REPERTORIO AMERICANO 213 Qué humor puede haber más raro que el que, falto de consejo, él mismo empaña el espejo, y siente que no esté claro?
Con el favor y el desdén tenéis condición igual, quejándoos si os tratan mal, burlándoos si os quieren bien.
Opinión ninguna gana, pues, la que más se recala, si no os admite, es ingrata, y si os admite, es liviana.
Siempre tan necios andáis, que, con designal nivel, a una culpáis por cruel y otra por fácil cul páis.
Pues cómo ha de estar templada la que vuestro amor pretende, si la que es ingrata ofende y la que es fácil enfada?
31 as entre el enfado y pena que vuestro gusto refiere, bien haya la que no os quiere y quejáos norabuena.
Dan zuestras amantes penas a sus libertades alas, Ju después de hacerlas malas las queréis hallar muy buenas. Cuál mayor culpa ha tenido en una pasión errada: la que cae de rogaila o el que ruega de caído? cuál es más de culpar, aunque cualquicra mal haga: la que peca por la paga o el que paga por pecar?
Pues. para qué os espantais de la culpa que tenéis?
Queredlas cual las hacéis, o hacedlas cual las buscáis.
Dejad de solicitar, y después, con más razón, acusaréis la afición de la que os fuere a rogar.
Bien con muchas armas fundo que lidia vuestra arrogancia, pues, en promesa e instancia, juntáis diablo, carne ju mundo.
Juan Chunguero y no hay razón para nada de haber razón para tanto. Envio del autor El rancho de un solo cuarto y un camasTodos son iguales jueces, tro. Alli vive el hogar de Juan Chunguero.
y siendo iguales y varios, El mismo pueblo no recuerda cuál es la no hay quien pueda decidir cuál es el más acertado.
mujer de Chunguero, solamente se sabe que son hermanas.
Pues si no hay quien lo sentencie, La familia se reproduce, menudean los por qué pensáis vos, errado, niños, en la más perfecta armonía.
que os cometió Dios a vos Un vecino le hizo a una de ellas una pro la decisión de los casos!
posición, ella se lo dijo a Juan, éste buscó al perturbador de su familia y al oír del ¿O por qué, contra vos mismo severamente inhumano, otro. Vos para que querés dos. Chunguero le rajó la panza, en la Callecilla.
entre lo amargo y lo dulce Trabajan solamente los tres juntos; son queréis elegir lo amargo?
una familia de los más avenida. Ellas a la Si es mío mi entendimiento, par de él, las ganancias se las reparten con ¿por qué siempre he de encontrarlo la mayor armonía.
lan torpe para el alivio, El pueblo, desde luego, no pudiendo so tan agudo para el daño?
portar más aquella iniquidad, aquel mal El discurso es un acero ejemplo para los vecinos, delató el triunvirato a la policía. Detuvieron a Chungue que sirve para ambos cabos: ro. Las dos mujeres se fueron a donde el de dar muerte por la punta; Político.
por el pomo, de resguardo. una voz le gritaban ambas: Canalla, Si vos, sabiendo el peligro, miserable, detener a Chunguero, al hombre queréis por la punta usarlo, más bueno y honrado de la tierra. que culpa tiene el acero Las dos hermanas sacaron de la cárcel del mal uso de la mano?
a su Juan Chunguero, y se continuó el más perfecto de los hogares que había perturNo es saber, saber hacer bado la maledicencia de los vecinos.
discursos sutiles, vanos; que el saber consiste sólo Max. Jiménez en elegir lo más sano.
Coronado, octubre de 19:11.
Especular las desdichas y examinar los presagios, Todo el mundo es de opiniones, sólo sirve de que el mal de pareceres tan varios, cresca con anticiparlo.
que lo que el uno que es negro. En los trabajos futuros el otro prueba que es blanco.
la atención sutilisando, uno sirve de atractivo más formidable que el riesgo lo que otro concibe enfado; suele fingir el amago.
y lo que éste por alivio. Qué felis es tá ignorancia aquél tiene por trabajo.
del que, indoctamentee sabio, EL que está triste censura halla de lo que padece, al alegre de liviano, en lo que ignora, sagrado!
y el que está alegré, se burla de ver al triste penando.
No siempre suben seguros vuelos del ingenio osados, Los dos filósofos griegos que buscan trono en el fuego bien esta verdad probaron; y hallan sepulcro en el llanto.
pues lo que en el uno risa, También es ricio el saber, causaba en el otro llanto.
que, si no se va atajando, Célebre su oposición cuando menos se conoce ha sido por siglos tantos, es más nocivo el estrago.
sin cuál acertó esté si el uelo no le abaton hasta agora averiguado. en sutilezas cebado, antes, en sus dos banderas por cuidar de lo curioso cl mundo todo alistado, olvida lo necesario.
conforme el humor le dicta, Si culta mano no impide sigue cada cual su bando.
crecer al árbol copado, Uno dice que de risa quitan la substancia al fruto sólo es digno el mundo rario; la locura de los ramos.
ju otros, que sus infortunios Si andar a nave ligera son sólo para llorados.
no estorba lastre pesado, Para odo se halla prueba sirve el vuelo de que sea ju razón en que fundarlo; el precipicio más alto.
que Romance Finjamos que soy felis, triste pensamiento, un rato: quizá podréis persuudirme, aunque yo sé lo contrario.
Que, pues sólo en la aprensión licen que estriban los daños, si os imagináis dichoso, no seréis tan desdichado.
Sirome el entendimiento alguna des de descanso, y no siempre esté el ingenio con el provecho encontrado. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica