314 REPERTORIO AMERICANO varse.
gue más arriba. Esta es la razón de mis cual ha facilitado nuestra orientación. Había conservado a este respecto un tentativas.
Vi exactamente bajo nosotros el dique recuerdo muy desagradable de nuestra Nuestras ascensiones a la estratoes de Rapverswyi y, muy cercano, el lago primera ascensión. Una nueva disposiſera tienden, por consiguiente, a explode los Cuatro Cantones. Se necesita ción con cierre de mercurio debía evitar rar la radiación desconocida procedente cierto tiempo para habituarse a la orienahora toda sorpresa.
Sin embargo, del espacio celeste bajo una décima so tación en tales alturas; del mismo modo lancé un suspiro de alivio cuando el melamente de la masa atmosférica total. Es que los observadores terrestres tienen canismo (que, naturalmente, no había de esperar, pues, que a estas alturas las siempre la tendencia de estimar que un podido ser ensayado) funcionó irrepropropiedades originales de la dicha ra globo observado a cierta altura se en chablemente, Prudentemente, tiramos diación estén muy poco modificadas por cuentra directamente sobre ellos, nos de la cuerda de la válvula, primero dula atmósfera terrestre. Sería particuotros tuvimos que acostumbrarnos a con rante cinco segundos, luego diez segunlarmente interesante determinar si en ceder su verdadera distancia a los pun dos, después veinte segundos. Cuando las grandes alturas se encuentran igual tos lejanos.
comprobamos que esto era poco, tiramos, mente las partes que constituyen las Volamos en seguida sobre el lago de de la cuerda durante treinta segundos.
más suaves de la radiación y que, por Zallenstadt; luego, sobre el Rin, al sur Entonces comenzó a descender el globo.
la absorción de las capas inferiores del de Sargans. cuando estábamos basa Pudimos alcanzar una velocidad de cuaaire, escapan naturalmente a los observa. tante por encima de las montañas de tro metros por segundo.
dores que trabajan más abajo.
Grisons, pudimos reconocer, todavía disLa estabilidad de nuestro globo en la La altura a la que el observador no tintamente, la forma característica del estratoesfera era tan grande que esta vetiene sobre sí más que una décima parte lago de los Cuatro Cantones. Poco deslocidad decreció rápidamente. El globo de la masa atmosférica y bajo él nueve pués, y durante bastante tiempo, no putuvo, incluso, tendencia a volver a eledécimas, se alcanza en el momento en dimos determinar nuestra posición, en que la presión del aire no es más de 10 el curso de la cual no vimos bajo nosFuertemente enfriado al principio de atmósferas (76 milímetros de mercurio. otros más que espléndidas montañas o la ascensión, se calentaba lentamente al La altura de 16. 500 metros a que corres profundos valles.
sol, y la expansión resuitante compensaponde la presión indicada es precisa Igualmente se distinguía la forma coba las pérdidas de la válvula. Por consimente a la que hemos llegado en nues nocida de las montañas glaronesas. Al guiente, tuvimos que tirar de nuevo de la cuerda varias veces en dos minutos.
tra última ascensión.
cabo de algún tiempo, durante el cual no Después de varias tentativas, el globo eché ninguna ojeada al exterior, tuve la Por fin, el globo desce:idió lentamente a las 14 30 habíamos llegado a se elevó a las horas minutos del día sensación de que debíamos estar sobre el los 11. 000 metros de altura.
18. Ascendíamos tan lentamente que, Engadine superior y la orilla del BerEntonces hicimos una nueva maniodurante algún tiempo, permanecí asoma. nina, con el glacier de Morterasche y el bra. En el interior de la cabina conserdo al agujero de entrada de la cabina, y macizo del pico Bernina.
vábamos la misma presión que en el moúnicamente al llegar a los 500 metros, Las montañas nos parecieron sensiblemento de cerrarla es decir, la presión después de un cuarto de hora, cerré el: mente pequeñas. Evoqué una topera que hay en la cima del Fighi (1. 500 meagujero. Estábamos ya separados del sobre la que algunos niños hubieran echado cal, la nieve.
tros)
mundo exterior y la ascensión hacia la Se trataba ahora de dejar salir lentamente el aire de la cabina para poestratoesfera podía comenzar. la vez que a la frontera de nuestro der abrir nuevamente el agujero de enSubíamos a una velocidad aproxima país, llegamos al límite de nuestras cartrada.
da de 1, 50 por segundo. Como los tas detalladas. Para el resto de Europa instrumentos estaban toros en orden y sólo disponíamos de cartas de escala peDejamos escapar el aire todo lo posible, sin efecto apreciable. Un barómela partida se había verificado sin ningu queña, pues teniamos que economizar tro especial indicaba la diferencia de na dificultad, mi colaborador, Co a bordo, en cuanto posible, el sitio y el presión entre el exterior y el interior, y syns, había comenzado inmediatamente a peso. Nuevamente nos entretuvimos en fué una impresión particularmente tranrealizar las medidas relativas a los rayos mirar los lagos. Pronto vimos ante nosquilizadora ver cómo el barómetro descósmicos, las cuales prosiguió durante otros la forma característica del lago de cendía gradualmente. El calor del sol toda la ascensión. como los instru Garda, que nos permitió orientarnos y de Lombardía ncs fué muy agradable.
mentos estaban esta vez mejor protegi que no perdimos de vista hasta el fin de No he dicho nada todavía de la temdos contra la humedad y funcionaron nuestro viaje. La vista del cuello de peratura en el interior de la cabina. El normalmente, confiamos haber obtenido Bernina era espléndida. Se percibía, dis año anterior, la cabina estaba parcialresultados irreprochables.
tintamente, el lago Azul, en el Boshiavo, mente pintada de negro y el calor nos Mientras Cosyns verificaba su tra que a menudo habíamos recorrido en hizo sufrir; la temperatura interior albajo científico, yo me ocupaba en la ma nuestras excursiones con esquís en Alp canzó 41º. Para evitar este inconveniobra del globo, en meair exactamente grum.
niente, esta vez hice pintar de blanco la presión barométrica y en anotar estas Entonces tuve una sorpresa.
Había todo el exterior sie la cabina.
lecturas con la hora exacta de las ob ante nosotros un lago que desconocíaPero hubiera sido preferible pintarla servaciones. Cosyns, por su parmos. Tenía un color verde lechoso. Esde gris, pues esta vez tuvimos frío realte, ha anotado las medidas tomadas de te sentimiento de sorpresa se desvaneció mente. La temperatura, tomada a la la radiación cósmica en función del tiem cuando recordé que había visto esta re altura de nuestras cabezas, era, durante po, pero sin marcar la presión barométri gión en invierno, cuando el lago helado, el día, de Pero un termómetro colocaUnicamente la comparación de los cubierto de nieve, no se distinguía del do sobre el suelo marcaba 10º bajo cero.
dos libros de a bordo, nos permitirá compaisaje que le rodeaba.
Por fin, el globo tocó el suelo de Lomprobar cómo los rayos cósmicos varían Hacia mediodía nos decidimos a prepa bardía. Un poco antes de las cinco, esen función de la presión barométrica, es rar el aterrizaje, aunque todavía tenía tábamos a la altura en que llegaban hasdecir, finalmente, de la altura. Ade mos doscientos kilos de lastre y podía ta nosotros las voces de los de abajo.
más, tuvo que estar atento para no per mos permanecer en el aire más tiempo. El primer grito que oímos fué. Bader la orientación. En un globo corrien En este instante había, fuera de la cabi jad! Somos suizos también. Nueste, de barquilla abierta, es fácil seguir la na, una presión de 73 milimetros de mer tros compatriotas cogieron la cuerda que ruta por la carta; pero esto es mucho curio. Era impresionante ver, tan pró lanzamos y nos ayudaron a descender, más difícil en una cabina cerrada, cuyos ximo a un baróinetro, marcar una pre secundados por los habitantes de Monventanillos sólo permiten una visión muy sión de 10 dé atmósfera, en la que zambano. El aterrizaje se hizo sin direducida. Además, yo tenía que perma toda vida es imposible. Esta presión co ficultad. Sin embargo, no fué un atenecer lo más quieto posible para no mo rresponde, según las tablas oficiales de rrizaje perfecto. La calina rodó varias lestar a Cosyns.
la a una altura de 16. 200 me veces por tierra.
Felizmente, pudimos volar sobre cier. tros. las 17 horas había terminado el ateto número de lagos que conocíamos, lo ¿Cómo funcionará ahora la válvula? rrizaje.
ca. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica