REPERTORIO AMERICANO EDITOR: García Monge s: Letra Suscrición mensual; 00 Correos: SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA Desde que Carrison fundó su Liberator no hubo paz en la Unión: cómo crecen las ideas en la flerral José Marli.
Representante on Hispanoamérica: Alfredo Pinoyro Téllez EXTERIOR: CEI semestre 13. 50 (Elano, 00 am.
Siro bancario sobre Nueva York.
Historia es en DAVID OGG: Europe de xvu siècle Preface de Henri de Jouvenel. Payot. Paris.
La siblioteca Histórica que la casa Payot edita, continúa prestando grandes servicios.
Recordemos los estudios, rigurosamente do cumentados, de Coissac de Chavrebiére, sobre los Estuardos; de Klutchevski, sobre Pedro el Grande; de Hayward, sobre apales pontificios; de Lucien Dubech y Pierre Espezel, del Gabinete de Medallas de Francia, sobre Paris; del capitán de corbeta René Jouan, sobre la Marina francesa; Fairlax Downey: sobre Solimán el Magnifico; las Historias de Africa del Norte, Asia, Inglaterra, Rusia, Noruega y Portugal.
Nos ofrece ahora David Ogs, profesor de la Universidad de Oxford, un ensayo sobre la Europa del siglo xvii. El siglo de Luis XIV es el de la revolución filosófica que precede a la revolución política. Es el que medita la enciclopedia que el siglo xvill redacta. Es el que da la vuelta al mundo de la conciencia, gracias al duelo de Port Royal y Loyola.
Henri de Jouvenel, en su prólogo, fija, en prosa rápida, algunos rasgos del siglo. En Toscana escribe he aquí Galileo, a quien el Vaticano condena en 1632 por haber, entre otros errores, deducido el flujo y el reflujo del mar que existen, de la inmovilidad del Sol y el movimiento de la Tierra, que no existen. En Nápoles, amigos del saber se agrupan en torno de la cátedra en que Vico, el hijo del librero, enseña los principios de una scienza nuova. no lejos de la cárcel en que el dominico Campanella ha soñado veintisiete años con la religión natural. De Holanda llega Grotius, anteayer funcionario en Rotterdam, condenado ayer a reclusión perpetua, hoy embajador de Suecia en Francia, persiguiendo a través de sus peripecias la abolición de la esclavitud, la constitución del Derecho de gentes, y muriendo casi a un tiempo en que en Amsterdam, el judio Spinoza, expulsado de la Sinagoga, va a la trastienda de su taller de óptica, a comunicar con el infinito y a edi.
ficar la religión universal, de la que el cristianismo es uno de los diversos cultos. En Alemania nace Leibnitz, que fundara el universo sobre una nueva teoría de la materia. En Francia, el gentilhombre errante que es Descartes, rompe con todas las nociones preconcebidas, todas las tradiciones escolásticas, para extraer de tres voces, cogitu ergo sum. la clara filosofía de la razón, poco antes que de otras tres, scio tui cre.
dide. la sublime exaltación de Pascal que recrea en la soledad de Port Royal todo el mundo invisible. En fin, como el siglo se acaba, Pierre Bayle anuncia la era de la tolerancia y de la libertad pensamiento.
Nos recomplacemos en el panorama del siglo xvn, que el autor otea serenamente desde lo alto. Seguimos la restauración de la Monarquía francesa; la guerra de los Treinta Afhos, LOS LIBROS y recostado sobre memorias; las vicisitudes de la Italia no liberata di straneri. y par tida en Estados, como Génova, Saboya y Venecia; las luchas por la supremacía del De El Sol, Madrid Baltico; el esplendor de Holanda.
Regatea el señor Ogg a España el inteletto amore. sin el que hasta la historia se seca, y no renuncia a ciertos tópicos que se han vaciado de virtud hace tiempo.
Holanda, en cambio, cae dentro de las predilecciones del autor. La República de las Provincias Unidaa escribe presenta una combinación única de grandeza política comercial e intelectual, porque el país que agrupó toda Europa contra Luis XIV era dueño de la mayor parte de los trasportes marítimos del mundo. Hacía también el mayor comercio de arenques ahumados, y era al mismo tiempo el pais natal de Rembrandt y de Franz Hals, asi como el país de adopción de Descartes y de Spinoza. Es en el siglo xvil cuando los hulandeses llegan a la plenitud de su civilización y de su poderio político; su genio comercial es nuestros días más consideSpinoza Vico Descartes rable que nunca.
El capítulo final estudia el lugar del siglo xvii en la Historia. Señala cimas, en con la pérdida del Palatinado y los reve paisaje espiritual de Occidente, y logra en ses del protestantismo alemán; las obras sus resúmenes aciertos impresionantes.
maestras de alta privanza y de absorción Son objeto de sus mentaciones: el decalde los negocios públicos de Richelieu y Ma miento de la autoridad de Aristóteles, la zarino; la política de los Borbones y de la condenación del sistema de Copérnico, los Casa de Austria en sus tres perfodos; del estudios científicos de Toscana, la populaTratado de los Pirineos al de Nimega, del ridad de Lucrecio en Italia, la interpretastev Tratado de Nimega ai de Riswick, del Tra ción errónea de Tácito, la filosofía de Camtado de Riswick al de Utrecht; los medio. panella, Descartes, Spinoza, Hobbes, Pascal, días y los ocasos de la Corte del Rey Sol; Leibnitz, Vico y la scienza nuova. el ab.
ah.
los fastos del Imperio español, ya declinante solutismo en política y la revolución en el pensamiento abstracto. Fontenelle, Bayle.
el Diccionario Histórico y Crítico; las que rellas católicoprotestantes: Emeric Cruce y (Viene de la nágina 136)
El avance del espíritu humano hacia el fecta, de perfecta dicha. El sueño se me hizo realiberalismo interesa vivamente al autor. El.
lidad, la realidad me circundaba como un ensueño.
libro termina así: Me hablaban y no respondia sino con ademanes Grotius es, ante todo, humanitario. Pro vagos hasta que me dejaron estar. Corria el tiempo fesa que la justicia y la humanidad deben a mi rededor como un rio, pero yo estaba fijo.
colaborar en la guerra con el Derecho; que imperterrito, despreocupado. Me he sentido el cen la legislación criminal debe ser penal y no.
tro del mundo, la fuente inefable de toda felicidad vindicativa, que los pueblos deben gozar, de de todo dolor. El dolor y la felicidad no eran una plena libertad territorial y personal, y sino matices de un solo color tomasol. Todo lo que, bajo ciertas reservas, la libertad de comprendia sin entenderlo. No habia problemas, no habla diferencias entre hombres, animales, planconciencia debe ser respetada.
tas y cosas: todo era uno y natural, amable y ló Bien que la continuación de la historia gico, puro en esencia, perfecto, y esta perfección haya demostrado que la guerra no podrá del mundo era yo mismo; yo era la gracia, la jus ser levada según formas jurídicas, y que ticia, la armonia. Usted no sabe. usted no sabe hay no poco de verdad en la buria de Treitsque felicidad tan completa he recibido en estos tres chke, cuando advierte que los defensores del dias. Es indescriptible la sensación en este estado.
internacional son representantes de Han sido tres dias que pudieron ser lo mismo tres. pequefias naciones, no se puede menos de siglos, tres milenios o tres segundos. Todo esto estar reconocido Grotius por haber prese rompió en un instante como si me hubieran sentado, al menos, una alternativa a la extraido de debajo de una campana de vidrio. He ría de Hobbes y de Spinoza, según la cual tenido que volver a encontrarme. He tenido que la fuerza es la medida exacta del derecho, buscarme como una aguja perdida y no he podido ni hacer ni decir nada hasta que me senti de nuevo y la moral no interviene ni en politica in terior de los Estados ni en sus relaciones.
seguro de estar en mi cuerpo, de ser un pobre enfermo y un amargado. reciprocas.
Anticipo de tres diàs. Grotius Derecho la teoImprenta «LA TRIBUNA.