REPERTORIO AMERICANO Desafío a los quemadores de libros un y Cuello EDITOR: Representante García Monge on Hispanoamérica: Alfredo Piñeyro Téllez Correos: Letra SEMĄNARIO DE CULTURA HISPANICA EXTERIOR: SEI semestre, 13. 50 Peland, 16. 000 un Suscricidn mensual: 00 Desde que arrison fundó su Uberator no hubo paz en la Unión: cómo crecen las ideas en la tierra José Marti.
Giro bancario sobre Nueva York, Por WELLS De Et Sol. Madrid, No tengo motivos justificados para No dejemos que la monopolizadora enojarme y reñir con los que queman energia de una raza particular raza enlibros. Hubo un tiempo en que mis libros cantadora, pero afectada de nacionalisse consideraron peligrosos, y algunos de mo de un modo vicioso e incurable nos ciegue respecto a la realidad de lo que cuenta de cuán grande fué el beneficio que con ello me tributaron. Es un tribuestá slicediendo en Alemania. Lo que allí ocurre no es un progreso. Los ju díos son los que más ruido meten; pero 1: sus libros. Cuantos más libros míos se no son los judíos los únicos que suquemen, previsto que hayan sido comfren. Entra en la situación toda otra prados y pagados, más satisfacción y clase de elementos. Lo que pasa en Alecontento tendré, mania parece ser, más que ninguna otra Yo también he quemado un libro.
cosa, una rebelión del patán tosco, del Fué un trabajo tremendo, una faena tezafio burdo, contra la civilización.
rrible. Primero, la cubierta se desarro1ló y cncogió como un ser viviente y El progreso una cosa irritante, y desprendió olor abominable.
Desel hombre inculto se ha levantado al fin contra él. Para su cerebro rudipués, el resto del libro fué quemándoy carbonizándose en en el fuego. Lo mentario, el progreso es demasiada carempujë revolví con un espetón, con ga. Así, pues, el movimiento alemán es resultado muy poco Entonces acudí a una revolución de la barbarie y la in1 cultura contra el pensamiento, contra el na, hasta que las tenazas me abrasaban.
buen juicio, contra los libros. Nadie Me encontré con las manos negras. com sabe adónde conducirá.
los puños de la camisa negros y con Pero no es solamente en Alemania desabrochado y roto.
la donde está desapareciendo la amplia tola en una Jerancia con que el presente siglo. se del po. Cuando, des inició. El efecto se extiende por todo el Wells de fatigosos es mundo. El hombre de mentalidad defifuerzos, me dirigi la cama, cabizbajo ciente, inculto y brutal campea por tocomo un asesino demasiado nervioso das partes, ostentando sus símbolos y febril para poder dormir, aun que mueren y pasan; pero el pensamiento idictas, haciendo saludos también idiodaban en el hornillo fragmentos de li humano englobado en la ciencia y la ii tas y cometiendo crueldades imbéciles.
bro no terminados de teratura sigue su marcha, avanzando Estamos seguros en alguna paſte? Yo, rante algunas seman dejé de en siempie.
por mi parte, creo que no. Por mi cacontrar hojas a medio quem quemar, arrastradas por el viento del cenicero de la caBien quisiera yo que la intolerancia lidad de escritor, he tenido la satisfacdesfogara su maldad únicamente que ción de haber sido invitado sa y repartidas por toda la comarca muchos mando libros. Desgraciadamente, la in Un día encontré a un obrero banquetes de literatos. Tengo el precampesino tolerancia no siempre se limita a quemar tratando de leer una de sentimiento de que de aquí a diez años estas páginas y a proscribir los libros, sino que percasi carbonizadas. Probablemente, no csos banquetes serán reemplazados por sigue y actúa contra los que los escrijuntas tumultuarias para linchar litera habría leído un libro en toda su vida. ben, contra los que los leen y contra tos. Acaso me vea apaleado por sir y esto muestra lo que la un libro puede hacer!
los que los difunden, y todos estos, com Oswald Mosley sometido a la discin:o hombres, son más vulnerables que plina de un campamento de concentra La quema de libros es simbólica los libros.
Cuando se quema un libro, lo que se dos por el bretón de pura sangfe Mr.
Ahora mismo, en muchas regiones del Gilbert Frankam.
hace es adoptar un modo melodramáti globo, cunde una epidemia de intoleco de mostrar que se quiere destruirlo rancia y toma esta formas nuevas y Pero de una cosa estoy seguro. la larga, el dictamen de los libros será el y ponerlo fuera del alcance de la razón abominables. Está muy bien para humana. Pero la quema de el brutal libro no que gane, excepcionalmente afortunado escritor de y destruye el libro, sino un ejemplar de él; ideas radicales como yo hablar con vaaparecerá, vencido deshecho, la lar. pa el aliento vivificador de los libros 20 ahoga las ideas que el libro contie lentía en Inglaterra acerca de la que ne. Ningún libro ha sido suprimido por ma de libros; os; pero es cosa muy dife ahogará los rebuznos heroicos de estos la quema; ningún libro ha sido reduci rente para un escritor de ideas como bestiales insurgentes. Se examinará esdo al silencio por la censura. Los libros las mías hacer lo mismo en Rusia, en crupulosamente hasta el último grito de en una persistencia y una vitalidad italia, en Alemania; sobre todo, en Ale Hitler; sabremos la verdad acerca de que exceden con mucho a la de los se mania. El autor radical, que es sincero Goering y de Goebbels, respecto al bárres humanos. Después de todo el ruis en Alemania hoy día lleva una marcha baro asesinato de Matteottiay a todas muy peligrosa las sutiles complicaciones entre la inca como si nada guido abofeteado, destrozado. Es mal pacidad administrativa y el sabotaje en hubiese sucedido. Después de la quema tratado, no sólo Rusia.
su persona, sino en decir exactamente lo mismo las de sus familiares y amigos. Se verá Para concluir, permítaseme confesar que seguramente privado de sus bienes. la verdad acerca de mi única aparición Los libros son un refugio y un recep Puede que sea asesinado de manera como quemador de libros. La infortutáculo de poder. Los libros son molinos odiosa y repugnante. Todos estos son nada víctima de mi celo fué un ejemque muelen poto y despacio, pero sin hechos indiscutibles. Son cosas proba plar, con cinco años de fecha, del cesar, Los hombres sufren, los hombres das y patentes. Anuario de la Bolsa.
hice en un un hornillo, casita en en medio de algunas pués de hocampo quemar. dua quema de.
anacrónico des. frucción siguen hablamoués de su desvuelven decían antes.
Imprenta. LA TRIBUNA.