REPERTORIO AMERICANO 11 ¿La pa o la guerra. De El Tiempo. Bogotá Parece excesivo volver en esta página sobre el amenazante conflicto entre Bolivia y Paraguay después de las atinadas y francas observaciones de Calibán acerca de esa posible ruptura de la solidaridad hispanoamericana.
Mas el punto es tan grave y la ruptura de las hostilidades puede acarrear males de tanta consecuencia, que no será excesivo cuanto se haga por sosegar los espíritus de las dos naciones en desacuerdo. Hasta ahora los esfuerzos de los neutrales en Washington y del en el Sur del Continente no han. dado resultados apreciables, pe.
ro todavía quedan por probar algunos expedientes.
No sabemos con precisión la actitud que haya tomado la prensa en los países neutrales; pero si en todas estuviese hablando con la misma franqueza y desinterés que en Colombia, puede contribuir eficazmente al advenimiento de la concordia entre los dos países dominados hasta hoy por sentimientos belicosos.
Entre las verdades que ha recogido la historia con relación a la desventura humana de 1914 a 1918 está consignada la de la odiosa responsabilidad de la gran prensa europea en el aborto de las negociaciones para evitar el conflicto. Ciertos órganos de la prensa en los grandes centros Calleja de suburbio. La Paz, Bolivia europeos en vez de apaciguar Por Jenaro Ibáñez los ánimos como era su deber de humanidad y cultura, contribuyeron con la difusión indiscreta de telegramas y por medio de comentarios imprudentes a desencadenar la tormenta. Si la De El Tiempo. Bogotá gran prensa europea y saxoame Parece inevitable la guerra entre Bolivia y el Paraguay.
ricana hubiese obrado de acuer De La Paz llegan ya noticias en que se da cuenta de la do en todas las naciones cuya toma de varios fortines, después de sangrientos combates.
opinión dirige, tal vez se hubiera Miseria e iniquidad!
frustrado el mayor de los crí Nuestro distinguido amigo, el encargado de negocios de menes colectivos que registra la Bolivia, dirige a este diario una nota en la que declara que historia. Confiemos los americatoda la razón está de parte de su patria. El Paraguay ha hecho multitud de publicaciones en que demuestra que toda nos en la prensa del Continente.
la razón también está de su parte. Es lo que ha pasado Hay además otros recursos. El siempre en los conflictos internacionales. Cada uno de los be.
derecho público de la América ligcrantes se proclama a sí mismo poseedor único de la jusLatina ha proscrito la guerra in. ticia y defensor de todo lo bueno, noble y elevado que hay ternacional y sobre todo la guc sobre la tierra. Ni quién va a ser tan tonto y tan sincero rra de conquista. En 1870, al para confesar que hace una guerra injusta. terminar la guerra de los aliaLa guerra inevitable. pero hay guerras inevitables. Hay dos contra el Paraguay, el goacaso una sola cuestión de las que dividen a los hombres que justifique los horrores de un conflicto armado. Ah, el honor. bierno de los Estados Unidos de nacional, la dignidad nacional! Cuántos millones de seres huColombia notificó al del impe manos, cuánta ruina, cuántos dolores han costado estas pario del Brasil que no toleraría labras vacuas y carentes de sentido! Los atributos de lo una desmembración del pueblo que se llama el honor nacional aplicados a un individuo, dice vencido. En esa nota se habló Renán, bastarían para condenarlo a prisión perpetua. El ho.
por primera vez del derecho de nor nacional suele ser la opresión de los débiles, el despojo, los pueblos a disponer de sus la rapiña, y como resumen, la guerra, o sea el asesinato copropios destinos. Más tarde un lectivo, el desencadenamiento de todas las malas pasiones y la violación de todas las leyes divinas. El día en que la hubenemérito presidente de la Remanidad logre libertarse de la tiranía de las grandes palapública Argentina quiso introdubras y las queme como a falsos dioses maléficos; el día en cir en el derecho público de es que no se errojen los pueblos unos sobre otros, bajo la intos países el principio eminen vocación del honor nacional. que nadie sabría definir exactemente cristiano y civilizador. Pasa a la página siguiente)
según el cual la victoria no crea derechos.
El principio invocado por Colombia en 1870 forma hoy parte del acervo de leyes que rige las relaciones internacionales no sólo en América sino en todo el orbe, porque los diplomáticos reunidos en Versalles en 1919 llevaban ese principio como norma de sus deliberaciones. él se debe la fundación de nuevas entidades políticas y al hech)
de no haberlo cumplido con leaitad el desasosiego. de algunas comarcas en Europa y en Asia.
En primero de julio de 1928 Bolivia y Paraguay pertenecían a la Sociedad de las Naciones; no pueden, por lo tanto, alegar que no reconocen aquel principio.
Ambos gobiernos deben conocer también la declaración del presidente argentino Sáenz Peña. Ella no tiene el valor de principio aceptado solemnemente, pero corresponde a un sentimiento general ibero americano. Chile dió ejemplo de lealtad a ese principio en la celebración del tratado con el Perú para ponerle fin a la diferencia nacida de la ocupación bélica de Tacna y Arica. Todas las controversias iberoamericanas sobre límites se han resuelto o por arbitramento entre las partes o por arreglos directos en conferencias de tono amigable.
Ahora, ocurre preguntar. Qué persiguen el Paraguay y Bolivia en la guerra a que parecen abocados sus gobiernos. Conquis.
ta de territorio? Si tal es su ánimo deben saber desde ahora que el sentimiento iberoamericano de Buenos Aires a Méxicɔ se opondría con espontánea unanimidad a la desmembración de cualquiera de los dos países, invocando nuestros mejores precedentes. Las naciones más cercanas al conflicto, Argentina entre ellas, invocando o sin invocar la declaración de Sáenz Peña, no podrían mirar con indiferencia una conquista territorial en las vecindades de su jurisdicción. Se trata de imponer el pago de fuertes indemnizaciones pecuniarias al vencido?
Fuera de que la sola enunciación de semejantes pretensiones en países casi arruinados frisa con los reinos de la quimera, basta volver la vista al estado de espíritu, universal creado por las reparaciones impuestas a Alemania por el tratado de Versalles, para convencerse de que en la actual situación financiera del mundo obtener dinero para hacer la guerra y pensar en reponer los gastos hechos a los Bolivia y Paraguay quieren jugar a la guerra. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica