no fue persona diel destino punto José Ortega y Gasset: España inves1. 00 por el testimonio de su obra, no posee Pijoan: Mi Don Francisco Giner (1906156 REPERTORIO AMERICANO del éxtasis puro y de la adoración in tra las cosas y absorbe a las criaturas, ticos cristianos se distinguen radical terior, con la diferencia maravillosa, sin pero que no las conoce. El carácter hur mente a través de este rasgo supremo embargo, de que ese arrobamiento es mano de las religiones se reconoce en los unos perciben el alma única del unitablecía a la vez una comunicación en esta última palabra, que no es sino la verso en el universo mismo, mientras tre la esencia divina la personalidad fórmula del amor. Conocer es compren los otros la perciben sobre todo en Bu individual. Aquí se advierte sin incer der, comprender es amar. En estas tres propia conciencia, como un llamado tidumbres la distinción que existe entre ecuaciones del espíritu humano, visibles constante. Aquéllos necesitan proyectar el panteismo contemplativo y el cris en la esencia cristiana. no está toda la Dios y diluirlo, en tanto que a estos tianismo místico. Admitiendo ambos a religión de Jesús?
últimos les es preciso personalizarlo pala vez la misma actitud de arrobamien Por otra parte, el cristianismo exige, ra comprenderlo. Así se explica el gé to a través de cuyo estado aquél perci para ser completamente comprendido, nero del misticismo de Joaquín Gonza be la inmovilidad de la unidad cósmica una sabiduría de sus dogmas igual al co lez, cuya alma propiamente la y este otro la esencia de nocimiento minucioso de su evolución de un cristiano, sino la de un panteista vina, el hinduismo rechaza, sin embar mística. Para explicarse el ejemplo que que profesó la religiosidad abstracta de go, toda visión concreta, o, más bien, ha suministrado Joaquín González enla conciencia oriental. Era, sin duda, no concibe el conocimiento de la divi tre nosotros, he debido preguntarme, un espiritu extraordinario. poco que nidad a través de la percepción de una como se pregunta un geómetra el valor le hubiera concedido una vida conciencia que nos conoce. El fenóme exacto de un ángulo, hasta qué menos breve, habría llegado, en un grano que opera en el cristiano, este éxta el autor de La tradición nacional se do más religioso y menos intelectual, sis, es la certidumbre intuitiva de esta hallaba saturado la esencia pura del al renunciamiento absoluto del quietis blecer entre su conciencia y el espíritu cristianismo y en qué grado asimismo mo. Fué entre nosotros una conciencia divino una corriente de comprensión se había nutrido de su teologia esotéri superior por la pureza serena y dulce mística El cristiano logra, cuando se ca. Dividido entre las tareas públicas de su misticismo, pero no fué, sin duda, abandona a las visiones radiantes del éx que absorbieron su madurez y entre las la conciencia superior por la profunditasis, acercarse por la perfección a la exigencias de la alta cultura, Joaquín. dad de su emoción religiosa. Abrigo en substancia indefinible, pues es por la González no debió, quizá, haber podido alto grado el sentimiento del origen diperfección de la santidad, esto es, de la estudiar el esoterismo cristiano según él vino de las cosas y, si bien se advierte. extrema virtud y del fervor puro, que exige que sea estudiado. En cuál de profesó un cristianismo social pero inse aproxima al alma absoluta. Por esas sus libros, me he preguntado, nos ha trascendente en virtud de la cultura que vías divergentes de aproximación se lle ofrecido el testimonio aproximado sise había dado durante sus años de acga asimismo, no a la disolución de la quiera de ese conocimiento. En cuál de tuación pública. La serenidad de inte conciencia, sino al grado último del co sus páginas se ha vuelto hacia los granº ligencia que distinguía, esa altivez nocimiento. El panteísmo rechaza esa des místicos de los desiertos y las celsin soberbia del talento, se conciliaba comunicación concreta con el espíritu das, si no para amarlos, a lo menos para maravillosamente en su personalidad de la divinidad, pues ella representa cpntprenderlos? El cristianismo que con la ternura de un corazón cuya pu una conciencia disuelta en los círculos asimilo para transformarlos los cultos reza se conservó intacta. Evoluciono infinitos del mundo, cuya alma se ex semejantes y parciales elaborados por hacia un misticismo taciturno porque presa a través de la armonía eterna y las metafisicas asiáticas, se convirtió al el le procuro, acaso, el refugio que nece sensible de las cosas. Ella no oye, ella esoterismo filosófico en Alejandría y sitan las almas disgustadas con la realino ve. Constituye por sí misma un po después de apoyar sobre la filosofía la dad demasiado triste que nos rodea. Por der inmanente y ciego. Su más alta ma sucesión de sus dogmas primarios, reco estas virtudes fué un alma superior. Ese nifestación es el ritmo de la belleza absmisticismo le permitió escribir una de tracta que, según Plotino, se percibe en plementaria de los escolásticos. San las páginas más perfectas de la literatu la rotación musical de los astros. Hay Agustín espiritualizó el concepto tras ra argentina, porque ninguno de sus voentre el venerable panteismo oriental y cendente de la redención, Santo Tomás lúmenes es comparable a ese prólogo el cristianismo elemental, pero viviente, hizo Sensible la realidad profunda de de una deliciosa religiosidad. En sus lique profesan nuestras sociedades occisus dogmas, San Buenaventura, San neas se aspira el perfume del loto, la dentales, la misma oposición que existe Anastasio, San Gregorio, los gnósticos flor milenaria. Ella nos pone en presen entre una conciencia trascendente, aun antes, los místicos después, elevaron el cia del verdadero artista que habia en que inmóvil, y un espíritu a quien se cristianismo a las categorías inefables Joaquín González, y a través de las dissiente palpitar en el seno del mundo.
del misticismo contemplativo. la vez quisiciones que contiene nos es permiEsa inmanencia suprema se resuelve en que los unos lo intelectualizaban en sus tido conocerlo intimamente, profunda la impersonalidad de un alma que penediscusiones teológicas para penetrar en mente, religiosamente.
el misterio de la Redención, del Resca te, de la Gracia Sobrenatural, los INDICE read INDICE le restituían la pureza comunidades. Ciertamente el cristianismo necesito de disputas sangrientas para imponer la unidad de sus dogmas.
pero fué porque él ha representado siem OTROS LIBROS.
pre, en la multiplicidad de los cultos hu HAN LLEGADO: manos, el misterio filosófico de la relie Félix Urabayen: Vida ejemplar de un claJorge Sticler: Malebranche. 75 gión. La dosis de misticismo que abri ro varón de Escalona. 35 José Ortega y Gasset: La redención de las provincias y la decencia nacional.
ga es igual al grado de racionalismo que Mauricio Bacarisse: El Paraíso desdeñado 75 Articulos de 1927 1930. 00 Rafael Arevalo Martinez: La signatura de estudio o o talento de los exé la Esfinge. 00 getas. Pero él exige, para ser espiriMedarda Angel Silva: Poesias escogidas. 50 Eugenio ors: Oceanografia del tedio. 50 tualmente comprendido, una naturaleza Arturo Mejla Nieto: Relatos nativos. 00 José Rafael Pocaterra: Vidas oscuras. No especial que Joaquín González, a 25 Lean Poitier. Cela.
1910) Segunda edición, de Madrid. 50 Cain. Aventura de los mares Carlos Pareja: El Derecho Civil sovie eroticos. 50 sino a medias Su naturaleza carecía, tico. Principios fundamentales. Tendencias Rodenbach: Las mejores poesías (líricas)
de los mejores poetas.
sin duda, del sentimiento del Dios per e innovaciones. Conclusiones. 00 Salas Subirat: cien años de Beethoven sonal y redivivo, y su sensibilidad per Franz Tamaya: Scherzos. 00 Manuel Azaha: La novela de Pepita lime(1827 mat70 1927. 50 Kodolfo Waldo Trine Vida nueva.
cibía mejor la belleza inmanente de las nez.
cosas que la presencia divina en su ser Moreno Villa: La comedia de un timido 00 Solicitelos al Admr. del Rep. Am. íntimo. Los místicos hindúes y los mísSolicitelos al Admr. del Rep. Am.
bro si monjes de las primeras Se ofrece 50 00 00