REPERTORIO AMERICANO SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA Tomo XXVII San José, Costa Rica. 1933 Sábado 25 de Noviembre Núm. 20 Año XV: No. 660 SUMARIO Las redes verdes.
Azorin El Don Juan lusitano propósito de un artículo descortés, malicioso y desleal: Contra El Tenorio.
La consulesa Gabriela Mistral y la crueldad El sistema americano de Valle, no la panameriespañola.
Teresa de Escoriaza canización fabricada en Sobre una crónica de Teresa de Escoriaza Gabriela Mistral Los ocho últimos poemas Gabriela Mistral o la crueldad araucana Teresa de Escoriaza Libros peruanos. Matla (6)
Euclides Chacón Méndez Parábola de la perfecta alegría Recuerdos de Augusto Halmar.
Renato Valenzuela Reaparición de Zola.
Joaquín Edwards Bello César Arroyo Juan del Camino Rafael Arevalo Martinez Rafael Heliodoro Valle Rogelio Sotela Ramón Gómez de la Serna es SU Uno de los más recientes y beneméri PENSANDOJEN CERVANTES los sesenta y seis años, en 1613, camina tos trabajos de don Francisco Rodríguez lentamente, en Madrid, por la calle que Marín se titula: nasce lee mucho Cer Las redes verdes ahora lleva su nombre y que antes se el Quijote. Una obra maestra no intermitentemente, sin proponérselo, en De La Libertad. Madrid. 13 de octubre de 1933 una sola obra; una obra maestra son mulos momentos culminantes de su vida.
chas obras. Los grandes libros son li. La batalla de Lepanto. El cautiverio bros multiformes. No contienen en sus en Argel? No; eso no es lo que le con páginas una sola y uniforme subs: mueve. Valladolid, Valladolid, ante totancia. Se pueden recoger en ellos, se todo. Rememora los días en que, sien: gún la edad del lector y según las cir do niño, estuvo en Valladolid, la Vallacunstancias en que se lea, los înás vadolid de Felipe II. cuando más tarriados y gustosos matices. Si leemos el.
de, a los cincuenta y tantos años, volvió Quijote a los cincuenta años, no será a Valladolid, la Valladolid, corte de Esel mismo Quijote que el leído a los paña, de Felipe III. recuerda tamveinte. Encontramos en las páginas del bién el día en que, siendo asimismo niño, gran libro a los cincuenta años cosas que vió preso a su padre. cuando una no estaban en él a los veinte. si lo tarde, durante un suave crepúsculo, allá leemos a los sesenta o a los setentaen Italia, estaba sentado ante la puerta caso de que tengamos la fortuna de de una hostería y tenía delante una mellegar a esas edades nos encontraremos sita con exquisitos manjares y un ligeco de pronto con un Ouijote que no covinillo del veduño italiano. En Valla nocíamos, con un Quijote enteramendolid vivía Cervantes en una pohre casa.
tę nuevo. No será el Quijote lo que Su hermana Magdalena siempre le esta leamos, sino algo de que no teníamos ai ba reconviniendo porque no era hombre la menor noticia. Vida espléndida tie. práctico. Hombre práctico no lo ha sido nen las obras maestras; vida espléndida nunca Cervantes, Es un fracasado en tiene, con todos sus cambiantes y relumMiguel de Ceruantes Saauedra.
la vida. Estos días escribe la segunda hres, el Quijote. Acaso sabe el autor parte del Quijote. Esta misma malo que va a ser el libro que está en su ñana acaba de pergeñar un capítulo en cerebro gestando que luego ha de dile describe una singular aventura del manifestar al exterior. Es que un libro JYAXEL WAT sin par caballero. Don Quijote, des. como el Ouijote. una vez salido de las Según Juan de Jáurigui pués de abandonar la casa de los duques, manos de Cervantes, no tiene una autocamina por un bosque. De pronto se nomía que Cervantes mismo no pudo siente enredado en unas sutiles redes de prever. qué importará lo que un hilos verdes. Las han tendido unas ca.
en los discursos, en los artículos, en autor haga para encauzar la vida futura las conversaciones, saltana deshora zadoras bellísimas. Poco después se le de su libro, para dar el verdadero signi: presenta a Don Quijote ocasión de dereminiscencias clásicas, recuerdos de un ficado a su libro? El libro. Va indepenlibro clásico, frases de escritores clásicos, mostrar su arrojo a las cazadoras. Perdiente, se ríe de su autor. El libro tiene cíbese a lo lejos un terrible estrépito.
ahora una selvatica independencia que en España transcurre mucho tiempo an Es, sin duda, un ejército de gigantes no sospechaba su autor. pobre del tes de que en el discurso de un parla. libro que, desgarrado de su autor, no mentario o en el artículo de un perionue llega. Aquí de su valor! los gigantes son unos toros que llevan para tenga vida propia! EI Quijote no es dista veamos citadas unas palabras de correrlos y que le revuelcan y pisotean.
un solo libro; Cervantes pudo pensarlo Cervantes; de Lope, de Gracián, de Fray: Don Quijote, avergonzado, se marcha, así. Pero diversos y variados Quijo Luis de Granada, o del otro Fray Luis, sin tener serenidad bastante para despetes. cue acaso Cervantes no conoce el poeta paisano de don Quijote, el gran dirse de las bellas cazadoras.
ría, corren por el mundo y causan la poeta manchego. No se goza plenamenº Cervantes ha entrado en la calle del emoción de las gentes. se leen mu te del Quijote. sino en la vejez. Los León y sigue marchando lentamente.
cho esos Quijotes. Ediciones, dice jóvenes pueden ver una cosa en el Qui Pesa sobre él la obsesión del fracaso, Rodríguez Marín, sí que se hacen mu jote. nosotros vemos otra que ellos no Fracaso de Sancho, en la insula Barata chas; pero en cuanto a leer la obra in han visto todavía. Vemos el consuelo y ria; fracaso de Don Quijote en la aven mortal, es otra cosa.
la serenidad. Hay una adecuación gra tura de las redes verdes; fracaso final, No desesperemos y sigamos leyendo, tísima, confortadora, entre nuestro espí definitivo, en Barcelona, con el vencilos que leemos, la gran obra. En Espa ritu desencantado por los años y esa miento que le inflige al de la Triste Figuña se lee poco. En España se piensa po segunda parte del Quijote. toda sen ra el caballero de la Blanca Luna. Todo co. Si en otros países, en los libros, cillez y lejanía, espiritual. Cervantes a eso es su propio fracaso. Es pobre y DEAL Mary WI ourguire Joyer Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica