REPERTORIO AMERICANO 187 rrera be maravillar, como una flor riormente bosquejábamos, una la vibración que a él le hace tos. Pequeñas leyendas que atractiva. Pero es Jorge Ca especial movilidad, una estra pocta, librando su poesía de exigen y no ocultan su héroe, Andrade quien en su tégica colocación geográfica de una retórica consecuente, de un héroe activo, que las conpoesía advierte el peligro del los elementos que en ellas in ura resultante retórica, como vierte en instantes arrebatafactor color. Pues el autor de tervienen. Carrera Andrade, corolario de admirar, de can dos, llenos de una movilidad. Estanque inefable. ha pene como también hemos dicho, no tar, de adorar, la quietud de acusadores de un constante hatrado el secreto de la falsa me vuelve a lo nimio, en el sen lo que como cosa se nos pre cer, que no da quietud, falsa táfora, de la metáfora ausen tido de venerar lo nimio. Jor senta.
serenidad, a su poética, sino te de calor, y abundante, plena ge Carrera Andrade no adora Apuntemos varias de sus por el contrario, interesante de un colorido, resultado de lo insignificante. adorar, imágenes, aparte las tres, ante movilidad, que incesante exsumas, de combinación de ele como cantar en exceso, es pro riormente escogidas: los máspresa el ardor normal, extraormentales tonalidades intrans piedad esencial y negativa de tiles son cañas para pescar dinario de un temperamento.
cendentes.
un gran porcentaje de poetas, estrellas; reloj: picapedrero Carrera Andrade supone que ha descubierto un pobre, y en especial, de una gran can del tiempo; moja el chopo su la veneración de lo estático pera perjudicial secreto, por tidad de poetas americanos. pincel en la dulzura del cie podría hacer de su poesía un qus Carrera adivina el elemen Sino que por el contrario, dig lo, etc.
pastiche retórico, y abominánto origen de esta consecuen nifica lo nimio, y esto es dis Como las anteriormente es dolo, intenta y consigue el que cia antipoética. No es que el tinto. Supera la nimiedad en cogidas, como todas las suyas, cada elemento en su sentir pocoler vayamos a despreciarlo especial dinamismo, haciéndola las metáforas en Carrera An sesionado como de una pasión como diferencial factor de lo vibrar con vibración análoga a drade son auténticos argumen egocéntrica, actúe, se comporpoético. Por el contrario. Lo te independiente. Hace trabaque no nos interesa en absojar a las Cuatro horas desnudiluto es la pintura: Es decir, Poemas del tiempo.
tas, que partenen cuatro el color preestablecido, colo(Viene de la página anterior)
tajadas la mañana de sandía.
cado a priori. Ningún poema a las estrellas serafines, las que como SOLEDAD DE LAS CIUDADES tal poema pueasigria el lavar todo el negro da interesarnos, deja de poSin conocer mi número.
en aguas de sombra y silencio secr un color distintivo, y es Cercado de murallas y de límites.
al fondo de la noche algibe. por esta clase o tonalidad esCon una luna de forzado Igualmente que obliga a los pecial del colorido en las comy atada a mi tobillo una sombra perpetua.
mclinos, a que en la hoja blanposiciones líricas, por lo que Fronteras vivas se levantan ca de la harina, impriman la podemos apreciar instantáneaa un paso de mis pasos.
arenga proletaria de la espiga.
mente su, valor, asignándolas No hay norte ni sur, este ni veste, F1 héroe, cualquier insigniuna jerarquía. Pero el color, sólo existe la soledad multiplicada, ficancia como protagonista, es como la metáfora, es consela soledad dividida para una cifra de hombres.
el secreto poético de Jorge Cacuencia de un algo, esencial, La carrera del tiempo en el circo del reloj, rrera Andrade, quien no es especialmente poético, que en el ombligo luminoso de los tranvías, por esto por lo que adora a gendra toda la bondad de la las campanas de hombros atléticos, lo nimio. Puesto que lo que composición: la pura emoción.
los muros que deletrean dos o tres palabras de color Carrera ejecuta es la substanLa subjetividad emocionada están hechos de una materia solitaria.
cialización de lo auxiliar. en que requiere para cada uno de Imagen de la soledad: su poesía no hay nada auxiliar, sus momentos formas distintas El albañil que canta en un andamio, como no hay nada que eleve de expresión, recubiertas en fija balsa del cielo.
la curva de su nivel sobre las virtud de su propia intensidad, Imágenes de la soledad: curvas restantes. En él, en su de substancial, diferencial co El viajero que se sumerge en un periódico.
obra, se anula el argumento, lorido.
El camarero que esconde un retrato en el pecho.
para dar paso a un sin fin de Ei colorido en lo poemático, La ciudad tiene apariencia mineral.
argumentos, pero argumentos (véase Platero y yo. que es La geometría urbana es menos hella desarrollados en cada instante.
todo color porque es todo paque la que aprendimos en la escuela.
En los instantes de su íntisión y dulzura. es la tempe Un triángulo, un huevo, un cubo de azúcar mo sentir. Esos instantes que ratura evidente de lo íntimo.
nos iniciaron en la fiesta de las formas.
componen sus escuetos, senciA más intimidad, mayor colo Sólo después fue la circunferencia: llos y quebrados paisajes, nunrido, y en los distintos mati la primera mujer y la primera luna.
ca resueltos por superposición ces de éste, el polifacetismo ¿Dónde estuviste soledad a mayor superposición de interior del poeta. Pero el coque no te conocí hasta los veinte años?
elementos, es la odiable retólor auténtico en poesía, no En los trenes, los espejos y las fotografias, rica sino por diferentes pardeslumbra, no grita. Es decir, siempre estás desde entonces a mi lado.
ticularidades, que encarnan en el colorido que es sólo consesu hacer, el héroe necesario.
cuencia, elevada a substanciaLos campesinos están menos solos Los héroes necesarios, resullidad por la emoción, no pueporque forman una misma cosa con la tierra.
Los árboles son hijos suyos, tando hojas de un sentimiende alardear. Todo alarde es los cambios de tiempo observan en su propia carne to, que como el grano de maíz, un elemento negativo en arte.
y les sirve de ejemplo la santoral de los animalitos. todas las madrugadas, en el si Jorge Carrera Andrade buche del gallo se vuelve una no hubiera descubierto este Esta soledad es nutrida de libros, mazorca de cantos.
secreto, sus imágenes no bri de paseos, de pianos y pedazos de muchedumbre, llarían con el color que es conde ciudades y cielos conquistados por la máquina, Observada la poesía de secuencia de lo medular, de lo de pliegos de espuma Jorge Carrera Andrade desde desenrollándose hasta el límite del mar.
íntimo; sus imágenes serían, otro punto de vista, nos desTodo se ha inventado.
esc sí, imágenes deslumbrancubre también innúmeras faMas no hay nada que pueda librarnos de la soledad.
tes. jactanciosas, molestas.
cetas sabrosas. En él leemos: El color solo es, sin embar Los naipes guardan el secreto de los desvanes. el almendro se compra un go, un resorte en la maquinaLos sollozos están hechos para ser fumados en pipa.
vestido para hacer la primera ria intima de Andrade. No es Se ha tratado de enterrar la soledad en una guitarra.
comunión. Puede la agilidad esta propiedad en su obra, to Se sabe que anda por los pisos desalquilados, de esta metáfora considerarse do. Sus metáforas, a más de que comercia con los trajes de los suicidas de dos maneras, si bien las coacusar un colorido incendiado y que enreda jos mensajes en los hilos telegráficos.
sas y los hechos, sólo son de cuyo origen más tarde hallaJorge Carrera Andrade la manera que de ellos se esrenos señalan, como anteEuropa, 1932.
capa, como un humo indica. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica