EDITOR: REPERTORIO. AMERICANO García Monge Suscrición mensual, 02. 00 EXTERIOR. El semestre, 3. 25 (Elano, 86. 00 o. am.
Giro bancario sobre Nueva York.
Correos: Letra SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA Un revolucionario en el Medioevo (Tiempo de lectura: cinco minutos. Envío de la autora No fué el Medioevo, como muchos lo creen, damento único o esencia de todas las cosas.
una época de tinieblas, de estancamiento esAsí también, las matemáticas eran para Bapiritual. Fué más bien algo así como un Jarcon la base fundamental de todas las demás go periodo en que muchas cosas buenas se esciencias. Es hoy, en pleno siglo xx, cuando taban scotando. Los pueblos daban pruebas nos damos cuenta de que la matematización de una gran vitalidad: se constituían estados en el método, no solo es posible en la mecánipoderosos; el cuinercio tomaba un impulso ca y en otras rainas de la física, sino tamconsiderable; se construían bermosas catedrabién en ciertas partes de la química. Es un les géticas; se fundaban universidades (Salerhecho que ya esto sucede también en las cienno, Paris, Oxfcid, etc. Trovadores y juglacias biológicas.
res divertian a las gentes con la narración Tres invcaciones se le atribuyen a Roger de leyendas, de aventuras, y con canciones en Bacon: la del microscopio, la del telescopio y las que exaltaban el heroísmo e idealizaban la de la pólvora. Con justicia se le considera a la mujer. Pero, la generalidad de los mecomo un precursor de Galileo y de Newton dioevales era muy ignorante, ya que su única por sus estudios acerca de la propagación, repreocupación consistia en prepararse para flexión y refracción de la luz, y sobre el arbien norir. Un mundo de represiones. Cada co iris.
individuo RC consideraba como un forastero Bacon también se le deben valiosas aporque sólo lebia pensar en la otra vida. Esta taciones en el campo de la astronomía. Son era un infierno de llamas y demonios, o un notables sus obscrvaciones acerca de la persparaiso lleno de delicias. Los fantasmas abunpectiva y de la magnitud apareate de los disdaban y el rey del espanto cra el compañero cos solar y lunar vistos en el horizonte.
inseparable del hombre. Así lo cuenta el ameEra muy difícil para un espíritu ávido de no historiador Hendrik Van Loon.
saber como el de Bacon, sustraerse a la fie.
La Iglesia, fiel guardiana de la fe, consibra de la época, y por eso fué también alquideraba que el cuocimiento de muchas cosas mista. En esto si se contagio de los errores cra capaz de despertar inquietudes en los homcomunes, pero no fué un fanático como todos bres. Como consecuencia de esto, cra de eslos demás que buscaban la piedra filosofal y perar que los individuos concibieran idcas pcel elixir de larga vida.
ligrosas que, irremisiblemente, los conduciBacon tenía que ser un acusado. Todo homrían a una eterna perdición.
bre de genio lo es. Sus doctrinas resultaban La Iglesia solo permitía la lectura de dos revolucionarias y por eso lastimaban muchos libros: La Biblia y la Enciclopedia de Aristoconvencionalismos. Cometió un pecado morteles. Los escolásticos cstudiaban todo a traRoger Bacon tal al mirar con desprecio el escolasticismo.
vés dc csta escayisima bibliografia, pues cra (Dé un retrato que se halla en Knole Casi e. Eso de averiguar lo que había en las entraprohibido serviras de otras fuentes. La obhas de los animales, era una curiosidad malservación directa de los fenóme:209 de la nasana que sólo podia ser propia de las artes turaleza, se consideraba como un pecado.
La compilación del gran estagirita era una de un nigromántico. La superioridad de su Los escolásticos eran grandes hombres y autoridad aceptada por todos. Bacon es tam talento le atrajo el odio de los monjes de su nadie se habría atrevido a combatir sus ideas. bién el primero que lanza una invectiva con ordea. En fin, que nuestro biografiado se iba Pero nunca falta un imprudente, un subversi tra ella, cuando dice que es más útil para la haciendo cada vez más sospechoso. Llegó un vo, y aquí es donde hay que hablar del doctor ciencia una hora de experimentación directa momento en que sus contemporáneos juzgaMirabilis de Oxford, es decir, de Roger Bacon. de la naturaleza que diez años de manejar el ron oportuno acusarlo de magia y de hechiConocemos un grabado que Vriese hizo en texto de Aristóteles. En una de sus obras cería. No cabia duda: Bacon tenía pacto con tre los siglos xvi y xvii. Aparece Bacon con llega hasta decir. debería quemar todos el demonio y habla que recluirlo o condenarlo cl hábito de su orden (era monje francisca los libros de Aristoteles, cuyo estudio sólo a muerte (iqué soluciones más admirables para no. En el ángulo superior derecho está el conduce a perder el tiempo, causar error y deshacerse de los que quieren cambiar el esSello de Salomón, y en el inferior de la iz auinentar la igriorancia.
tado de las cosas. quierda, el Ave Fénix y la Quimera se ven El libro de más valor científico de todo el Vinieron entonces los años de amargura.
entrelazadas.
Ji grabador puso, además, Mediocvo es Opus Majus de Bacon; encierra Clemente IV, que le estimaba mucho, suavi.
una rama de granado en la mano derecha de esa obra gran numero de observaciones va zó un poco el rigor con que se le trataba. PeBacon. Sabemos que la granada, con sus in liosas, de experimentos y de intuiciones ge ro cuando el Pontífice murió, se reanudaron numerables granos, se consideraba el emble niales. Habla de máquinas de volar construí las persecuciones y se le obligó a comparecer ma de la vida y de su fuerza de renovación, das en tal forma que un hombre, sentado en ante una asamblea que se reunió en Paris Sin duda alguna, el grabador Vriese tenía el centro, haga firar algún mecanismo ba bajo la Presidencia de Jerónimo de Ascoli (Pamotivos para adornar así al doctor Admirable tiendo el aire con alas artificiales, a la mane pa después con el nombre de Nicolás IV. de Oxford.
ra de u: pájaro yolador (precursor de Lco Bacon fué condenado a prisión perpetua. En Roger Bacon mució en Ilchester (Inglate nardo. Habla también de aparatos por los varias ocasiones se dirigió al Pontifice con el rra. Vivió en el siglo xui, el que mejor ca que se puede mover un carruaje sin tiro, y objeto de convencerlo de su inocencia y de la racteriza a la Edad Media.
hacer andar más rápidamente a las naves con utilidad de sus estudios. Todo en vano. BaEs tan importante la obra baconiana, que un solo remero.
con pudo conseguir su libertad después de la bien puedo asegurarse que en ella está la gé Bacon se empeño en conciliar la dificultad muerte del Papa.
nesis del adelanto científico actual. El céle de las abstracciones metafísicas, con la expe Para aumenta: su martirio en la prisión, se bre historiador Wells, dice de él: Su rimentación puramente científica. En este le prohibió escribir, pero cuando se vio libre nombre merec ocupar en nuestra historia un afán es el precursor del filósofo Francisco. y pudo continuac eus estudios, ideó una espelugar que sólo code su preeminencia al de Bacon de Verulamio, autor del Novum Orga cie de clave para poder hacerlo sin que sus Aristóteles.
nuin, con quien suele confundirsele.
contemporáneos se enterasen de las cosas Roger Bacon cu la primera persona que, con Una sed de verdad consumió siempre al doc peligrosas quc decla.
un valor inaudito, se atrevió a afirmar que tor Mirabilis de Oxford. Aprendió griego, ára La mayor parte de la obra baconiana persu épocu cra do gran ignorancia, y a aconse be y hebreo, lenguas que le sirvieron para manece todavía manuscrita en la biblioteca jar al género humano que no se dejara gober estudiar obras de matemáticas, mecánica, op de Inglaterra y de Leiden.
nar por los dogmas. Su máxima era: expe tica, astronomía y alquimia.
Por la universalidad de su genio, por su anrimentad, experimentad. Cuánta osadia se Roger Bacon se dedicó principalmente a la. sia de saber y por las acusaciones de que fue necesitaba para decir estas cosas en aquel fisica y aunque, como se ha dicho, era parti objeto, la figura de Roger Bacon recuerda la entonces! Esto resultaba tan peligroso en el dario decidido de la ciencia experimental, no de Leonardo dc Vinci.
Medioevo, como hoy hablar de la plusvalía a desdeño el conocimiento de las especulativas.
Lilia Ramos la clase explotada.
Los pitagoricos veian en los números, el fun.
Costa Rica, 1932.
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