ImperialismVíctor Raúl Haya de la Torre

98 REPERTORIO AMERICANO a suerte. Muy adelantadas se hallan las bajar igualmente en el campo. El tra hombres codiciosos y atrevidos, los uto.
industrias domésticas. Moro previó la bajo corporal sobre la tierra es tan obli pienses viven con quietud.
incubación, descubrimiento que sólo se gatorio como ahora el servicio militar. La argumentación parece solidísima.
produciría siglos después. Sacan nadie se fatiga en esta sabia alterna Pero no lo es menos la objeción que puedice con admirable artificio una infi ción de vida ciudadana y campestre. He de oponerse.
Consiste ella en que el nidad de pollos, porque sin empollar las aquí el procedimiento: Vuelven a la progreso es fruto de las competencias in.
gallinas, con un calor proporcionado les ciudad en cada un año veinte de los de dividuales. así el progreso viene a dan vida, y después los hombres. los estas familias, de los que han residido ser la mayor tragedia del mundo, ineviabrigan y gobiernan.
dos en las alquerías. Suceden a estos table, fatal y eterna.
otros tantos de la ciudad, para que sean En Utopía no existen los malos estuLos utopienses, como ya se ha dicho, diantes y, por consecuencia, los profeejercitados en la agricultura por los que con religiosos. En ninguna institución sionales mediocres, Al mal estudiante quedan expertos, con la residencia de creada por ingleses está ausente la relise le saca de los estudios a lo mecánico, un año, y que el venidero enseñen gión, o los principios bíblicos. Pero en contrario, al apto y aplicado se y, por otros, con el fin de que no falte en to Utopía, el ayuno, el cilicio y otras penile saca de lo mecánico al estudio. Pundos la experiencia de la labranza, y que tencias se consideran como una injuria to la salud. Sólo se aceptan aquellos admirablemente resuelto. Allí, en al tiempo de recoger los frutos se hallen hábiles.
sacrificios corporales que tengan por fiUtopía, no podría darse el caso del travieso estudiante español que no salía de No cabe sistema más perfecto, iguali nalidad ayudar a la República.
tário democrático. Los alfolies o graEl lector habrá advertido, por esta solos teatros y bares. Su padre era un neros son colectivos, como obra de to inera y breve exposición, que no todo es labriego tan rico como ignorante. Lledos. Siendo manifiesto añade el cé fantástico en Utopía. Aunque el pensagados los exámenes, el mozo farrista pusº este telegrama al autor de sus días: lebre canciller inglés que donde no hay. miento central lo sea, no faltan detalles Todas las matrículas en manos de los temor que falten las cosas necesarias, muy considerables que podrían formar, revendedores. Dime qué hago. Concesa la ambición de querer aumentar de parte del programa de cualquier gobiertestación del padre: Compra a cualmasiadas riquezas cosa que hacen los no moderno.
quier precio y ven pronto.
Francisco Grandmontagne Un detalle extraño. En Utopía hay esSan Sebastián, 1932.
clavos, aunque pocos, dos por familia de cuarenta personas.
Son los matariEsta mpas fes o jifero s, encargados de degollar, desollar y cortar las reses, pues no se consiente que los ciudadanos utopienses De una santa mujer que se ha interesado por la se ocupen de estas faenas, que los volverían fieros, crueles e inhumanos. Por suerte de Haya de la Torre igual razón, los esclavos se encargan también de la caza.
De un documento suscrito por espíritus independientes de los EE UU No hay en Utopía filósofos hasta que La inteligencia crea patrias. La barbarie las destruye llega Moro. Es otra de las causas de Colaboración directa felicidad de los utopienses. es no La petición en favor de Haya de la To. donde la libertad y el gobierno libre pueobstante agrega nuestro autor, en la rre, de la cual hace unos días dió cuen den prosperar. Si Haya es puesto en limúsica, la aritmética y geometría, curta el cable, presentada por gente de Nor bertad y su presencia estorba al gobierso y movimiento de las estrellas, son te América al diplomático de la barba no, estamos seguros de que permitiénprácticos y suficientes, casi de la misma rie peruana en aquel país, dice así: Con dole la salida el mundo se beneficiaría suerte que nuestros mayores. Como la todo el respeto debido y sin el deseo de con su inteligencia. No podemos imfilosofía es una de las cosas que más mezclarnos en la política interna del Pe presionar fuertemente a usted acerca del complica la vida, los utopienses la elu rú, deseamos hacer una petición en bien hecho de que durante sus años de residen. Se apartan de estudiar las sedel señor Haya de la Torre, mantenido dencia en los centros intelectuales de gundas intenciores. Para ellos la vir incomunicado sin sentencia en la pe Europa, Haya de la Torre honró el nomtud consiste en vivir según la ley natu nitenciaría de Lima desde el de mayo bre del Perú con su brillante exposición ral.
de 1932. Agregaríamos nuestra voz a de los problemas latino americanos. Su Pero no vamos a seguir, punto por la de figuras mundiales como Romain personalidad contribuyó en no punto sería ello inacabable, toda la or Rolland, quien llamó a Haya honra del medida a fijar en los pensadores de Euganización, moral y material, del reino pensamiento ibérico. Georges Duha ropa las capacidades latentes de países de Utopía. Moro sospecha que su obra mel; Ortega y Gasset; Unamuno; doctor entonces habían penetrado revolucionaria, aunque fantástica, puede Gregorio Marañón; Harold Laski; doc muy poco en sus mentes, y agregó un lusacarrearle algún contratiempo grave ba tor Marett, Rector del Exeter College; tre particular a su solar nativo. Nos pajo el despotismo de Enrique VIII. de Barrett Brown, Principal del Ruskin Co. rece, por lo tanto, de la mayor imporahí que trata de escudarse con esta afir llege, ambos de la Universidad de Ox tancia, que la impresión del Perú que fué mación: Tomamos por nuestra cuen ford; la poetisa Gabriela Mistral; Ma recibida a través de los contactos de Hata referir los estatutos de Utopía, y no nuel Ugarte; Waldo Frank, y cientos de ya de la Torre fuera de su suelo, sea defenderlos.
personas que han intercedido ya. El he realzada por la noticia de que el gobiercho de que los Congresos de Argentina, no de su país procedió con Colombia, Costa Rica y Ecuador hayan migo político en una forma noble y magEl problema del absentismo, quizá el protestado también, indica que Haya de nánima. El texto de esta petición lo más importante y arduo de nuestra épo la Torre es una figura de significación respaldan los siguientes nombres de gen.
ca, está resuelto en Utopía de una ma internacional, cuya labor por la solidari. te norteamericana: Jane Adams, John nera sencillísima Los pobladores del dad de América Latina y en favor de to Dewey, Waldo. Frank, Hubert Herring, campo se sacan de las ciudades, a la in das las causas opuestas al imperialismo Paul Kellog, Mencken, Jeannett versa de lo que hoy ocurre, agolpándose extranjero, ha levantado el respeto del Rankin y Charles Thompson. Además los campesinos en las urbes. La agri hombre en todas partes. Estamos segu figura la prestigiada firma del profesor cultura es común a todo el mundo. Allí ros de que usted respetará esta opinión Federico de Onis.
no se puede ser señorito urbano, cajetiuniversal concerniente a Haya, porque Leemos el documento transcrito y lla, a perpetuidad. Los habitantes de creemos que existe en usted el ansia pensamos en una mujer admirable, Anna estas urbes dice Moro no son señores cierta de mantener el buen nombre del Graves, norteamericana de las que de los labradores, pues todos han de tra Perú ante el mundo, como un país en anhelan honra y decoro para su país. La escasa que hasta como ene Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica