REPERTORIO AMERICANO EDITOR: García Monge Correos: Letra Suscrición mensual: 00 Representante en Hispanoamérica: Alfredo Piñeyro Téllez EXTERIOR. El semestre, 50 (El año, 00 am Giro bancario sobre Nueva York.
SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA Desde que Garrison fundó su Liberator no hubo paz en la Unión: cómo crecen las ideas en la tierral José Marfi.
EN EL BICENTENARIO DEL NACIMIENTO DEL PADRE GOICOECHEA Los poetas Antonio de Paz y Salgado Antonio Liendo y Goicoechea Capítulo XXIX de la Historia del Desenvolvimiento Intelectual de Guatemala, escrita por cl Dr. RAMON SALAZAR. Tomo La Colonia. Págs. 202 205. Guatemala. Tip. Nacional, 1897. Véase la entrega pasada)
No nos mueva otro afecto Que aquel que profesamos Al gran Dios que adoramos, Que a pesar de la sangre y de la carne, del vano anor propio el estallido, Ser quiere en lo que manda obedecido.
Fuera de esto es tan poca la amargura que encierra la obediencia a tal mandato, Que será un insensible, un mentecato, Quien no la encuentre llena de dulzura: No faltaron durante la colonia espíritus risueños. Se habla de un don Joseph Alejandro Mencos, que tenía una imaginación muy feliz y que ha dejado fama de hombre espiritual, que compuso algunas piezas poéticas, de las que no conoz.
co ninguna Don Antonio Paz y Salgado sirvió en la audiencia de Guatemala en concepto de letrado. Algún biografo entusiasta de este ingenio lo compara por sus gracias con Quevedo. Descartando lo que en ello puede haber de exagerado, no puede negarse que hay alguna pimienta en sus composiciones, haciendo caso omiso del gongorismo de ellas.
Afortunadamente he podido salvar de los destrozos de la polilla un librito de 135 páginas que lleva este curioso nombre: Puede la criatura Pagarle de contado Dios cuanto ha pecado.
En obras, pensamientos y palabras, Pues Dios al que a su próximo perdona Con perdón general le galardona.
HU TUWA CONCLUSION Ilus Madera de Max Jiménez Lo que dispenso es poco, Lo que Dios me perdona es infinito: Luego he de ser un loco Si por tan poco omito Pagar toda mi culpa y mi delito.
José Antonio Goicoechea.
RESPUESTA El padre Goicoechea ha dejado tamEl mosqueador añadido o avabién fama de haber sido un hombre chisnico con visos de espejo, papeante. Sus frases y agudezas corren de ra ahuyentar y representar boca en boca; mas nada hay escrito sotodo genero de tontos, molebre ellas, ni composiciones largas que redores y majaderos.
velen el genio de nuestro Fontenelle Tampoco, hasta ahora que yo sepa, se De él es el siguiente soneto: había conocido ninguna composición en verso de él. Yo he encontrado la que Más quisiera que un toro me embistiera, sigue, que inserto por lo que valga. La Que una mula cerril me derribara Que un trueno me aturdiera y espantara persona que firmaba con las iniciales que una calentura me venciera. de nos es desconocida.
Tus versos, padre amable, Que jamás borraré de la memoria, Son bálsamo admirable, Que apliqué cual venido de la gloria.
Tenía yo la herida De mi bonor en la parte más sensible; al verla repetida Juzgué mi curación por imposible.
Mas cuando me creía Mortal y sin remedio humanamente, Con grata melodía Cantaste, y quedé sano de repente.
Bendiga Dios la madre Que ha dado a desgraciados y dolientes Tan bondadoso padre, Consuelo universal de nuestras gentes.
SOBRE EL PERDON DE LAS INJURIAS De cornadas ningún caso hiciera, Ni onida, ni patada nte matara, Relámpago, ni rayo me asombrara, Ni aun con la fiebre ardiente me muriera; Como al leño que viéndole encendido Por el lado que no arde le cogemos, Al enemigo así tratar debemos Por el extremo suave y comedido: Nada fuera capaz de que a mi brio Se opusiera; ni aun el mal postrero De la muerte temiera en desafio; de Impavido estuviera, y siempre entero El valor se portara como el mío, sólo me asustara un majadero.
Que si él endurecido Despreciare altanero Nuestro amor verdadero, Nos queda el solidísimo contento Que si le daña el odio que conserva, Amarlo nos mejora y nos preserva.
El lector juzgará por el soneto preinserto de la mayor o menor espiritualidad de Salgado. Su prosa, como ya lo indiqué es pedantesca; pero con un poco de paciencia y otro de buena voluntad se le puede extraer jugo. Hay páginas en su extraño librito que tienen salero.
Véase Anales de la Sociedad de Geografía e Historia de Guatemala, Año V, Diciembre de 1928, Tomo V, número 2, páginas 214 y 215. Lleva por título: Escritores del antiguo reino de Guatemala. Extracto de la Biblioteca Hispana Americana, de Beristain, publicada en México en 1816. En esta bibliografia habla algo de su biografia y de las obras que escribió.
Mas siempre es necesario, en mi concepto, Para que nuestra acción resulte buena, Amarle porque Cristo así lo ordena Con palabras formales de precepto: Imprenta LA TRIBUNA Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica