REPERTORIO AMERICANO 108 of pendix invasion and Game of Una nota sobre el genio de Hudson fueron largo oi repe CH surgor de las aguas renovaba ar he conoa ralmente. a la alondra y al jilguero.
Age Canónima. 1887: Argentine Ornithology 1902: Hampshire Days, 1903; Green ManSobre la chimenea de su habitación en vol. en colaboración con Sclater, 1888 1889; sions, 1904; Little Boy Lost, 1905; The The Naturalist in La Plata, 1892: Fan (The Penzance, donde pasó sus últimos inLond End, 1908: Afoot in England 1909; Story of a Young Girl Life. vol. firma.
viernos, figuraba una acuarela con el Shepherd Life, 1910; Adventures among do con el seudónimo Henry Harford, 1892: Birds, 1913; Far away and Long ago. Hishornero, nuestra ave nacional, de la Idle Days in Patagonia, 1893: Birds in a cual, a 50 años de distancia, describía tory of my Early Life. 1918: Birds in Town Village, 1893: British Birds, 1895; Birds in el canto con la mayor realidad.
London, 1898; Nature in Downland, 1900 and Village, 1919; The Book of a Naturalist, Por todo esto su predilecto Cunning Birds and Man, 1901: El Ombú, inclu1919: Dead Man Plak, 1920; Birds of La yendo también hame Graham cuando le menciona en Story a Piebald Plata, 1920: Traveller in Little Things, sus obras reiteradamente le designa Horse, Niño Diablo, Marta Riquelme, Ap1921: Hind in Richmon Park, 1922 (obra to EI Ombu, The English póstuma. y algunos breves opúsculos editacomo Argentino.
The El Pato) dos por la Sociedad protectora de las aves.
No hace muchos años, una tarde, arrastrando sus achaques y las largas colas de un jaquet fuera de moda, se instalaba en un ómnibus y como encontrara lenta la marcha del vehículo, en un momento de ausencia, castigó con el Prefaclo a la 4a edición del libro traveller in little things. Un comisionista de cosas pequenas o de menudencias) que se publico paraguas al asiento, como si fuera por primera vez en 1921. Traducido especialmente para Rep. Am caballo: quien sabe qué añoranzas, qué ensueños resucitaban los días que se Cuando, muerto Hudson, contemplé más encantador de los compañeros. los dias remotos cuando, en más su rostro mientras yacía en su lecho, conoci y ame intimamente como amide un crepúsculo pampeano, mudentro del cuarto sombrio, me dió la go y no recuerdo un solo momento de chachote cabalgaba un picazo para lle impresión de la máscara serena de un tedio, pesadez o desagrado en su comgar a su laguna de Chascomús, sere vigoroso cacique. Todas las líneas es pañia. De la fuente de su espíritu brona y reluciente, y al avanzar entre jun tilizadas que surcaban su amplia fren taba siempre un agua fresca y limpicos y totoras se alborotaba la inmensa te, su pensativa tristeza y el vivo ful da. En veinte años nunca le oi quietud en creciente clamore su semblante se habían suavitirse. Todo porque su espíritu era amgiendo de entre las gallaretas zado.
Yacia como un jefe de la plio, rico y nuevo en sus respuestas a negras, que rayan la superficie con este Edad de bronce, que durante largos la naturaleza y al drama del vivir; porla de cspumas: becasinas de vuelo en años, buenos y malos, ha conducido que se perennemente en el zig zag. rauda bandada de patos su tribu: y al que ahora sólo quedaban ritmo fecundo de la naturaleza: porque paso dorados desgranando la lluvia los antiguos ritos, el el fuego purificador, el clamor y la inquietud del egotismo de sus notas: cisnes de plata, los de pico el altar en la colina, y la eternidad de menos que en nadie deformaban en él rojo y los otros nigricollis en larga y sol.
sus sentimientos.
hilera, marcando el cielo con sus cuellos Sí: Hudson fué un jefe entre sus comDe todos los escritores que como guiones: ibis de bronce: tropeles pañeros, pero las tribus que cobijó bajo cido, Hudson era el que menos se preode gaviotas que atruenan los aires el manto de su comprensión, de su apa cupaba de la fama o la reputación. En y por sobre el sol poniente sionado interés, por las que habló y lu Londres había sufrido terriblemente al una parábola de flamencos Phoenicop chó la vida, no eran criaturas hu principio, pobreza y soledad y en el terus, alas purpúreas: y en las alturas manas sino vast tribus de la natura fondo de su espiritu yacía el recuerdo los chajás, reyes del vuelo, giran en am leza selvática, especialmente, del reino de sus fracasos cuando sus memorias plias calmosas espi compás de de los pájaros, perseguidas, destruídas y artículos apenas le valían el salario sus gritos de alarma. Entretanto, en la extirpadas por el hombre.
de un deshollinador. Cuántas medioorilla, el muchachote. trémulo, devora La fuente central del genio de Hud cridades victorianas, ahora olvidadas, con los ojos, con todos sus sentidos y son era el fuego interior de su pasión eran entonces exaltadas hasta el cielo!
graba en su alma para siempre, la indealerta, los sentimientos de amor, enojo Pero aun cuando alcanzó el éxito, y sus leble apoteosis del sonido, del color, del y piedad que nacían espontáneamente libros le producían un poco, continuó del observador cuando condenaba la siendo el hombre menos afectado por el Esas lagunas cuyas visión no se le brutalidad del hombre y que chispeaban aplausc. ΕΙ siguiente pasaje de una borró jamás 1: Terminaré mi vida, en sus ojos en respuesta a todo lo bello carta que me dirigió el 11 de octubre separado de ellas por miles de millas, de la tierra: la mujer o la naturaleza, los de 1910. es demostrativa de su actitud: acariciando en mi corazón hasta el fi pájaros o las plantas, los árboles o los Usted ha elogiado tanto Shephnal, la imagen imperecedera de una hercielos.
erd Life que he tenido que esperar mosura, que ya desaparece de la tie Este inagotable manantial de senti y enfriarme para contestarle. Pero usmientos era lo que hacía de Hudson el (Pasa a la página 109)
Hoy descansa (1) en el Cementerio de Warthing junto al mar, en un rincôn por él elegido y bajo la sombra propicia de un pino donde las tórtolas lloran In angello cum libello. Kempis.
Esperemos que el ritmo de su prosa perdure mientras resuene el habla inEn un rinconcito, con un librito, glesa y esperemos también, que mientras en tierra argentina una calandria un buen cigarro y una copa de cante en el ombú, haya un admirador para el Viejo Hudson: Hijo de la Pampa Jorge Casares La lista completa de las obras publicadas por Hudson es la siguiente: suave. delicioso. sin igual The Purple Land, vol. 1885; Crystal FABRICA NACIONAL DE LICORES San José, Costa Rica (1) Hudson murid el 18 de agosto de 1922 en Tower House, 40 St. Luke road, Londres.
graznidos toda la movimiento.
tra Anis Imperial