REPERTORIO AMERICANO 67 AFIASPIRINA el producto de confianza Un cuento de Bjørnson.
llaba la acción. Todo a lo largo de su discurso íntimo, en diálogo interminable, pero aplastante y exagerado.
Bjørnstjerne Bjørnson era un caudiB llo, un patriota, portador de los granA.
des estandartes, e Ibsen un hombrecillo BAYER solitario que entraba en los hogares cuando, bloqueados por la nieve de fuePara todo dolor ra, sólo tenían encendidos sus niedos indefinibles.
Al pasar Bjørnson por las calles el pueblo decía. Ahí va el oso. porque su nombre, Bjærnstjerne, significa constelación de la Osa Mayor. y Bjørnson hijo del uso. Bjørnson hasta dió a su país, por cuya independencia tanto hizo, el motivo del que hoy es su himno nacional gracias a su obra Si amamos a este país. a la que puso música Nordraak.
Bjørnson tenía influencia de homé Toda la obra de Bjørnson tiene una levantándose y alargándolo hacia él.
rida y moralista, por lo que su obra solemnidad enlevitada, una liturgia de Pero después de algunos violentos esfuerzos el hijo se entumeció. El guante dió lugar a divorcios, a que gran casa prócer, un aire de desafío por Aguarda un momento! gritó el se deshiciesen muchos noviazgos y a los grandes honores.
padre, acercándose al muchacho. Entonque. la mujer gritase al hombre: has Los dos viejos de patillas blancas, ces el muchacho se volvió de espalde ser más puro. Ibsen, en su Casa Ibsen llevaba a Bjærnson catorce años das, dirigió una larga mirada a su pade. muñecas. más poéticamente, dejanmezclaron sus espíritus distintos y sus dre, y se hundió. Thord no lo podia do más confusa la moraleja, había pro inspiraciones en el enlace de sus hijos, creer. Mantuvo el bote quieto y como pugnado el derecho que la mujer tiene siendo en la mezcla el más victorioso clavado sobre el lugar en que había a su corazón y a su independencia, un Ibsen, porque de él era el hijo y de visto sumergirse a su hijo, como si fuera a flotar de nuevo.
conflicto menos artificialmente patético Bjørnson la hija. Boda ejemplary Algunas burbujas subieron a la superficie, después y más desgarrador.
epilogal!
unas pocas más y por último una granRamón Gómez de la Serná de que revento; y de nuevo quedó el mar como un espejo.
Tres días y tres noches vieron al padre sin comer ni dormir, bogando sobre el mismo lugar; buscaba a su hijo. El tercer día en la mañana lo encontró. Viene de la página 65)
y lo llevó por sobre la colina hasta su finca. Dios permita que el niño sea una Ei cura se sentó un rato pensativo.
bendición para ti.
No dijo nada, inscribió los nombres en su libro y los hombres firmaron de Ha pasado un año quizá desde entonces. Al anochecer de un día de otoño, Dieciséis años más tarde volvió Thora acuerdo.
a casa del cura.
Thord puso una suma sobre la mesa.
el cura oyó algo por fuera de la puerta, como buscando a tientas la aldaba. No pasan los años sobre ti, Thord Yo cobro menos dijo el cura.
El cura abrió la plierta y entró un homle dijo el ministro no viendo cambio Ya lo sé, pero él es mi único hijo bre alto y encorvado, muy flaco y con en él.
y deseo remunerar bien a usted. El cuel pelo blanco. Hasta después de mi Tampoco tengo preocupacionesra tornó el dinero.
rarle largamente pudo el cura reconocontestó Thord. Es la tercera vez que tú vienes aquí cerlo. Era Thord.
Después de esto el cura se quedó en por asuntos de tu hijo, Thord. Vienes taa tarde. dijo el cura y silencio, y al ratito preguntó. Pero ahora va concluí con él, dijo quedándose perplejo ante él. Qué te trae por aquí esta tarde. Thora. Dobló su cartera, se despidió y. 0h si, vengo tarde dijo Thord Esta tarde vengo para algo de mi se fue. Los hombres lo siguieron dessentándose.
hijo, quien será confirmado mañana.
pacio.
El cura también se sentó en actitud Es un muchacho inteligente.
de espera. Hubo un largo silencio. En No quiero pagarle al pastor hasta Quince días después, en una tranquitonces Thord dijo: que no sepa qué lugar ocupará el muchacho.
la noche, navegaban padre e hijo hacia Tengo algo que deseo dar a los pola casa de Storliden a tratar del ma Ocupará el número bres. será en la forma de legado y lletrimonio.
vará el nombre de mi hijo. Se puso de. Ya lo oigo y aquí está este dinero Esta tabla no la siento, segura bajo. pie, dejó algo sobre la mesa y se sentó para el pastor.
mis pies, dijo el muchacho, y se puso otra vez. Alguna otra cosa más? preguntó El cura contó el dinero.
el cura mirando a Thora.
de pie para asegurarla mejor. En este. Es una buena cantidad le dijo. Es la mitad de mi haienda, hoy la. Nada más.
momento resbaló el tablón vendi.
Thord se fué.
estaba parado; extendió los brazos, dió El ministro continuó sentado un largo un grito y cayó al agua.
tiempo en silencio; por último, pregunto Pasan ocho años: un día se oye bulla. Agárrate del remo! gritó el padre, cortesmente: por fuera de la puerta de la oficina. Qué vas a hacer tú ahora, Thord. del cura. Era que venían muchos hom Algo mejor.
bres capitaneados por Thord. El cura Se sentaron largo tiempo. Thord milo miró y lo reconoció.
rando al suelo y el cura mirándolo a él. Tủ vienes bien acompañado esta Por fin el cura dijo suavemente: tarde.
Abogado y Notario Quiero pedir a usted las amonesta. Ahora creo que tu hijo ha sido por ciones para mi hijo; se va a casar con OFICINA: fin una bendición para ti.
Karen Storliuen, hija de Gudmund, aquí Si, así lo creo yo también dijo 125. varas al Este del Almacén Tord.
presente. Es la niña més rica de la parroquia.
Robert, frente a Reimers.
Alzó la vista y dos gruesas lágrimas Así dicen contestó el campesino, roaaron por suis inejillas.
Tel. 4184 Apdo. 338 alisándose el pelo con una mano.
Bjørnstjerne Bjørnson sobre que OCTAVIO JIMENEZ Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica