Repertorio Elmericano SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA San José, Costa Rica. 1931. Sábado de Mayo Tomo XXII Núm. 16 Año XII. No. 536 SUMARIO Janta de médicos.
El terremoto de dianagua y los marinos.
Con Gabriela Mistral en Nueva York.
Bibllografla titular.
La toga ante la dictadura.
Carta.
Canales interoceánicos: Panamá, Nicaragua.
Qué ciego es el hombre para lo futuro. Dios y el César.
Un obispo ejemplar.
domero Santa Persiles Armando Zegri Corresponsal Hala de la Torre Guillerino Diaz Plaju Juan del Camino Luis de Zulueta Luis de Zulueta Este autor. Canciones.
Charlot quiere recordar su infancia.
El hombre y la máscara.
Las nuevas colonias.
Referencias.
Trébol teológico Justicia.
Los hombres de negocios en la politica El voto mexionno F. Amighetti León de Greift Irene de Falcon Alberto Gerchunorr German Arciniegas Guillermo Jimenes Blanco Milanés Amanda Labarca II.
José Ortega y Gasset Alfonso Reyes RANT Había enfermo en la casa. Se hizo junlos fueros de la verdad, ni los afectos ta de médicos para la grave consulta, y Junta de médicos familiares.
fué nombrado presidente, en acuerdo uná De La Nacion. Buenos Aires Pero, entonces preguntó ansiosanime, el bondadoso y sencillo Emmanuel mente Herbert Spencer. įvamos a comKant, el mismo filósofo a quien Giosué prometer nuestro crédito con un diagnósCarducci hizo aparecer como deicida en tico falso?
aquella tremenda estrofa del Versaglia El autor de la filosofía sintéticaen los Giambi ed podi.
insinuó Carlyle en voz baja. es un asno il giorno venne: in un desio inmensurable.
Di veritade, con opposta fe. Carlyle murmura observó Spencer Decapitaro, Enmanuel Kant, Iddio, sin alterarse No sé lo que ha dicho, Massimiliano Robespierre, il re.
pero afirmo que carece de importancia.
No es el único de los graves cargos que Le falta en absoluto el espíritu de contise le hicieron al filósofo dulce y candoroso nuidad. Vuelvo a preguntar. se insiste de Koenisberg. Otros le achacan también, en que redactemos un dia góstico falso?
atemorizados por la idea de que estuviese ¿Existe o no existe la verdad?
en lo justo, la destrucción del mundo real. La verdad dijo sonriente Jules de Las explicaciones del enfermo adolecian Gaultier, cuerpo fino, delgado, ojos de de confusas, y de ellas no podía deducirse pensador en un rostro de nobles facciones, cuál era su mal, aunque la existencia de en que predominaba una nariz perfectaéste parecía evidente. Aplicaron los rayos es un ídolo metafísico ante el cual se prosX al torax, al abdomen, a los lomos, sin ternan ustedes los ingleses, sin creer en resultado alguno. La radiografia de todos él, para edificación de los demás. La verlos órganos indicaba una correcta y dad es para ustedes una religión comprendesesperante normalidad. Movidos ya más dida en el número de las que fijó Gibbon que por el deseo de salvar al paciente, por con aquellas palabras inolvidables: Para una malsana curiosidad científica, resolel pueblo todas son rdaderas; para los govieron hacer una inspección directa, interbiernos todas son útiles; para el sabid toviniendo quirúrgicamente. Le hicieron das son falsas. Nosotros añadió estala autopsia, vivo. Después de haberle puesto mos aquí como hombres de ciencia. Las.
al descubierto las vísceras más importantes del las gentes en la medicina, desacreditaria perso mociones de ciencia y de verdad se excluyen, La cuerpo, llegaron a la misma conclusión: el enfer nalmente a los médicos que han tomado parte en ciencia no se propone jamás la verdad por obmo está perfectamente sano, pero se muere a la consulta, les daría fundamento a los escépticos jeto. La ciencia no hace más que trenzar cadenas ojos vistas. Cerraron, cosieron, deseterizaron para acrecentar sus dudas y las ajenas sobre la de fenómenos, ligados entre sí por la relación al paciente. Continuaba el grave peligro de muer eficacia de la cirugía moderna, de la radiografía de causa a efecto. En el caso presente. cuál te. Habían olvidado examinar el cerebro, y. y de toda la mecánica investigadora. En cierto es el diagnóstico representativo de la verdad?
antes de formular el diagnóstico, tuvieron por modo trastornaría el orden social, desacreditando La ciencia, con todos sus recursos, se ha negado a necesario poner el cerebro bajo los rayos de Ro a los hombres que representan la culminación del revelarnos el mal de que sufre este hombre. Cuál entgen, para ver si acaso residía en los sesos la trabajo científico.
es nuestro pronóstico. Qué este hombre se muecausa de esta desesperada situación. La radio Pero, en rigor agregó un joven llamado re. Bella afirmación! De morir tenemos; algrafia cerebral, tomada, con el mayor esmero, Schopenhauer, no hay lesión ninguna; el hom gunos de nosotros, probablemente, daremos el tampoco señalaba anormalidad anatómica o fun bre está muy enfermo; habría muerto ya si no ejemplo; sin embargo, aquí donde no hay verdad, cional alguna. Continuando el estado de postra le sostuviese la voluntad de vivir. Creo que hay ciencia. Forjamos experimentalmente el ción, lo indicado parecía formular en la duda una debemos hablar claramente para la tranquilidad eslabón de una cadena, al cual se agregarán más prescripción destinada a avivar las funciones en de nuestras mentes y en provecho de los deudos; por gentes desprevenidas como algunos de nosgeneral y tranquilizar un tanto a los deudos, a después de todo, la vida es un mal sin dejar de otros, y es posible que algún día la ciencia expliquienes la situación del enfermo tenía sumidos ser una ilusión.
que nuestra confusión en presencia de este fenóhacia ya mucho tiempo en profunda turbación Me opongo dijo Kant resueltamente a Es lo más que podemos pedirle.
y amargura.
esa declaración. Siendo joven me aventuré a forCon un ceño entre reconvención, sorpresa y En consejo, uno de los médicos dijo: mular diagnósticos de ese género, fundado en la aplauso, volvió a hablar Emmanuel Kant. No tiene nada y se muere.
inexorable virtud del análisis. Los resultados En efecto reiteró uno de los experimentados mismos me enseñaron desde luego la temeridad Si la junta me permite insinuó. formulacirujanos. no tiene nada. El análisis no ha los peligros de ese inhumano proposito. Si yo ré un diagnóstico en que la ciencia de la vida prácpodido ser ni más riguraso ni más extenso. No consintiera en que aquí se expusiese la verdad, tica se sobreponga, como es natural, al puro cohay nada en el organismo por donde se pueda tal como la hemos descubierto en esta minuciosa nocimiento. Diré que en nuestro concepto hay deducir con fundamento la causa del mal y de investigación, procedería como si mis conocimien. un estado general poco satisfactorio que hace signar el mal mismo.
tos y mi experiència de la vida no hubiesen ido imperativa una medicación expectante. Entonces propuso un tercero, estenda más allá de la irreverencia juvenil. Pero mis En este momento un joven escritor y catedrámos la minuta del resultado y digámosle a la años y una larga práctica me hicieron tropezar tico, de movimientos rápidos que se sucedían denfamilia que el enfermo no tiene nada.
con el sentimiento del deber, y en obediencia a tro de un ritmo cautivador, se incorporó para Tal procedimiento interpuso Kant trae esta norma es preciso decir a los deudos algo hablar. Era de tipo eslavo, hablaba alemán caría fatales consecuencias; eso destruiría la fe de que no lastime ni los derechos de la ciencia, ni dencioso y ricamente matizado. Llevaba alta meno. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica