Carmen Lyra

REPERTORIO AMERICANO 197 CAFIASPIRINA paz de la Así sea.
Yo la recuerdo vivamente cuando llegó Gabriela Mistral a nuestra tierra. Entonces se Ríase usted de cualquier dolor por fuerempeñó en ser toda oidos parate que sea, si tiene a mano la famosa escuchar el mensaje de Gabriela, y es que Dina Palacios, era de la misma arcilla. Todas sus No sólo da inmediato alivio, sino que potencias tendian a aplicarse al regulariza la circulación de la sangre, servicio del prójimo. Una to.
che Gabriela subiendo las escalevanta las fuerzas, proporciona un sa.
leras de la Universidad nos dijo: ludable bienestar y no afec3 ta el corazón ni los riñones. Ustedes, muchachos, me han BAYER)
preparado un cortejo de reinas. Si es BAYER u Bueno y me siento gozosa de que en esta peregrinación por las tieCAFIASPIRINA (M. Eter compuesto etánico del ácido orto oxibenzoico con Cafeína rras salvadoreñas me hagan grato el instante criaturas tan catales que, al par que tienen el candor de una virgen, llevan la Fué buena y bella, fué her suaves, como las estrellas lecando: en la tarde de amarantos, capacidad de una martir. Esa mosa y pura, fué humilde, hu janas.
en la amanecida fresca, en la chiquilla enlutada (era Dina. milde. Su alma trémula se Señor, ya has mirado su vida flor, en el canto, en la plegaria.
alienta en su espíritu los más agitó en la vida como una lla que fué un ramo de perennal ya te encontró en la infinita bellos propósitos que jamás han ma. su espíritu fué como las aroma. Perdónala.
muerte. Recibela sospechado. Tiene sed de saber, nubes altas, como las sombras Por toda la vida te pasó bus como una hermana buena que tiene sed de servir. agitó su vuelo misterioso con Días después Dina se marun signo fatal. Muéstrale la chaba a la hacienda «San Anmisericordia de tus edenes de tonio» a enseñar a los chiquiPoem as olvido y de paz.
llos de la escuela rural. Llevaba Fué buena como el agua o los Cuentos de la Tia Panchita Envío de Rafael Heliodoro Valle. México, como la luz: lavó todas las de Carmen Lyra. y lo mejor, manchas, alumbró todos los habia preparado una serie de ARBOL CON NIÑOS Peina luceros con la luna nueva senderos y ya transita los prefantasias graciosas ingenuas, y en fácil canto la amorosa lira, dios eternos.
deliciosas para referir a los chi Hablaba el árbol cristalinamente; y en todo afán a casto amor te lleva. Pasó la vida con un signo quillos. Pasados algunos dias y buscaba ni afin alas viajeras de amargura en los labios, dale me decía. Estos niños pobre de breves golondrinas mensajeras, Dora octubre la miel en sus panales de beber el agua fresca de la citos desamparados son seres en la opuler. cia del verano ardiente. y fatiga con nisperos mi gula vida inmortal.
en los que se pueden bordar de esaltadas fragancias tropicales.
las más bellas flores de bondad. Eran niños. no pájaros la fuente pero me da pesadumbre ver su del claro dia ungió sus primaveras, Miguel Peña Valle En las noches de luna, en el tejado, San Salvador, 1932.
abandono, porque pueden tor y por sus dulces pláticas ligeras se oye un grillo cantar. Grillo que espanta narse hasta en terribles crimi giro el mundo en el árbol, suavemente. un elástico gato enamorado.
pales. DINA, LA HERMANA Para mí Dina Palacios hereda Rompió súbito canto sus porfias, La torre de la Iglesia, en la mañana AMIGA, DEVOTAMENTE a la juventud femenina de El y abrió el aire la flecha de un zenzonte.
de la Pascua Rorida, llega al cielo.
La dolorosa tiranía del desSalvador una enseñanza Que otros niños, en hondas lejanias, cualquier ángel te toca la campana! tino le enrareció el ambiente vale un tesoro y es la preocusobre la luz del renovado monte, que todos hubiéramos querido pación por la suerte de los Universo menor! Claro horizonte para ella hecho de luz, de perniños desamparados y sin culpuedan mirar en los azules dias la mentira fugaz de otro horizonte!
que me enseñas en paz, sencillamente, fumes y de sueños.
que todos los caminos van al monte.
Su excelsa personalidad no Quién sabe, quién sabe si fué yunque seguro al implacahaya otras que quieran seguir TERCETOS DE CUZCATLAN Juan Cotto ble golpeteo de este siglo loco su ejemplo.
de incomprensión.
Otoño de 1932.
Por todo eso, y, porque fué En una suavidad en que se ha roto. En México. Lucha desenfrenada por lo dulce y porque fué bella y pura el encendido Trópico, levanta material, exterminio de pueblos, y santa, nosotros sus amigos, su gracia de paloma Suchitoto.
estridencia de máquinas, inversilenciosos y buenos, apenas Estos son los últimos poemas sión de conceptos, la hidalguía de quien es uno de los más gepodemos hacerle el suave ho. De dos cosas eternas la osadia merosos espiritus de América, una en derrota y el triunfo de la menaje de un suspiro.
de este pueblo feliz tiene divida; de las voces más claras de la rudeza sobre la bondad, no son del mar azul y el manto de María!
alegría y de esperanza.
ciertamente escenario propicio Alfonso Rochac Juan Cotto el de la poesía para mujer como ella.
Si una ros1 se cansa de ser rosa vegetal, que así la calificó AréSan Salvador, 1932.
valo Martínez ofrece en esta ocaYo quisiera para Dina, cuya rompe el breve columpio de su vida, sión las primicias de su libro desaparición es todo un símbolo, y en ni pueblo se vuelve mariposa. Agua desnudas. Ya era tiempo de el homenaje sencillo de una que el poeta nos hiciera uua dáORACION tarde apacible en «San Antonio. Partes si hueles el olor que esconde diva que sea capaz de desafiar donde todos los que saboreamos POR EL ALMA DE DINA PALACIOS en espeso botón la pomarosa.
al tiempo y un acto de gracias al Numen de América. Rafael Hela influencia bienhechora de su (En esto hay una voz que no responde)
liodoro Valle. México, 1932. Señor, yo no pretendo escrumentalidad, y la mansedumbre tar tus arcanos, por qué murió, de su espíritu, pudiésemos exclamar en un sincero afán de por qué esa esencia pura se evaporó del sagrado vaso pre OCTAVIO JIMENEZ renovarse: Dulce hermana amiA.
maturamente. Senor, Tú sabes ga, que lo irreparable de tu el anverso de la vida entienABOGADO NOTARIO y sacrificio sea para nosotros, los des la muerte, su reverso.
OFICINA: 125 varas al Este del Almacén Robert que aquí esperamos, el fuerte Señor, yo sólo sé que eres frente a Reimers.
llamado a una rectificación.
la inmensa Bondad y el inmenso Teléfono 4184 Apartado 338 Max Brannon Perdón. Recibela en tu seno.
San Salvador, 1932, que tura. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica