316 REPERTORIO AMERICANO. Hombre de Hobbes. eso replicamos del análisis, compromete sus frutos en lo siente o lo adivina por sensación profelizmente que en el balance de la ética, la esterilidad de su eclecticismo, que pia o por receptibilidad de la ajena, sin el alma humana sólo por excepción pa abandona a la mente de los neófitos, riesgo de equivocarse de otra manera dece de taras de atavismo; y que bien di no siempre alerta. el cuidado de orienque cuando se traiciona.
rigida lleva en sí virtualidad bastante pa tarse a sí misma, sin su guía, frente al Hagamos pues conciencia en la Unira preparar el Hombre de Emerson, que dédalo de los sistemas filosóficos. Mas versidad del mañana: conciencia, sobre es la suprema aspiración hacia el dios por ahí no queremos decir, empero, que todo, a ver de formar un hombre que hombre en quien deben soñar los uni los universitarios pretendamos labrar el resista el descalabro de las ciencias esversitarios.
raciocinio del hombre nuevo sobre un peculativas, el derecho, la economía, la Conocemos el tipo del hombre dotado marbete de imposición intelectual, que política; un hombre nuevo que del esde fuerza de abnegación suficiente para. ponga un rubro a su inteligencia; sino pectáculo de semejante descalabro saque sobreponerse aún dentro del común que si la Universidad del porvenir abdica la inspiración del amor, del esfuerzo y vulgar extraño a la Universidad. a los ra el deber de marcar rumbos a seguir de la justicia integral que han de cumerrores del ambiente y aún a sus propios o no seguir, en albedrío, por el mismo, plir su obra en la nueva redención que extravíos egoístas del pasado; y he ahí kecho se distanciaría de los fines de culse impone.
un lote apreciable y pronto al nuevo tura positiva a que hoy está llamada, proselitismo. Son todos aquellos hom entre los cuales no es menor que ningubres, muchos por fortuna, que por inspi no el de acabar con las viejas rutinas Pero la Universidad no debe contar ración de la naturaleza o digamos de del saber abstracto, que conducen a la con la vana soñación de que las gentes Dios, para conformidad de tolerancias, fosilización de la voluntad; y a veces a se acojan a su seno. Las gentes no ca: llevan en su espíritu, aunque minúscu petrificar la inteligencia misma.
ben en la Universidad, ni la Universilo, el brote de amor y sacrificio que lleEl proceso a seguir para la realiza dad cabe en el intelecto de las gentes, vó a Jesús hasta el zenit de la divinidad, ción del ideal humano bien asistido, no cierta o romántica.
si es que queremos hablar del pueblo es otro, ya lo dijimos, no puede ser otro por igual y como es de justicia.
Lo que importa es que el tipo del que el que fluye del ejemplo y los mé.
La Universidad se desnaturalizaría si hombre nuevo esté construído sobre una todos sencillos de Jesús, superiores en fe de moral humana, pronta al amor, a eficacia a los ejercicios de toda filosofía, por error o por debilidad sólo pone los la caridad, al sacrificio del hombre por híbridos por lo general.
ojos en el proletariado. Si como ha de el hombre; a la vez que pronta también ser los pone en el común de la masa de En balance de aportes, la Universidad los hombres, no debe la Universidad a combatir el mal, no por mano de la del porvenir, después de alentar la germansedumbre que lo alienta, sino por atenerse a lo impráctico: si la montaña minación o el desarrollo de un ideal no viene a ella, vaya pues hacia la monobra de una conciencia irreductible en emotivo en las espiritualidades deficientaña, en su afán y en su deber de evanel ejercicio del propio deber, y por obra tes, después de darles alas. ha de darde una fortaleza indomable en la defengelización. Antes que a un llamamiento les también, valga el símil, una brújula de sectarios de clase, que puede conducir sa del derecho, no menos del ajeno que y un sextante de control; y también y del propio.
derechamente a hacer de la Universipor qué no el oriente. cuando sólo se nos dad un núcleo amorfo de hombres listos Aún mirando a su Dios, el cristiano de ofrezca bajo el aspecto de una luz de a la lucha pasional de sus sentimientos, culto divino puede inspirar su acción de observación.
debe atenerse la Universidad al interés energia contra él mal venido de sus sede guardar sus aulas para el oficio de mejantes, o en el ánimo implacable de la serenidad de las ideas; y debe mirar Jehová, o mejor en la semblanza del Jesús airado que para la salud de los hijos a un tiempo porque, fuera de ella cada del Creador, arrojó del Templo a los La nueva Universidad, libre y de: procual combata por su credo, llevado de mercaderes que lo. profanaban.
moción individual hacia un fin colecti palabra o por escrito hacia todos los ámvista, no podrá preparar el bien común. bitos. El libro, la tribuna y sobre todo la prensa, son los llamados a extericriII.
a que se siente llamada, si no renunne cia desde ahora mismo al papel de sólo zar y difundir la obra de una Universihacer ciencia, y no conciencia.
dad que busque acierto y no confusión Para cimentar, caso de ausencia de en su puesto de mentora. Para manteritos edificantes. la filosofía de creenPuede ser que se nos diga que la conner intactas su autoridad y unidad di. cia autónoma y auténtica en el alma de ciencia, como la razón, son elementos rectrices, ha de poner su servicio intercada hombre nuevo, tampoco subordina incoercibles que se sustraen a la unifino de difusión al abrigo de todos los tucación de sentido. Pero eso es falso, aunda a las filosofías de, escuela, se hace multos: y su servicio externo de vulgapreciso que acudamos a forjarle algunos que ambas sean potencias del fuero íntirización en manos de sus más sanos y elementos de visión y de nervio, que no mo. La razón, como de: casta intelecmejores apóstoles, pues sólo así cumplide juicio.
tual, adolece de las discrepancias que le ría bien con el pleno de su nueva taEl primer contingente, de visión, impone la mayor o menor inteligencia rea; y sólo así podría llegar al pleno de digamos de principio. se ha de buscar del sujeto; y es en consecuencia desisu poderío de prestigio.
en un ideal constructivo, de patria, de gual en el guarismo del conglomerado amor, de ciencia, de voluntad, de glo humano; y es, por la esencia y la necesiria, aún de vanidad superativa; un sano dad de su vuelo supremo, una fuerza ideal por fin, el, que más exalte ca llamada a repeler todo método de disciEn síntesis, el Hombre Nuevo ha de da espíritu, el que más lo disponga plina. Al paso que la conciencia, de casta moral, es en sí misma de abstención ser, mejor si sabio; pero antes que sabio al esfuerzo el que mejor nos ponga ha de ser un iluminado en el dominio en postura de actuar por el sagrado del y limitación, si no ha de morir a propia del bien trascendental y humano a la Hombre. Así pues, por cantidad cada mano de su libertinaje. Así como las hombre nuevo ha de ser consubstancial fuerzas intelectuales, en su fisonomía de mente hombre de acción, siempre que creadoras, perecerían en un ambiente Luego, en síntesis también, la Univerpor calidad lo sea de acción plausible de subordinación, así perecerían las sidad, por caminos sencillos y al alcance fuerzas morales, en su genio y función de todos, debe labrar la conciencia soen el sentir de la comunidad.
El segundos factor, de nervio, objeti de moderadoras, si se las emancipa del cial que necesita el hombre nuevo.
vo éste, es el que se dirige a buscar un precepto de sujeción.
Digamos para concluir, que si sa proceso de ejecución puesto al: servi si se nos preguntara, acaso, qué preapartan de allí la Universidad o el Homcio del ideal adquirido. Desde luego cepto es ése y quién lo ha escrito, di bre Nuevo, ninguno de los dos irá muy alejémonos en el arte de los métodos, ríamos, sin vacilar que toda conciencia, lejos.
del sentido de crítica comparativa de emotiva como es, adivina el precepto, Víctor Guardia Quirós Taine, que con todo y la profundidad si no lo lleva imbibito; y diríamos que vez. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica