REPERTORIO AMERICANO 377 El concepto de Universidad en el Dr. don José María Castro Discurso leído en el acto del jubileo del Colegio de Abogados de Costa Rica en la noche del 16 de Dic, de 1931 Señores: de su nacimiento. Hay que ver la. Envio del autor He aceptado con una satisfacsencillez con que hablan nuestros ción muy sincera, desarrollar, en repúblicos; su simplicidad en el lenguaje, la limitación de sus ideesta celebración, el siguiente motias, la vacilación de sus impulsos, vo: concepto de Universidad en el y el desorden de las primeras ho. doctor don José María Castro. El ras. La presencia de don Braulio tema parece un poco abstracto; pe. Carrillo en el Gobierno, se expliro yo he hecho el esfuerzo de darle ca sin que por eso deba constituir un sentido de realidad. Mi interés un ejemplo. Tiene que haber haha sido procurar hacer una breve bido, en aquella época, hombres codemostración de cómo pensaba el mo él que sintieran la necesidad de doctor Castro y qué fue lo que quicrear el orden como necesaria conso hacer cuando, como primicia de dición de la vida nacional. Él lo su juventud ciudadana, hizo a su quiso crear con la dictadura vitaPatria el homenaje que resulta de licia. No es un absurdo histórico.
haber fundado la Universidad de Las sociedades pueden encontrarSanto Tomás.
se en estas exigentes situaciones.
Con ocasión del hecho que nos Carrillo le hizo un buen servicio reune hoy aquí, celebrar los cina su país: estableció el orden, que cuenta años de existencia del Coes la vida. En lo que se equivocó legio de Abogados, me ha parecido Carrillo fué en la justa apreciación natural que se quiera recordar la del alma costarricense. Esta alma memoria del doctor Castro. Por la hecha providencialmente para la grandeza de su espíritu y por la Paz, es decir, para el Gobierno Cifinalidad y constancia de su obra vil. esto último fue lo que si comeducativa, él es digamóslo sin prendió, admirablemente el doctor egoísmo la más alta figura del foCastro, con un sentido superior de ro nacional. Al rendirle un tributo visionario y de fuerte constructor de simpatia, queremos simbolizar de pueblos.
en él varios intereses: el del proÉl comprendió que el alma de fesional, el del estadista, el del golos costarricenses posee una especie bernante, el hombre, de doctrinas de levadura evangélica. Es una buedefinidas, a fin de que su personana alma o una grande alma. No halidad constituya, hoy y siempre, había que atormentarla para que un valor ejemplar para el que proDr. José Maria Castro ya en la Esc. de Derecho. millarla en el patíbulo para crear Según el cuadro que se lu diera sus frutos; no había que hufesa su misma ciencia, y que como ciudadano quiere actuar conforme a sus enpequeñecido el hombre. El doctor Castro en ella el sentido de la disciplina social; eminentes normas.
llena, con su actividad, el período más tras no había que deprimirla con los fueros indePor otra parte, el Colegio de Abogados cendental de la historia costarricense. Eli seables del despotismo, para enseñarla tiene una alta misión educadora que reali jamos como fecha de partida el año de 1843, a gobernarse racionalmente. Lo que había zar en el país. Lo hace por medio de la Es en que se promulgó la ley de elección de la que hacer entonces era iluminarla; lo que cuela de Derecho, la cual ha continuado re Universidad de Santo Tomás, hasta el año había que hacer, era interesarla en genepresentando la antigua tradición universi de 1892 en que termina su actuación de rosas empresas; lo que había que cultivar taria, y como uno de los urgentes problemas hombre con el ejemplo de un gran final en en ella eran sentimientos humanitarios. Tode la vida es el de definir un nuevo con la vida. En este largo período de casi 50 do lo realizó el doctor José María Castro, cepto de cultura, he considerado importante años, él mantuvo un don que es el privile y como estas siguen siendo nuestras mismas sorprender en la mentalidad del doctor Cas gio de muy pocos, el de una palpitante ju preocupaciones, de, ello resulta la resotro lo que el comprendió como esencia y ventud de espíritu. Siempre jóven, dijo de nancia permanente en la conciencia costafinalidad de la institución universitaria.
él Pío Víquez. rricense del nombre de este ciudadano. PaComo no se trata de una simple doctrina Esos cincuenta años contituyen una épora iluminar el espíritu nacional fué que él sino de un interés vital, que nos importa a ca complicada. contradictoria, de prueba creó la Universidad de Santo Tomás. Yo todos, porque todos somos objeto de cultura, constante y, en una palabra, de organiza fuiero decir, en nombre del principio de no puede dejar de relacionarse lo que en el ción. Al principio, casi nada existe. No se cultura humana, que el acontecimiento más doctor Castro se considere como filosofía está muy lejos de la proclamación de la In grande de la historia costarricense, es la educativa, y su norma de actuación en la dependencia, y a nosotros la Independencia fundación de la Universidad. La Indepenvida. Tiene que haber un vínculo estrecho nos cogió de sorpresa. No teníamos doctri dencia, que constituye una virtuosa deterentre sus ideas y sus actos, para justificar nas, no teníamos una mediana cultura ad minación, nos la dieron los hechos imperael valor efectivo de sus ideas y para ad quirida, no teníamos experiencia de la vida tivos de una trascendental hora histórica mitir, como excelente, el servicio que él política, no teníamos un grupo de hombres del continente. Hasta nosotros, llegó la somle hizo a la conciencia pública de su país. ilustres, no teníamos industrias y ni siquie bra fecundante de Bolívar y no podíamos La vida del doctor Castro está llena de ra teníamos un pueblo. Lo que era nuestro menos de ser libres. Pero la erección de la episodios interesantes, todos ellos, revesti pueblo en aquel entonces, no pasaba de ser Universidad, como célula materna de la dos de cierta grandeza patricia. Se le acusa una modesta familia del buen tiempo colo cultura pública nacional, nace de un acto de de haber cometido evidentes contradiccio nial, como si dijéramos. Los que conocen voluntad supremo del espíritu. No es, pues, nes, pero examinadas estas con un criterio nuestra historia saben en qué grado de in un simple hecho circunstancial. En verdad, de pura investigación histórica, no resulta fantilidad vivió nuestra patria en los días es una apreciación de la eternidad de la Pa Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica