278 REPERTORIO AMERICANO ROGELIO SOTELA ABOGADO NOTARIO Oficina: Pasaje Dent TELEFONO No. 3090 Casa de habitación, Teléfono No. 2208 El proyectado reconocimiento del gobierno Soviético por parte de los EstaOCTAVIO JIMENEZ dos Unidos levanta la voz de Trotsky y acusa severamente a la gente que gobierna en Rusia. Los Estados Unidos Abogado y Notario. afirma están entrando en un período de profundos cambios sociales. TraOFICINA: tar con los gobernantes rusos es peligroso. Estos han traicionado los prin50 varas Oeste de la Tesorería cipios de la revolución defendidos por Lenin. Cuando Chicherin en carta di.
de la Junta de Caridad.
rigida Lenin tuvo la osadía de sugerirle la conveniencia de pensar en haTel. 4184 Apdo. 338 cerle concesiones al Presidente Wilson con relación a las leyes del sufragio de la República Soviétida, Lenin le contestó que debía ser recluído en un sanatode hombres y de caracteres, que agota rio en vista de la bancarrota de su baa los valientes y aplana a los vacilanlance político. Es una vergonzosa cates. Lo afirmó para los demás, para pitulación hacer concesiones a estados los hombres sin conciencia revoluciona capitalistas que son todos imperialistas.
ria. Dió juicio que cac a los actos del Es severa la voz de Trotsky condenando individuo común. El es revolucionario el entendimiento entre la Unión Sovié.
y en el destierro continúa divulgando lo tica y el Departamento de Estado norque en el Poder realizaría. Está sobre teamericano.
los pasos de los que gobiernan hoy La diplomacia Soviética está en deRusia y no enmudecido sino censurador, cadencia, porque su conquista suprema terriblemente censurador. Los gobier es la fórmula de Ginebra que acuerda la nos lo temen y le cierran territorios. definición de agresión y de nación agreAmbula y en los días de reposo obteni sora, una fórmula que se aplica no sólo do sin capitular, escribe copiosamente. a las interrelaciones entre la Unión So.
Es primero que nada, un escritor for. viética y sus vecinos, sino también a las midable. Todos entienden lo que es interrelaciones entre los misinos estados cribe porque lo hace para la inmensa capitalistas. Han abandonado los prin.
mayoria, para el proletariado del mundo cipios revolucionarios estos gobernantes que él no olvida en sus ideales revolu rusos que mandan al señor Litvinof cionarios. Su actividad es sorprendente. negociar con el señor Roosevelt. En a Versalles se fabricó el mapa de Europa y el gobierno Soviético al aceptar la fórmula anacrónica dictada en Ginebra se ha constituído en guardián de ese mapa político. La diplomacia Soviética no tiene sada de revolucionaria. Lo único que persigue es afianzar la seguridad interna de su gobierno contra los riesgos que provengan no sólo de las revolucioncs. sino de las guerras.
Esas son en lo esencial las ideas politicas de Trotsky expresadas con motivo de la proyectada reanudación de relaciones diplomáticas entre Rusia. y los Estados Unidos. No ha cambiado este recio luchador que ayudó en una parte esencial a la obra revolucionaria que hoy usufructúan los moderados de Rusia. No escribe para lamentarse, ni para echar pesimismos. No conoce Trotsky la lamentación. Sus ideales revolucionarios son universales porque él es una intelia (MATLA) FOLLETÍN DEL Rep. Am. 11)
a visto sus ojos y lo han hollado sus pabla levemente al contacto de las del sos No tiene patria: como las aves su forastero, Xilotl se expresa así: vida es un perenne emigrar. Pertene La mano de Cararé revela a Xiloti ce a una vieja tribu del norte cuyo re su secreto. Dice cómo desde lejano país cuerdo se ha perdido para siempre; volará hasta su palenque una ave de ra sin duda, nunca tuvo familia porque no ro plumaje y desconocido canto.
Es el conocić padres ni hermanos. Vino solo amor. Su extraña presencia embrujará al mundo y su alma tierna, desde un al Cacique, quien desde entonces se anprincipio, careció de afectos: únicamen gustiará de nostalgia. Xilotl descute le dieron abrigo con su sombra les bre la silueta encantada de una princeárboles y fueron sus amigos los canoros sa extranjera que conquistará el amor pájaros. Creció libre como las nubes de Cararé. La noche tiene enredada en en verano. De los cenzontles aprendió sus cabellos, el día anida en sus pupia cantar; de los animales selváticos las, el carmín de las rosas se ha posado luchar por la vida. No olvida un episo en sus labios y su cuerpo magnífico na dio, los trágicos amores del Popocate robado su esbeltez a la palmera. Una petl e Iztaccihuatl, que una hechicera gran lengua de fuego envuelta en espadel país de Anáhuac, le refirió relacio sas humaredas, distingue Xilotl: el fue nándolo con su vida. Pero Xilotl sonrió go es la pasión, el humo es el dolor, incrédulo y se alejó de la bruja. Des Cararé amará y sufrirá. En su paler pués vinieron las lunas y con ellas el do que la bella desconocida vivirá mientras lor a su corazón; pero el cuerpo el Cacique sueña y espera. En el corazón de ella existe un lunar sobrío, la mațuvo joven y vigoroso. Xilotl sólo sabe cantar y leer el destino en los sig indiferencia, que hará llorar a Cararé: nos de la mano, su dolor será agudo como el aguijón de Al oír esto el Cacique le ruega exa la abeja; sin embargo, con la herida vendrá la miel: Cararé será al fin. Xi.
mine su mano, ansioso de saber qué le reservan los dioses. Xilotl accede, ga lotl calla de improviso, sorprendido, y exclama. Qué es esto. la raya del noso de la buena voluntad del soberano.
Alza los brazos en actitud mística, co. corazón es larga y profunda, roja como mò evocando a ocultos espíritus, y toma fuego de volcán, pero se quiebra al llegar entre las suyas la mano que le brinda a la base del dedo grande, índice de la Cararé. Mirando sobre ella, que tiem vida. Trata de buscar sobre la manc examinada, pero la raya no concluye, permanece interrumpida y se pierde entre el apretado volumen del, músculo.
Xilotl se incorpora entre la general espectación, y calla.
Cararé demanda con energía. Di, pronto, qué me reserva el Gran Espíritu. Señor contesta Xilot1 a veces lo que vemos en las manos no se cumple o puede ser evitado. Por qué no hablas claro, francamente? insiste, impaciente, el Cacique. Habla, Xilotl, o te entrego a los, sacerdotes. Xilotl, temeroso, replica. Noble Cararé, señor de estas tie rras que devuelven multiplicado el grano que se siembre en ellas, te esperan grandes padecimientos: esa raya que brada me dice que la estrella de tu vida apagará muy pronto su fulgor: una nube negra la ocultará para siempre. Mientes, Xilotl! grita, levantándose, el Cacique.
Xilotl, con acento de seguridad, contesta. Por los dioses de mis tribus primitivas, que lo que te digo, es lo que realmente dice tu mano. Xilotl distingue una sombra con bordes rojos cernerse sobre tu cabeza!
Las palabras de Xilotl martillean con pesado ritmo el cerebro del Cacique.
Jamás nadie le habló con tal convencise Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica