CapitalismCentrismCommunismDemocracyFascismImperialismIndividualismLeninLeninismMarxMarxismSocialismVíctor Raúl Haya de la Torre

REPERTORIO AMERICANO 231 vista Hoy de Santiago de Chile, y por otros periódicos más. El comentario de Zum Felde parece inspirarse en las mismas ideas de Luis Pachacutec, cuyas ideas han sido recogidas en el New York Times. James y por la propia redacción en su comentario del 21 de enero de 1935. El resumen de ese pensamiento es el siguiente: tesis: comunismo; antitesis: fascismo; síntesis: aprismo. Es el aprismo una gran organización política de izquierda ni demagógica ni demagógica. inspirada en un criterio de socialización progresiva de la estructura del Estado hasta donde sea compatible con los derechos fundamentales de la libertad humana. como dice Zum Felde? Hay inucho de eso. Pero, es necesario aun esclarecer ciertos conceptos: por ejemplo, el de democracia, el ae dogmatismo, el de dernagogia y el de marxismo, mo.
liquidada y el individuo, como entidad política, desaparece. No existe más que un interés, más que una doctrina, más que un derecho: los del Estado.
He aquí que el mundo y la concepción política han sufrido súbita transformación.
Ante tal dilema, Zum. Felde concluye: en tales condiciones sólo una táctica podría resolver el problema vital de la Democracia salvando lo que ésta tiene de más esencial y precioso: la libertad del hombre: y conteniendo en los extremos las tendencias despóticas en pugna. Esa táctica es la asimilación del marxismo por vías legales, la forma económica del Estado, llegando a una socialización racional de su estructura, sin que pierda por ello, las virtudes políticas de la Democracia.
Ahora bien, el parlamento de Zum Felda requiere una ampliación.
La dialéctica en funciones. Uno de los primeros teóricos revolucionarios, que admitieron el simplismo de las soluciones dilemáticas, fué precisamente Lenín. En su libro El capitalismo del Estado y el impuesto en especies afirma el creador del Estado Soviético que es pueril creer que el mundo oscila únicamente entre el capitalismo y el socialismo, puesto que hay, en la organización de la sociedad, matices ineludibles que son, precisamente, los que sirven para controlar el juego de la política.
La oposición entre fascismo y comunismo, es, dialécticamente, un hecho, pero políticamente un error.
Es como aquella frase que el propio Lenín esclameció en un artículo recogido en el folleto Dos tácticas. la liquidación del parlamentarismo. Históricamente, sí esta liquidado como la democracia política: pero lo liquidado históricamente subsiste en el hecho por muchos años después de la liquidación histórica. Tal ei caso idel Parlamento. tal, el de la democracia política.
Sí; es verdad y nadie lo duda: la deinocracia política está liquidada. Pero, no está su reemplazo en la demagogia ni en el terror blanco o rojo, ni mucho menos en el descolorido centro. Para remediar esta crisis y afrontar las graves tareas del porvenir hay que limpiarse de prejuicios y de palabras más o La realidad hay que mirarla cara a cara. De ahí la utilidad de éste debatle y, a mi juicio, el dubitativo contenido del titular del artículo.
El aprismo como síntesis. Dialécticamente, el comunismo representa la tesis. El fascismo, la antitesis. Si esto es así, lo interesante es resolver cuál es la sintesis. Hace varios meses, bajo el título de ¿Son marxistas los apristas?
publicó Crítica de Buenos Aires, en un artículo firmado por Luis Pachacutec. pseudónimo de un líder del Partido Aprista Peruano. un juicio acerca del marxismo en la política actual dei mundo. Ese artículo ha tenido fortuna y ha sido reproducido por La Nueva Democracia de Nueva York, en su número de enero, de 1935, por la reEl miedo al marxismo. Se está creando en América, a base de la malicia unida a la ignorancia, el tabú del marxisSe teme la palabra marxismo.
Quienes tienen un concepto primitivo del material histórico pretenden que éste niega el juicio del espíritu, sin recordar que, hasta en la propia definición de la mercancía, el propio Marx admite el factor espiritual, condicionado por el económico. Olvidan que Mussolini, el antimarxista según unos, no vacilo en declarar a Ludwig que, sin su educación marxista habría sido imposible su triunfo. Si Zum Felde hubiera leído a Luis Pachacutec, a Haya de la Torre, en su artículo No todo marxismo es comunismo. habría hallado más exactas definiciones. Hablar de dogmatismo y de marxismo es su adaptación constante a la realidad, la dialéctica, la negación de la negación. el autocriticarse Dogmático es, según Haya de la Torre, un marxismo congelado. frase con la que califica la tarea de la Tercera Internacional; o, con expresión de Lucien Lauret, una camisa de fuerza leninista. De ahí que la pugna no sea. y en ello acierta Zum, Felde, entre el marxismo y el fascismo, ambos cegados por el dogma y la demagogia, pretendiendo que el mundo sólo tiene dos salidas, la tesis y la antitesis, sin acordarse que la solución es la síntesis, lo cual no comporta ningún centrismo ni ninguna transación, sino, simplemente, una nueva adaptación a la realidad, una creación revolucionaria: No hay, pues, tal pugna entre el fascismo y el marxismo. La solución a mericana al menos, está lejos de ambos.
Sentido de la democracia funcional. En la democracia? De ningún modo si por democracia se entiende la demociacia política igualitaria. En la democracia leconómica? Sí; a condición de que sea la democaaca funcional. Este nuevo concepto, que es diferente al corporativismo fascista y a la organización soviética, presenta una solución diversa y realista. La democracia funcional respeta como principio esencial, el marxista del trabajo, germen de la riqueza. Si el trabajo crea la riqueza, el trabajo es la fuente de los derechos políticos, y la organización del Estado debe estar limitada por las exigencias del trabajo, a las funciones de cada cual. Así desaparece la demagogia, sin caer en la tecnocracia un tanto ridícula, pero reservándose la técnica el rol preponderante que le corresponde. El Estado recibe un robustecimiento formidable, sin perjuicio de los derechos fundamentales de la libertad humana. que quedan, desde luego, sometidos a los intereses de la colectividad. Entre la exigencia de un individuo y las necesidades de la mayoría, el Aprismo apoya directamente los más, contra los menos, reproduce el problema de la democracia contra la oligarquía, pero una democracia que ya conoce el fracaso de la democracia política y se afianza sobre sólidas bases económicas. Izquierdas? Desde lue go: porque es colectivista antes que individualista; porque reclama el derecho predominante del trabajo; porque admite la lucha de clases; porque cree en el materialismo histórico; porque es rotundamente antiimperialista, funcionar lista, internacionalista. Pero, sin dogs ma y sn congelamiento, vigila la evolución del mundo y, la realidad, de la propia teoría que tiene que ajustar su paso a la realidad, sin caer en el ridículo de cncasillar la realidad a los libros. Ir a la socialización en países cuyas fuentes de producción están bajo el dominio del imperialismo, implica una etapa precisa de nacionalismo, económico defensivo, que, en América es un nacionalismo continental.
El aprismo representa, pues, dentro de la exposición de Zum Felde, la solución del conflicto actual. El no lo ha dicho, pero bastaría repetir ls palabras de Haya de la Torre, el conductor del movimiento aprista, para darse cuenta de que realísticamente. dialécticamente, es decir, marxistamente, entre la tesis comunista y la antitesis fascista, ambas cerradas, intransigentes y estériles a fuerza de Idogmáticas y encastilladas en sus prejuicios, surge como la via ancha y libertadora, contra los caciquismos y ei imperialismo absorbente, contra las oligarquías y los latifundistas, el aprismo síntesis de la pugna actual teórica y táctica que merece ya la atención de los pensadores políticos del mundo, aunque déspotas voraces y oligarcas ignorantes y maliciosos cierren oídos y puertas a lo imponderable que penetra siempre, que penetra y se impone porque es la vida misma. su nacionalismo continental, sin exclusivismos, sin bloques del Pacífico. ni bloques bolivarianos constituye el frente antiimperialista para poder alcanzar la meta de la política social. Si pues, tenemos un solo y grande enemigo, formemos una sola y grande unión.
menos sonoras.
EN BUENOS AIRES, Rep. Argentina, pues Repertorio Americano, a la Dour PRIAL PAN AMERICA. Bolivar, 375. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica