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354 REPERTORIO AMERICANO esto: todo el que se ocupa de labores decir, se trata de un móbil imaginario sus aclaración que ponía un esquema de or de nuestra mente pura y aislada y com hace, en cambio, Galileo? En vez de den sobre tres siglos de confusa memo paramos esos hechos que la realidad perderse en la selva de los hechos enria. Una vez más se pudo ver que el imaginada por nosotros produciría con trando en ellos como pasivo espectador, conocimiento no consiste en poner al los hechos efectivos que nos rodean. Si comienza por imaginar la génesis del hombre frente a la pululación innume casan unos con otros es que hemos des movimiento en los cuerpos lanzados curable de los hechos brutos, de los datos cifrado el jetoglífico, que hemos des jus inotus generationem talem constituo.
nudos. Los hechos, los datos aun sien cubierto la realidad que los hechos cu Mobile quoddam super planum horizondo efectivos no son la realidad, no tie brían y arcanizaban.
tale proiectum mente concipio omni nen ellos por sí realidad y como no la. Esta faena es la ciencia: como se ve, secluso impedimento.
tienen, mal pueden entregarla a nuestra consiste en dos operaciones distintas. Así inicia Galileo la Jornada cuarta de mente. Si para conocer, el pensamiento Una puramente imaginativa, creadora, su libro postrero titulado Diálogo de no tuviese otra cosa que hacer sino reque el hombre pone de su propia y li las nuevas ciencias o discorsi e dimosflejar una realidad que está, ya ahí, en bérrima substancia; otra confrontadora trazione in torno a due nuove scienze los hechos, presta como una virgen pru. con lo que no es el hombre, con lo que, attenenti a la Mecánica ed ai movimen.
dente esperando al esposo, la ciencia sele rodea, con los hechos, con los datos. ti locali. Estas nuevas ciencias son, ría cómoda faena y hace muchos mile La realidad no es dato, algo dado, re nada menos, la física moderna, nios que el hombre habría descubierto galado, sino que es construcción que el Concibo por obra de mi mente un todas las verdades. Mas acontece que hombre hace con el material dado. móbil lanzado sobre un plano horizonla realidad no es un regalo que los he: No debía ser necesario hacer constar chos hacen al hombre. Siglos y siglos los hechos siderales estaban patentes científicas debiera saberlo. Toda la en un plano idealmente horizontal y sin ante los ojos humanos y, sin embargo, ciencia moderna no ha hecho sino eso y estorbo alguno pero esos estorbos, imlo que estos hechos presentaban al homsus creadores sabían muy bien que la pedimentos que Galileo imaginariamente ciencia de los hechos, de los fenómenos quita al móbil son los hechos ya que bre, lo que estos hechos patentizaban tiene en no era una realidad, sino todo lo conun cierto momento que des todo cuerpo observable se mueve entre trario, un enigma, un entenderse de éstos, quitárselos de de impedimentos, rozando otros cuerpos y arcano un problema ante el cual se estremecía de lante y ocuparse en puro imaginar. Así. por ellos rozado. Comienza, pues. por pavor. Los hechos vienen a ser, pues, por ejemplo: los cuerpos lanzados se construir idealmente, mentalmente, una como las figuras de un jeroglífico. Han mueven de innumerables modos, suben, realidad. Sólo cuando tiene ya lista su reparado ustedes en la paradójica conbajan, siguen en su trayecto las curvas imaginaria realidad observa los hechos, ir ás diversas, con las más distintas ve mejor dicho, observa qué relación guardición de tales figuras? Ellas nos prelocidades. En tan inmensa variedad nos dan los hechos con la imaginada reasentan ostentosamente clarísimos perdemos, y por muchas observaciones lidad.
perfiles, pero ese su claro aspecto está que hagamos sobre los hechos del moahí precisamente para plantearnos un vimiento enigma, para producir en nosotros conno lograremos descubrir el José Ortega y Gasset verdadero ser del movimiento. Qué Madrid, mayo de 1933.
fusión. La figura jeroglífica nos dice. Me ves bien? Bueno, pues eso que ves de mí no es mi verdadero ser. Yo estoy aquí para advertirte que yo no soy mi efectiva realidad. Mi realidad, mi sentido está detrás de mí, oculto por mí.
Carta a Juan del Camino Para llegar a él tienes que no fiarte de Envio del autor. Manizales, Colombia mí, que no tomarme a mí como la realidad isma, sino, contrario, tienes. Presentáronle al rey de Arabia un a contendor, hubiera envidiado el misque interpretarme, y esto supone que alfanje damasquino, lisonja para un mísimo Duque de Orleans, más tarde has de buscar como verdadero sentido guerrero. Alabáronle los grandes de la Luis XII de Francia. En mi caso, la falde este jeroglífico otra cosa muy distin asistencia áulica, no por ceremonia, sí ta de conosura en el decir, la suple, y ta del aspecto que ofrecen sus figuras. con razón; y atentos a la fineza y arte, con ventaja, la claridad y mi personal La ciencia es, en efecto, interpreta alargaranse a juzgarlo por rayo de ace manera de ser; y por si esto no alcanción de los hechos. Por sí mismos no ro. si no pecara algo en corto. Mandó zare a cubrir, tengo para ofrecer mi venos dan la realidad, al contrario, la ocul llama: el rey al príncipe para que diera hemente deseo de acertar, de encontrar tan, esto es, nos plantean el problema su voto; y podía, pues era el famoso la verdad en lo que antes era claro y de la realidad. Si. no hubiera hechos no Jacob Almanzor. Vino, examinóle, y di que hoy se va tornando laberíntico; la habría problema, no habría enigma, no jo que valía una ciudad; propio apreciar. verdad, que con ser virtud exclusiva de habría nada oculto que es preciso des de un príncipe. Instó el rey que si le los dioses. suele entregarse en veces a ocultar, descubrir. La palabra con que hallaba alguna falta. Respondió que tolos humildes en brazos de la razón.
los griegos nombraban la verdad es das eren sobras. Pues príncipe, estos De un honrado periodista aprendí, en alethia, que quiere decir, descubrimien caballeros todos le condenan por corto. épocas en que no escaseaban, que es to. quitar el velo que oculta y cubre El entonces, echando mano a su cimita mala táctica rectificar conceptos; mas algo. Los hechos ren la realidad y rra, dijo: Para un caballero animoso cuando ellos provienen de poca informientras estemos en medio de şu pulu nunca hay arma corta, porque con ha mación, conviene al menos aclararlos.
iación innumerable estamos en el caos y cerse él un paso adelante, se alarga ella Mi amigo. Juan del Camino ha dicho la confusión. Para des cubrir la realidad bastantemente, y lo que le falta de ace abundando en ligereza: Sorprende al.
es preciso que retiremos por un momen ro. lo suple el corazón de valor.
escritor Arturo Zapata que hablemos de to los hechos de en torno nuestro y nos Exquisita anécdota ésta en que Gra diálogo entre los pueblos. Pero esa sorquedemos solos con nuestra mente. En cián a quien cito sólo para correspon presa viene en él de que todavía vive tonces,. por nuestra propia cuenta y der a mi gallardo contendor del momen sumiso a las supersticiones que las casriesgo, imaginamos una realidad, fabri. to. Juan del Camino en su galano es tas gobernantes han creado en torno de camos una realidad imaginaria, puro in tilo y de inconfundible manera, saca de ellas. No, amigo mío: la informavento nuestro: luego, siguiendo en la una escena simple una admirable lec ción es equívoca o falsa su deducción, soledad de nuestro íntimo imaginar, ha ción, que utilizo ahora a manera de esti porque yo no soy ni lo uno ni lo otro.
llamos qué aspecto, qué figuras visibles, mulante, que no de panacea, para salir esto es, lo que precisa ser por estos laen suma, qué hechos produciría esa rea de nuevo al campo de las ideas donde dos de América para llegar a notable; lidad. imaginaria. Entonces es cuando erguido caballero me espera, lanza en no vivo sumiso a las supersticiones, ensalimos de nuestra soledad imaginativa, ristre y cara al sol; caballero que como tre otras razones, porque no puedo ser Busquemos el equilibrio. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica