BourgeoisieCommunismEngelsMarxProudhonSocialismWorking Class

REPERTORIO AMERICANO 149 Carlos Marx y la acción del proletariado justicia. estatutos.
modo práctica que escrito lo exigen pesar de recía a Por ALBERTI De Cursos y Conferencias, excelente revista del Colegio Libre de Estudios Superiores. Buenos Aires. Véanse las dos entregas anteriores)
Al fundarse la Internacional Marx Ha hecho algunas concesiones, sin que se erige muy pronto en su principal ninguna de ellas alcance a ser fundaorientador. La influencia de su nombre mental; ha tenido que intercalar alguy la seguridad de sus concepciones co! o nas frases inofensivas, como obligacan en sus manos la dirección de esa ción. derecho. verdad. pero todo está disporal y de organización, para la cual redacta el Manifiesto Estos que no perjudique el sentido gedocumentos están más vinculados con la neral. escribía Marx a Engels. Marx el Manifiesto lo este fué escu no tuvo que llegar a prohijar y no para una Vanemunista; de de habría hecho la tesis de los socialistas luchadores capaces de de elevarse hasta ingleses y franceses, según la cual es nesus concepciones teóricas generales, cesario luchar por el socialismo porque mientras que en la exposición que Marx la verdad, la justicia y la moen nombre de la nueva organiza ral. Esto habría significado un retroce ción tiene que contemplar corrientes di so al utopismo, mucho antes superado versas y hasta opuestas. pesar de este por él, desde el momento en que esta inconveniente Marx lögra deslizar en el bleció que las nuevas formas sociales sur nuevo trabajo las ideas fundamentales gen de la vieja sociedad, creadas por el comunista. Cola conflicto entre el modo de producción mienzalo con una ojeada a la situación y las fuerzas productivas entre las cua de los trabajadores: Es positivo que la les las más importantes son los hommiseria de la clase obrera no disminuyó de 1848 1864, y, sin em bres. Marx sacó invulnerable este prin en el período cipio, que ya había expuesto en la Críbargo, ese período excepcional no tiene tica de la filosofía del derecho de Heejemplo en los anales de la historia por gel. y alimentados por él el Manifiesto el progreso rea realizado por la industria inaugural y los estatutos conservan su y el comercio. el Manifiesto inaugu vitalidad hasta nuestros días.
ral establece justamente las reivindicacio La unidad de la clase obrera ya apanes alrededor de las cuales debe efec a los ojos de Marx como una de tuarse la unidad de la clase ohrera, y las condiciones de éxito; pero de ningún ello sin renunciar a ninguno de los prin modo la unidad que implique renunciar cipios teóricos formulados en el Mani a la lucha: Puesto que el éxito del mofiesto famoso del 48. En la redacción vimiento obrero de cada país sólo puede de los estatutos, cuya discusión fué enasegurarse por la la fuerza resultante de carnizada, Marx tuvo que poner a prue la acción de la asociación; que, por ba toda su su habilidad, acaso con más otra parte, la utilidad del consejo cenapremio que para componer el el Manifies tral depende de su vinculación con la to inaugural.
En cada uno de estos docu sociedades obreras, ya locales, ya nacicmentos salidos de su pluma palpita vi nales, los miembros de la Asociación vamente la idea central de su pensamien internacional deberán esforzarse, cada to: conquista del poder político por el proletariado. Pero si en el Manifiesto uno en su país, por reunir en una asocia ción nacional las diversas sociedades inaugural esto está expresado casi con.
tanta agresividad como en el comunista, en los estatutos no se dice con igual En los sucesivos congresos de la Internacional volvieron a desenvoltura que el proletariado ha surgir, con con conquistar el poder político. Considetumacia renovada, las diferencias entre rando comienzan los estatutos que la los puntos de vista de Marx, que sin aleemancipación de los trabajadores debe jarse de la realidad abrazaba siempre el ser obra de los trabajadores mismos: que los delegados que querían limitar la acción esfuerzos de los trabajadores de la clase obrera, para conquistar su emancipación no han de a constituir nuevos privilegios, zar la lucha política, como en el caso sino a establecer para todos los mismos de los proudhonianos, otras veces por radicales bur derechos y los mismos deberes; que la coaligarse con los partidos supeditación del trabajador al capital es gueses, como sucedía con las uniones la fuente de toda servidumbre política, inglesas, en vez de mantener la amplitud moral y material; que, por lo mismo, la del movimiento y también su independencia.
emancipación económica de los trabajadores es el supremo objetivo al cual Los proudhonianos propugnaban con debe subordinarse todo movimiento pofrecuencia puntos de vista reaccionarios.
lítico, como medio (5. Marx había acorralado a su maestro con guran esos dos términos. En el libro de Riazánof. 5) Estas dos últimas palabras, acomo medio, Marx y Engels, versión castellana de Alno figuraron en la traducción francesa que se hizo berti y Delio, Nota preliminar de Anibal de los estatutos; de igual forma se divulgo en Ita Ponce, edición Claridad, se pueden ver las curiolia, España y Bélgica. En una traducción castellana sas incidencias que esa omisión originó y las acuque conozco impresa a fines de 1923, tampoco fi saciones de que Marx fué victima injustamente.
las páginas incontrovertibles de Miseria de la filosofía. demostrándole que sus concepciones no superaban el punto de vista de la economía burguesa y que eran inferiores, desde luego, a las de economistas como Ricardo; que su posición respecto de las huelgas y las coaliciones obreras era reaccionaria porque ni siquiera comprendía su función. Fieles a Proudhón, los delegados franceses al congreso de 1866 condenaban el trabajo de la mujer (porque la naturaleza la ha hecho para el hogar) y rechazaban los sindicatos y las huelgas; hasta se opo nían a la limitación legal de la jornada de trabajo. En contra de tan absurda posición el congreso mantuvo y aprobó casi todos los puntos de un informe detallado presentado por Marx, informe que colocaba en primer plano todos los asuntos que provienen de las reivindicaciones de la clase obrera.
de las arremetidas de los proudhonianos franceses, salió triunfante el punto de vista de Marx. Aquéllos eran enemigos de la organización de clase del proletariado y ponían todas sus esperanzas en la cooperación y en el crédito, y era inútil que Marx hubiera dicho en su obra contra Proudhon que sólo reunida la masa obrera se erige en clase para sí; como su maestro, ellos tampoco comprendían el significado de la lucha de clases. Tan lejos estaban de esa comprensión, que hablaban de contrato libre y justo entre el capital y el trabajo sin reflexionar para nada en la distinta posición de los contratantes y con incomprensión tan grande como la de aquél del mecanismo de la producción capitalista. Marx establecía con su vigor incomparable el origen y la función de los sindicatos.
Nacidos de la lucha entre el capital y el trabajo asalariado, a medida que avanzan su organización se hace cada vez más consciente y se destaca su eficacia para frenar la explotación; de este modo llegan a ser los principales núcleos de resistencia contra el vasallaje del capital Pero se manifiestan también sus deficiencias cuando se transforman en organismos estrechamente corporativos y descuidan los intereses generales del proletariado con el propósito de lograr ventajas para un determinado sector; este procedimiento beneficia a la burguesía, pues así se resiente la solidaridad del proletariado.
Marx no preconiza la dependencia de los sindicatos del partido político de la clase obrera, pero no calla que han de interesarse por la lucha política, porque además de que esta amplitud los saca del círculo de los intereses que buscan satisfacción dentro de la sociedad bur guesa para hacerlos luchar por su transformación, todo movimiento económico se convierte inevitablemente en lucha política. La Internacional recuerda a to dos sus miembros dice Marx que en el obreras existentes.
de unas veces por recha