REPERTORIO AMERICANO El hombre y la gente Por ORTEGA GASSET En Valladolid, en el Teatro Pradera, ha dado (mayo 20 de 1934. Ortega y Gasset.
una conferencia, de la cual reproducimos el extracto publicado en El Sol, Madrid.
de ella.
espíritu viejos.
Le acontece esto alguna Por Giner 23 VI 925 juez Vengo aquí después del silencio que me he impuesto por razones que no son de numerar para favorecer con mi presencia la idea elogiable de que los alum nos de la Facultad de Historia de esta Universidad puedan realizar el proyectado viaje a Grecia Creen los organizadores que mi presencia en esta tribuna podria contribuir a aumentar sus medios económicos, y por eso he venido, atendiendo al amable requerimiento.
No debo ocultar la preocupación que tengo. Desde hace diecisiete años, Europa se ha dedicado a animar a la juventud. Existe ahora un verdadero culto a los jóvenes. en la historia se han registrado tiempos de jóvenes y de Grecia vivió dos centurias mirando a sus muchachos. Le fué mal. Sucumbió políticamente en manos de un joven, Alcibíades.
Roma se mostró dura para el joven y buscó apoyo en la madurez, Esa Roma de los páter y senadores, no de los mozos, se hizo dueña del mundo.
Han pasado los años en que ha habido una excesiva preocupación por la juventud. Todo se inspiraba en ella, y hasta los padres, fingiendo juventud y para ponerse a tono con las circunstancias, vestían, hablaban y se comportaban como verdaderos jóvenes. vida estúpida de estos quince años. cock tail. de desnudismo en las playas, de diversión insana. sin acordarse que sobre las cabezas y bajo los pies de los europeos se cernían problemas tremendos y la vida se mostraba más áspera ceñuda.
En 1928 todos creían que se había llegado la prosperidad definitiva. Pocos meses después los ejércitos de parados, las desesperanzas, las angustias, se ofrecían como nuevas constelaciones, cuando constantemente habían sido fieles acompañantes de la humanidad.
El joven cree que todo el mundo es suyo y se apunta un tanto bien gana do. Este es el error que ha sufrido Europa. Precisa una reforma en el estado del ánimo europeo. Hay que modificar el de la juventud. Recordemos la célebre frase Príncipe, el porvenir no Toda virtud tiene sus méritos. Confesemos que en el subsuelo de Europa laten fermentos de orientación hacia la madurez. En realidad, en la historia se producen ana anacronismos.
Mientras una se presenta en la superficie, en lo interior se originan nuevas formas.
Al hombre no le basta con ser joven; precisa articularse con otras generaciones ya maduras La realidad es que de pronto han comenzado a fallar cosas. Las formas esta es la ya; es lo que a alguien le acontece tal y como le acontece. El hombre en toda vida humana no es una cosa. no es su cuerpo, ni siquiera su alma cada hombre le acontece encontrarse con su cuerpo o con su alma, y tiene que arreglárselas con ellos sean como sean, co mo se encuentra teniendo que vivir en un paisaie, vez de clima áspero, en un tiempo determinado, tal vez de grave crisis económica. No hay, pues, vida humana sin un sujeto que la vive.
Este es el elemento más imprescindible y no vale hablar dei rit de lo humano, como suelen hacer los alemanes, sin precisar quién es el sujeto.
Ahora bien, sólo la vida individual presenta un sujeto que la vive. Si la vida es acontecimiento, no hay propia y rigurosamente hablando vida humana, si no hay ese algo determinadísimo a quien le lo otro. Pero cuanto hacemos al vivir lo tenemos que decidir no nos es dado ya deci y para decidirlo nos es menester razón o motivo: de otro modo no po1. Ortega y Gasset ouo modo no po dríamos dar un solo paso.
Es cir, quc el hombre necesita justificar sus propios actos, no ante un tribunal externo, ni económica y estatal han comenzado a siquiera ante un especial íntimo que fallar y se rompen y desconciertan. Se sería la conciencia moral. Al hablar de moral solemos referirnos a ha palpado la insuficiencia. Habrá una norma que exterior la realidad de la vida; es demirar la espalda de las cosas a través cir. se suponía que el hombre puede de de otra generación que se halle en plehecho vivir sin moral, sin justificación, na madurez, a reserva de que si sus actos se acomo Sólo una cosa ha dejado de fallar: la ciencia, cada vez más previsora. Sus daban a las normas éticas, su vida adquiría un mérito y merecía un premio: la técnicas, sus nuevos inventos siempre alabanza pública o la salvación en la ulmirando a la porvenir. Por qué no nos travida.
abrazamos a ella?
Pero el caso es que en todo instante Lo que importa es preparar el por tenemos que elegir lo que vamos a la venir cer en el siguiente, ello nos obliga, Entra después en el tema a que alu queramos o no, a justificar el acto que de el título de su conferencia, El hom elegimos ante nuestros propios ojos: es bre y la gente. Bajo esta denominación decir, hallar que tiene sentido, preferirde apariencia inofensiva se oculta el lo a otro, a otro cualquiera en aquel blema más grave del presente y de instante de nuestra vida. Por consi todo el futuro próximo oteable: el pro guiente, vida humana, que es no blema de la formidable dualidad que debe ser justificación, es también presenta individuo y colectividad. ΕΙ inexorablemente e ineludiblemente resseñor Ortega ha dedicado estos dos úl ponsabilidad. Soy yo quien hago, llevo timos años un trabajo muy intenso a a pulso y en vilo, quiera o no, mi vida.
esta cuestión que lleva a la instauración Soy yo y yo sólo quien tiene que vivir de una nueva sociología, y ha querido la, tengo yo que aguantar el dolor que ofrecer las primicias de su labor, bien sufro, y nadie, rigorosamente hablando, que refiriéndose sólo al tema fundamen puede compartirlo. Ni menos puede ese tal que juega el papel decisivo en to otro decir por mí lo que voy a hacer y das las cuestiones secundarias provoca ser ni pensar en lugar los pensa das por aquella dualidad.
mientos que tengo que pensar para poEvidentemente, lo que se llama heder andar por mundo.
chos sociales o colectivos son fenóme suma, que la vida es intransferinos de vida humana y no hechos de la ble, que la vida es es soledad. Al encon naturaleza física o simplemente biológi trarnos en nuestro mundo otros homca; pero cuando se analiza lo que es la bres, es decir, otros seres que juzgavida humana, pronto se advierte que no mos semejantes a nosotros, anhelamos puede haber en ella nada que no sea al comunicación con ellos y dar a nuestra go que alguien hace o a alguien le pasa. vida compañía. La amistad, el amor y La vida es siempre o mía, o tuya, o su otros afectos humanos de nuestro hacer 5610 que re es de nadie.
non mi En su vida