México (El indio)
Todavía más fino, aún más fino, más fino, casi desvaneciéndose de pura transparencia.
de pura delgadez como el aire del Valle.
Es como el aire Arago en De pronto, suena a hojas, suena a seco silencio, a terrible protesta do árboles, de ramas que preveén los aguaceros, Es como los aguaceros.
Se apaga como ojo de lagarto que sueña, garra dulce de tigre que se volviera hoja, lumbre débil de fósforo al abrirse una puerta.
13 Bandas y 48 estrellas Es como lumbre.
Lava antigua volcánica rodando, color de hoyo con ramas que se queman, tierra impasible al temblor de la tierra.
Es como tierra.
Como tierra de cactus y magueyes, de órganos que edifican verdes templos, como bóvedas de aire, con techumbres limpisimas de aire, sol y agua.
HADE VEGA 106 REPERTORIO AMERICANO nes encontradas como por la originalidad Atenea de la cabeza de Zeus, surge de la de del método seguido.
Ampere toda la electrodinámica, arrpada y Pero donde culmina, indudablemente, su victoriosa, dispuesta a seguir por el camino genio creador es en el dominio de la electri de los grandes descubrimientos, después de dad y el magnetismo. No vamos a señalar proclamar que el magnetismo y la electrici.
los descubrimientos famosos que perpetua dad no eran fenómenos extraños, sino marán su nombre een la historia de la Física. Es nifestaciones de una misma fuerza. Las difamiliar a cualquier estudiante de ciencias namos, el telégrafo, la iluminación eléctrica, la ley fundamentai de la electrodinámica, estaban allí en germen. Pero el sabio que formulada y demostrada con todo rigor matemático Ampere en por cultivó la ciencia, apasionadamente, desinte.
en 1820. Las experiencias de Oersted, glosadas por en la resadamente, no se molestó en buscar las Academia de Ciencias de París el y el 11 aplicaciones prácticas de sus trascendentes de septiembre; fueron el punto de partida investigaciones. Un Edison cualquiera coorpara la idea capital que iba a revolucionar dinaria en un futuro no muy lejano, y a fuery trasformar toda la electricidad moderna. za de paciencia, lo que para un espíritu de Los años de 1820 a 1826 constituyen el pecalidad era, sin duda, un quehacer secun.
riodo heroico de su carrera. Como Pallas dario.
Poema del Mar Caribe Por RAFAEL ALBERTI Cortesía del autor. En un cuaderno de 44 págs. Madrid, 1936. Precio del ejemplar: pesetas (Viene del numero antepasado)
Cuba dentro de un piano ¿Ves, ves, ves?
El negro va a cuatro pies. 1900)
el negro baila la rumba, Cuando mi madre llevaba un sorbete de fre.
y aunque se vuelva tarumba del derecho o del revés, sa por sombrero y el humo de los barcos aun era humo ha ¿ves. banero.
el negro va a cuatro pics.
Mano a mano, Mulata vuelta bajera.
que Cuba no es del cubano.
Cádiz se adormecia entre fandangos ha Digo, dice, dice, digo.
baneras digo que el cañaveral y un lorito al piano quería hacer de tenor.
sabe muy bien que Central muele con viento enemigo. dime dónde está la flor Te lo dice un negro amigo: que el hombre tanto venera.
Blanco. tú no ves que el blanco va a cuatro pies?
Mi tío Antonio volvía con aire de insurrecto. Tú, tan listo, y no lo ves!
La Cabaña y el Principe sonaban por los patios de El Puerto.
Los anquis vienen volando. Ya no brilla la Perla azul del mar de las urracas azucareras, Antillas.
urracas que urraqueando Ya se apagó, se nos ha muerto. hasta nos están llevando el aire de las palmeras.
Me encontré con la bella Trinidad.
Negro, da la mano al blanco, Cuba se había perdido y ahora era de verdad.
dala ya, Era verdad dásela ya.
no era mentira.
Blanco, da la mano al negro, Un cañonero huído llegó cantándolo en guadala ya, dásela ya.
jira. al yanqui que viene y va, La Habana ya se perdió.
negro, dale ya, Tuvo la culpa el dinero.
negro y blanco, dadle ya.
Calló, Mano a mano cayó el cañonero.
contra el norteamericano.
Negro, mano a mano, Pero después, pero jah! después blanco, mano a mano, fue cuando al si negro y blanco, mano a mano, lo hicieron yes mano a mano, mano a mano.
Casi són (Por el mar Caribe me bajaba el cielo tienen muerto. la voz firme y pura de Juan Marinello, la desconocida de Pedroso y el Negro, da la mano al blanco.
recuerdo mojado de José Manuel.
Blanco, da la mano al negro.
Diez era de mayo cuando el Siboney yarpó de la palma cubana al maguey Mano a mano, que Cuba no es del cubano, que el mar mexicano citó a recibirme, las. dagas abiertas. gentil, para herirme. que es del norteamericano, Los caminos se cansan, se desploman de tanta hundida huella de guarache, Kilómetros y leguas, derrotados, abandonan las largas lejanías.
Se sabe, se comprueba que no eres esa curva monótona y sin músculo que por los anchos muros oficiales Diego Rivera ofrece a los turistas.
Contra el gringo que compra en tu retrato tu parada belleza ya en escombros, prepara tu fusil. No te resignes a ser postal de un album sin objeto.
Que no eres sólo el tema de una estrofa, ni el color complemento del paisaje, ni ese perro furioso que se tumba, dócil, después de herir, al pie del amo.
Ercs México antiguo, horror de cumbres que se asombran batidas por pirámides, trueno oscuro de selvas observadas por cien mil ojos lentos de serpientes.
Contra los gachupines que alambican residuos coloniales por sus venas, prepara tu fusil. Tú eres el indio poblador de la sangre del criollo.
Si él y tú sois ya México, ninguno duerma, trabaje, llore y se despierte sin saber que una mano lo estrangula, dividiendo su tierra en dos mitades. Seguirá)
Notas Toda mi infancia en el Puerto de Santa Maria, Puerto Real y la isla de San Fernando estuvo rodeada de una atmósfera clara y romántica de canciones, palmeras, loritos y palabras de la isla de Cuba. Mis primos más pequeños han sido arrullados en sus cunas por los sones habaneros de una mulata. Es.