Violence

108 REPERTORIO AMERICANO bruma! que el cco repclia como un soplo: LeorioMas el cuervo provocando mi alma triste a Pero ntrépido a este hogar Ta.
la sonrisa, Por log males devastadosEsto apenas nada más!
Mi sillón rode hasta el frente de ave y busto Dime, dime, te 10 imploro: y de cornisa; mi alcoba retornando con el alma en turLlegaré jamás a hallar Luego, hundiéndome en la seda. fantasía bulencia, Algún bálsamo o consuelo para el mal que y fantasia triste lloro?
Pronto of llamar de nuevo esta vez cort más Dime entonces a juntar, violencia. Dijo el cuervo: Nunca más. De seguro dije es algo que se posa en For saber que pretendía aquel pájaro ominoso De un pasado inmemorial. Oh, Profeta dije diablo! Por ese anmi persiana; Pues, veamos de encontrar Aquel hosco, torvo, infausto, cuervo lúgubre cho combo velo La razón abierta y llana de este caso raro y y odioso De zafir que nos cobija, por el sumo Dios del.
Al graznar: Nunca jamás!
cielo serio, el enigma averiguar: quien ambos adoramos. dile a esta alma Corazón! calma un instante, y acaremos el Quedé aquesto investigando frente al cuervo, dolorida, misterio.
en honda calma, Presa infausta del pesar. Es el viento y nada mos!
Cuyos ojos encendidos me abrasahan pecho Si jamás en otra vida la doncella arrobadora y alma. mi seno he de estrechar, La ventana abri y con ritmico aleteo y gar Esto y más sobre cojines reclinado con an.
La alma virgen a quien llaman los arcángeles bo extraño Leonora. hela Entró un cuervo majestuoso de la sacra edad Me empeñaba en descifrar. Dijo el cuervo: Nunca más! de antaño.
Sobre rojo terciopelo do imprimia viva Sin pararse ni un instante, ni señales, dar huella Esa voz, oh cuervo, sea la señal de la parde susto, Luminosa fanaltidaCon aspecto señorial.
Grité alzándome, Retorna, vuelve a tu hóTerciopelo cuya púrpura ¡ay! jamás volverá Fué a posarse sobre un busto de Minerva rrida guarida, ella que ornamenta oprimir ah! nunca más!
La plutónica ribera de la noche y de la De mi puerta el cabezal; Sobre el busto que de Palas la neura reDe tu horrenda falsedad Parecióme el aire, entonces, por incógnito in.
presenta En memoria, ni una pluma dejes, negra! El censario Fué y posóse y nada más!
busto deja!
Que un querube columpiase de mi alcoba en Deja en paz mi soledad!
Trocó entonces el negro. pájaro cn sonrisas el santuario, mi tristeza Perfumado. Miserable ser me dije Dios Quita el pico de mi pecho! De mi umbral tu forma aleja. Con su grave, torva y seria, decoroca gentite ha oído, leza; por medio angelical. Dijo el cuervo: Nunca más! le dije: Aunque la cresta calva llevas, de Tregua, tregua y el olvido del recuerdo de aun, el cuervo inmóvil, fijo, sigue fijo en seguro Leonora la escultura, No eres cuervo nocturnal. Te ha venido hoy a brindar: sobre el busto que ornamenta de mi puerta Viejo, infausto cuervo oscuro vagabundo en Bebe! Bebe ese nepente, y así todo elvida la moldura.
la tiniebla. abora! sus ojos son los ojos de un demonio que, Dime. cuál tà nombre, cuál. Dijo el cuervo: Nunca más!
durmiendo, En el reino plutoniano de la noche y de la niebla. Las visiones vé del mal. Oh, Profeta. dije. duende, mas profeta al Dijo el cuervo: Nunca más! la luz sobre el cayendo, sobre el suelo arro.
fin, ya seas ja trunca Asombrado quedé oyendo así hablar al ave. Ave o diablo ya te envie la tormenta, ya te Su ancha sombra funeral; chucho, veas mi alma de esa sombra que en el suelo Si bien su árida respuesta no expresaba poco Por los abregos barrido a esta playa, deso flota. nunca lado o mucho; Se alzará. nunca jamás!
Pues preciso es convengamos en que nunca hubo criatura Que lograse contemplar Ave alguna en la moldura de su puerta encaramada. Viene de la página 101)
Ave o bruto reposar Sobre efigie en la cornisa de su puerta, cin fucron a Grecia con el designio de lu prosperidad. Fué entonces cuando se recelada, char por su libertad.
fugió con los suyos en un barrio lejano Con tal nombre: Nunca más!
de Nueva York, en Bronx, en la cabaMas el euervo fijo, inmóvil, en la grave efiEn 1836 se casó con su prima Virgi ña de Fordham, donde el poeta saboreó gie aquella, nia Clemm, una muchacha de catorce. los más amargos días de desesperación Sólo dijo esa palabra, cual si su alma fuese años, amable, afectuosa bella a quien entre su mujer, cada día peor, y la poen ella. amó con un amor sin límites, con un breza, hasta el punto de que algunos Vinculada ni una pluma sacudia, ni un amor estático. Desgraciadamente la dul periodistas abrieron una suscripción en acento ce niña era muy delicada y un día, can su favor que hirió su orgullo, y como Se le ola pronunciar.
tando, sufrió un accidente. Desde en final y remate, la muerte de Dije entonces al momento: Ya otros antes Virginia el se han marchado, tonces, con diversas alternativas, vivió 30 de enero de 1845, terrible prueba la aurora al despuntar, una vida de dolor que fueron años de El también se irá volando cual mis sueños locura para el poeta, que le consagraba Desde entonces Poe, presa Jel alcohan volado.
todos sus cuidados y cariños, sintiendo hol, arrastró una vida llena de miserias Dijo el cuervo: Nunca más!
mil veces, según sus propias palabras, y contratiempos. Emprende una serie Por respuesta tan abrupta como justa sortoda la agonía de su muerte.
de conferencias en Nueva York y las prendido, Mientras tanto, había que trabajar, y principales ciudades de la Virginia. No hay ya duda alguna dije lo que dice Poe sc multiplicaba de Nueva York a siempre recibido, con entusiasmo. En es aprendido; Filade! fia dictando conferencias, escri Richmond lo agasajan, y su conferencia Aprendido de algún amo desdichoso a quien bía cuentos, fundaba periódicos y maga sobre El Principio de la Poesía obtuvo la suerte zines. Su vida era la de un loco errante un grande éxito. Dos veces estuvo a Persiguiera sin cesar, por las calles. De pronto la Fortuna Persiguiera hasta la muerte, hasta el punto punto de volver a casarse, pero en am de, en su duclo, parece detenerse ante su puerta, su re bas, por diversos motivos, fracasaron Sus canciones terminar putación se ha impuesto y se disputan sus esperanzas. Finalmente, se embarca el clamor de su esperanza con el triste las revistas sus artículos, pero inespera. en Richmond para Baltimore, donde lleitornelo damente también un desgraciado nega gó el de octubre, y en seguida el mis De Jamás, y nunca más!
cio periodístico acaba con la efímera teris cnvuelve los últimos días del poe La cabaña de Edgard Poe.