296 REPERTORIO AMERICANO Masferrer se ha ido. Editorial de Patria. edición del lunes de setiembre de 1932. San Salvador, fachado por la Censura de Prensa mientras estaba en capilla el cadáver de Masferrer ¡Mentira!
Mentira, muchachos.
Masferrer no se ha ido.
No se ha ido, porque no puede irse.
Porque si bien no está. ni puede estar todo Masferrer incluído en Patria, en cambio Patria es toda ella Masferrer.
Está hecha de Masferrer. Amasada de Masferrer. Incuhada por Masferrer. aún nos cobija el ala clara de su espíritu.
El está aqui, con nosotros.
Su pequeña sombra, senciſla y augusta, vive aquí, prisionera entre nosotros, en nosotros. Atada a nosotros. Encade.
nada al latir de nuestros corazones.
Alguna vez, men virtud de aquel aporte nuevo que cada generación va añadiendo a la anterior alguna vez puede un hijo renegar y distanciarse de su padre. Un hombre de su obra, un padre de su hijo, nunca. Porque en el hijo está encarnado, entregado a la suerte, todo su poder de eternidad; y esta resurrección de la carne constituye, para el hombre, su única probabilidad de sobrevivir.
Porque en el hijo alienta el hombre.
En él palpita. En él vive e irradia. por eso no podrá nunca Masferrer separarse de nosotros. Porque no puede un padre alejarse ni morir, mientras sus hijos vivan. Decís que Masferrer se ha ido. Cobardía!
De nosotros depende, muchachos, de nosotros depende que él no pueda irse; de nosotros, que no le dejemos ir. Porque en nosotros está el poder de crear a Masferrer, de resucitar a Masferrer, de engendrar un Masferrer más real que el verdadero. Que su cuerpo se ha ido, decís, frágil vaso de carne y hueso a disol verse entre la sombra? Su cuerpo se ha ido. Bien. y qué. No podemos acaso formarle aquí, en.
tre todos, un nuevo cuerpo colectivo, hecho todo el de imaginación, y de cariño, y de recuerdo? Un cuerpo ilusorio, sí: un mayavisupa que dirían los indos; un maravilloso, iridescente cuerpo de ilusión, todo él luminoso de fe, resplandeciente de esperanza, cálido de amor y de eternidad. No podemos crear, y mantener siempre vivo, siempre pronto a recibirle, un milagroso cuerpo emocional, que algún día volverá a habitar su cspíritu, cuando a él así le plazca, cuando sea llegado el momento, cuando, a nuestro conjuro, haya él de resucitar en la aurora del Tercer Día?
Sí, muchachos. Podemos.
Yo quiero, desde hoy, organizar entre vosotros, una resistencia pasiva a la manera de Gandhi. Una resistencia que tenga la virtud perenne de creación que necesitamos para no dejar ir al Maestro.
Para que su alma ave del Paraíso prisionera y libre a la vez en la frágil red de estas columnas, viva y labore siempre en cada uno de nosotros, hasta que sean dignos de él cada uno de nuestros pensamientos, cada una de nuestras obras, cada momento de nuestras vidas. Resistencia pasiva, he dicho? Sí. activa. Como en la India, la verdadera lucha por el Ideal, antes que en el mundo, debe entablarse en nuestras almas.
Debemos tener, espiritualmente, sacrificadas nuestras vidas. Debemos, Vitalistas, vivir antes que todo. Vivir como si no existiese la muerte. Vivir en el presente, dentro de la Eternidad.
Como en la India, debemos hacer caso omiso de la muerte y de la fuerza llámese como se llame De todas las fuerzas negativas, de todas las fuerzas maAlberto Masferrer teriales de la inercia, de todas las fuerzas de sombra y descomposición.
Carta alusiva ¡Arriba, Hombres en Pie! Dejemos podrirse en paz, entre sus planillas y sus San Salvador, 10 de setiembre de 1932.
dividendos, a los Hombres Sentados. DeMi querido don Joaquin. jemos a los muertos enterrar a sus muerEl de setiembre a las 10 y 55 minutos tos. nosotros, vivos, vivamos.
de la noche murió Masferrer, solo, pobre, negado. Las mejores palabras sobre este HomPor eso os propongo la Resistencia.
bre no las podeinos. decir nosotros. Tienen Resistencia, sobre todo, al desmoronaque salir de ustedes que lo quisieron y me miento interior. Resistencia al egoísmo, jor lo estimaron.
venga de donde viniere, de adentro o Todavia incomoda a estas gentes nuestro de afuera, del bando negro o del bando viejo. El día de su entierro la censura de Prensa detenía la edición de Patria por el rojo, del capital enmascarado de proleartículo cuyo recorte le acompaño.
tario, o de los bajos apetitos disfrazaPor el recorte de Francisco Morán verá dos de abnegación revolucionaria. Resisel plan de los sacerdotes para decir que Mastencia, en fin, a toda influencia extraña ferrer adjuraba de sus principios. Es necesario que se sepa esto para que más tarde extraña aunque venga de adentronadie vaya a mancillar la agonía del maes que pretende ejercer sobre nosotros su tro que fué como la de un sencillo y un dominio. toda influencia exterior o justo.
interior de la burguesía satisfecha. Pero está lo más triste. Masferrer se fué.
toda influencia que no sea, como la del Pero en la tierra quedan su madre, su señoMaestro, absolutamente pura y diáfana.
ra y una hija en Bélgica. Para ellas la única herencia,. es esa que dejan ustedes los que Que no responda, clara y cristalinamensirven sin cálculo. Quiere usted, don Joa te, a la vibración de su espíritu evanquin, ayudarnos desde el Repertorio a pedir gélico.
la pensión que de derecho les corresponde?
Resistir, muchachos. De eso se trata.
Haga que hable su círculo de influencia. Nos.
otros nos valdremos del testimonio de uste que en Patria siga viviendo Masferrer.
des para hacer más factible la gestión que que Patria siga siendo Masferrer. Que en breve entablaremos.
siga vibrando en nosotros el temblor esParo aqui. Le inando el único retrato clatelar de su esperanza, que en nosotros ro que nos queda. Desde que usted me encargo el retrato yo viví pidiéndole que se siga ardiendo la viva llama de su fe, dejara retratar. No quiso. No se dejó. La que fluya siempre en nuestras venas la copia que le mando es un tanto confusa por roja sangre de su universal amor.
que es la ampliación del retrato del pasa. Que Masferrer se ha ido, decís. porte. Pero le aseguro que es el retrato que No.
más se le parece.
José Mejía Vidos, el pintor que usted ya Pese a las apariencias, pese a sus eneconoce, tomó dos apuntes al carbón del ros migos, pese a sus amigos; pese a nostro de Masferrer. Pronto creo poder mandar otros mismos, y a Masferrer mismo, y le las fotos o las planchas. Lo mismo que a la muerte misma, Masferrer no se ha la mascarilla de Valentín Estrada.
ido.
Con reposo y con mucho cariño le estoy de Masferrer: sus ¡No se ha ido!
preparando un ideario Mentira, muchachos.
frases Intimas, sus juicios, consejos, el buen Masferrer, somos nosctros.
humor y las anécdotas diclas a sus amigos más queridos. Pasa a la página 303. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica