40 REPERTORIO AMERICANO Pio Baroja y la Academia En un pasaje de Juventud, egolatríacreo que ha sido ésta la primera obra barojiana que leí, a mis quince años; de entonces acá ha sido y sigue siendo el libro suyo, a cuya lectura he vuelto y vuelvo con más cariño y mayor frecuen cia, en un pasaje de Juventud, egolatría, supone Baroja que todo, desde sus amigos y su propio pensamiento, hasta las olas del mar, le canta el esribillo. Baroja, no serás nunca nada! Y, en efecto, el hombre humilde y errante parecia que no llevase camino de ser nada. Nada oficial, solemne, se entiende. Porque fuera de eso, e indiscutiblemente, desde hace mucho tiempo, era ya uno de nuestros primeros escritores.
Su lectura ha sido el despertar de nuestra juventud para muchos españoles. y creo que hoy este hombre, que en su vida ha adulado a nadie, y menos que a nadie al público, es, con justicia, de los autores más difundidos entre los lectores de habla española.
Pero ahora, de la noche a la mañana, nos encontramos con que Baroja ha sido elegido académico. cuenta de esta elección, desde su fronteriza Vera del Bidasoa, ha hecho Pío estos días, por teléfono y con destino al diario madrileño Luz, unas declaraciones divertidas, sinceras, llenas de la sencillez y de la noble llaneza que acompañan siempre a la figura de Baroja. Vale la pena de reproducirlas: Yo dice en ellas Baroja siempre he sido considerado en la literatura como el novillero más o menos notable el cómico de teatro de arrabal a quien se reconocer algunas condiciones instintivas, pero no se cree que debe trabajar en los teatros ni en las plazas de importancia. Esta misma opinión respecto a mí, que tendrá seguramente su motivo, ha pasado al extranjero, a la parte exigua que en el extranjero se ocupa de literatura española actual.
Exagera aquí Baroja, evidentemente. Se le ha combatido, es verdad, y no siempre por razones literarias. Ha encontrado más hostilidad que otra cosa. estas alturas, y con todo lo que su caudalosa obra supone en nuestras letras, el único estudio de importancia con que sobre esa obra contamos es el que años hace le dedicó don José Ortega y Gasset (v. El Espectador, tomo Pero nunca le han faltado a Baroja, y él lo sabe, el respeto y la devoción de los mejores. Claro que todavía seguimos en deuda con él, como con tantos otros de nuestros maestros, los jóvenes de España. Hay que estudiar a Baroja, ren dirle el debido homenaje, hacer con aplicada e inteligente crítica el examen de su obra, señalar qué ha aportado a nuestra literatura, a nuestra sensibilidad. Es menester acabar de una vez Por JOSE MARIA QUIROGA PLA De Diablo Mundo. Madrid.
con el estúpido tópico de que Baroja no sabe escribir. Un atento estudio de su estilo, una lectura detenida de sus libros, nos reservaría no pocas sorpresas en este respecto. Por mi parte, invito al lector a que relea ciertas descripciones de César o nada, o, entre otras obras barojianas más recientes, de La venta de Mirambel. al lado de sus innova: ciones evidentes, sería cosa de subrayar también todo lo que enlaza nuestro autor y es mucho con lo mejor de nuestra tradición literaria. El tema no pue de ser más rico en sugerencias. Valdría la pena de que acometiese la empresa de tratarlo a fondo alguno de nuestros jóvenes.
Pero sigamos transcribiendo las de claraciones de Baroja: Con el convencimiento de estar así catalogado ante el público, es lógico que yo no haya tenido la audacia de solicitar el ingreso en la Academia de la Lengua. La iniciativa no ha partido de mí. pesar de esto, la Academia me ha votado para perte.
necer a ella; me ha dado una alternatiPio Baroja va oficial que yo no he esperado nunca. Visto por Bagaria. La iniciativa no ha partido de mí.
No hace falta que nos lo jure Baroja. La iniciativa, según nos informa la prensa, Pio Baroja, académico ha partido del doctor Marañón y de los señores García de Diego y Casares. El De Luz Madrid primero ha dicho de Baroja, a propósito El doctor Marafión, a quien hemos acu de esta elección, que su genio creador dido como firmante de la propuesta para con las discrepancias que quieran poque nos indicara el sentido que daba a la elección de Plo Baroja, nos ha entregado nerse a su obra es uno de los legítimos amablemente las siguientes cuartillas: orgullos de la España actual. De todos La elección de Pio Baroja en la Academia modos, la principal razón de su necesies un suceso felicisimo para las letras espa dad dentro de la Academia es precisaflolas. Yo tengo una gran idea de la eficacia mente su estilo, que algunos juzgan incultural de las Academias, y he estimado siempre que cometen un grave error los que correcto o desmañado, y tiene todo el no lo comprenden asl. La Academia debe ser fuerte sentido de eternidad popular, que un organismo elástico, juvenil, en el que la Ce hará imperecedero. Bien por el autoridad no pese como una coraza, sino que diagnóstico! Aunque, en rigor, habría sirva de acicate a su utilidad. Hay en la que apuntar ciertos reparos, por ejemAcademia de la Lengua ocho elegidos que plo, a lo de el fuerte sentido de eter no toman posesión de su cargo. Son las más nidad popular. etc. que, dicho sea sin altas cumbres de la intelectualidad españoánimo irreverente, no pasa de ser un ca la. Su responsabilidad es enorme. Si ellos no tienen conciencia de su deber, de este de melo de oración académica. Yo no sé ber elemental. qué vamos a pedir a los si su estilo hará a Baroja imperecedeotros?
Es posible que, a lo sumo, La Academia ha dado pruebas del espíritu le haga algún día objeto de una tesis tolerante y justo que ha ido adquiriendo en doctoral en letras, perspectiva que acalos últimos decenios y que ha culninado bajo so no le sonría demasiado a Baroja. Lo la dirección de Menéndez Pidal eligiendo a Baroja, cuyo nivel literario y creador está que sé, de lo que estoy convencido es por encima de todo esto, porque representa de qu: todo el que quiera estudiar nuesel llamado espiritu antiacadémico, que es aca.
tra España de fines del siglo pasado y démico también, como, el reverso es tan la comienzos del actual, a la enorme galemedalla como el anverso.
ría de tipos novelescos de Baroja habrá Uno de los tópicos de café que hay que de acudir forzosamente. no aunque abandonar es el del desdén por las Acadefuese más que por esta consideración mias, y todos debemos contribuir a su olvido.
Trabajar es más difícil que murmurar y y otras muchas más, y de más peso, y decir chistes. Pero hay que decidirse por lo de orden estrictamente literario, venían primero.
reclamándolo, está justificada plenaApenas he tenido trato con Baroja, trato menta la elección del autor de Zalacain, directo; pero su genio creador con las disel aventurero, y de tantas magníficas crepancias que quieran ponerse a su obra obras más. Elección justificada en (Pasa a la página 43. Pase a la pagina 49. ro o no.