se hablan con confianza. No milos balcones, las caras. Sólo Huran recelosos al presentado, ni le lin chi, la compañera china, paenseñan los dientes para devorece que no piensa ni la conmuerarles cuando vuelva la espalda.
ve ver al viejo Gorki, y sin emLas relaciones humanas se han bargo muchos miles de hombres acentuado a través de la lucha y en el mundo darían algo por estar el trabajo. Aquí no se piensa en así, mano a mano, separados por qué clase social encasillar la amael medicamento del cual una mesa del antiguo vagabundo.
bilidad con el presentado. La madice el distinguido DocEs viejo, está enfermo, se emociono se tiende a todas las manos.
tor Peña Murrieta, que na con facilidad; cuando los niEn una fábrica donde estuvimos, ños lo abrazan, llora. En el Conal final de la comida el cocinero greso, cada sesión empapa un pay sus ayudantes se sentaron en presta grandes servicios a ñuelo, sobre todo si son pioneros una mesa cercana para oír los dislos que le llevan flores o aerocursos. En la Konsomolska Pravtratamientos dirigidos seplanos de papel. Y, sin embargo, da. en una fiesta íntima, el cocivera y científicamente cuando habla parece muy seguro nero entró, al elogiar nosotros un de durar mucho tiempo. Sabe postre, para conocernos: Camaque tiene mucho trabajo cortaCansancio mental Surmenage Fatiga general KINOCOLA Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica