EDITOR: GARCIA MONGE REPERTORIO AMERICANO Albo Exterior: El semestre, 50 El año, 00 o. am.
CORREOS: LETRA En Costa Rica SUSCRICIÓN MENSUAL: 00 SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA El suelo es la única propiedad plena del hombre y tesoro común que a todos iguala, por lo que para la dicha de la persona y la calma pública, no se ha de ceder, ni fiar a otro, ni hipotecar jamás. JOSE MARTI.
Giro bancario sobre Nueva York. SAN PABLO, ABRE ESPAÑAS!
La Luz del Mundo Traducción de Acuña. Del precioso libro Famous Paintings. As seen and described by famous writers. Edited and translated by Esther Singleton. New York. Collier Son 1911.
Hunt nunca me explicó su trainesperada existencia de signifibajo. Doy de él la interpretación cado en una obra de arte puede que me parece ser la más evidenaparecernos al principio como una te. Al pie del cuadro se leen los exigencia injusta para el público hermosos versículos: He aquí, Yo espectador. Pero dentro de poco estoy a la puerta y llamo: si altiempo abrigo la esperanza de que guno oyere mi voz y abriere la el público inglés llegue a convenpuerta, entraré a él, y cenaré con cerse de una verdad muy sencilla, él, y él conmigo. Apocalipsis, la de que ningún gran hecho, ninIII, 20. En el lado izquierdo del gún gran hombre, ningún gran cuadro se distingue el portal del poema ni ningún gran cuadro, alma humana. La puerta está fitpueden ser profundamente commemente atrancada: sus cerrojos prendidos en un solo instante; y y sus clavos herrumbrosos; los treque todo superior deleite, sea en padores zarcillos de la hiedra la tienen aprisionada y sujeta a su la contemplación de la pintura o en cualquiera otra ocupación, es marco, todo lo cual demuestra que jamás ha sido abierta. Ciernese incompatible con un letargo total de las facultades intelectivas.
sobre ella un murciélago; crecen En cuanto a las cualidades técen el umbral zarzas, ortigas y plantas estériles la maleza de nicas de la pintura de Hunt, sólo la cual el segador nada recoge quiero pedirle al espectador que observe la diferencia que existe para llenar su mano ni el que ata entre el verdadero arte pre ralas gavillas para llenar su pecho.
Acércase Cristo a ese portal de no faelita y sus imitaciones. El verche, Cristo revestido con sus dadero representa todos los obeternos atavíos de profeta, sacerjetos exactamente como ellos apadote y rey. Lleva la blanca túnirecen en la naturaleza, según la ca que representa el poder del posición y la distancia que reEspiritu: el enjoyado manto quiere la composición del cuadro.
pectoral que denotan su investiLa imitación los representa co dura sacerdotal: la radiante corotodos sus detalles, como se ven a na de oro junto a la corona de estravés de un microscopio. Examipinas, que ahora ostenta tiernes nad de cerca la yedra que está şohojas para la salud de las naciobre la puerta del cuadro y no ennes.
contraréis un solo contorno claro.
Ahora bien, cuando Cristo peEs ella como un misterio exquisinetra en el corazón humano, leLa Luz del Mundo to de color, que adquiere realidad va consigo una doble luz. PrimePor Hunt con la distancia. De igual modo ro la luz de la conciencia que des examinad las gemas que adornan cubre el pecado, y después la luz el manto de la figura. Ninguna de la paz, la esperanza de salva ficar que la luz que revela el pe Creo que serán pocas las persotiene su forma completa y sin emción. La linterna, que Cristo sos cado aparece ante los ojos dei pe nas en quienes no produzca este bargo ni uno solo de esos puntos tiene con su mano izquierda, es cador como si atara la mano de cuadro una impresión profunda, diminutos de color verde la rela luz de la conciencia. Roja y te. Cristo.
una vez entendido correctamente.
presenta sino dos o tres variaciorrible es su llama; alumbra sólo La luz que irradia de la catePor mi parte pienso que es uno de nes de verde, con lo cual adquiela puerta cerrada, la maleza queza, por el contrario, es la esperan las más nobles obras que el arte re un valor misterioso y brillo.
la cubre y una manzana caída deza de salvación; sale de la corona sagrado ha producido en esta un árbol del huerto, indicando asi de espinas y, aunque sea triste, Las imitaciones espúreas del aren cualquiera otra época.
amortiguada y llena de suavidad, te pre rafaelita representan las que el despertar de la concienPuede contestárseme diciendo es sin embargo, tan poderosa que hojas más diminutas y los otros cia no sobreviene meramente por esfuma con su resplandor las for que las obras de arte no han de objetos con delineamientos prela falta cometida sino por la culmas de las hojas y ramas, que necesitar interpretaciones de es cisos, pero sin variedad alguna de pa heredada.
atraviesa, mostrando que cada ob ta indole. Es verdad que nosotros color y sin las reticencias y la Hállase la linterna suspendida jeto terrenal debe esfumarse con hemos estado acostumbrados a mi grandeza infinita de la naturaleza.
por una cadena, arrollada sobre esta luz, hasta donde ella se ex rar cuadros pintados sin propósila muñeca del Señor, para signi tiende.
to o sin intención algunos, que la John Ruskin IMP. LA TRIBUNA Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica