REPERTORIO AMERICANO 365 preEstampas aquella vida infecunda, leyenda de sus capacidades como hombre de estado, como La idolatría del hombre público economista, como filántropo, como político. Colaboración directa sería hombre de consultas, estaría siempre El andariego Gulliver vuelve a Inglate resolvió el caşo. Esta clase de consultas era disponible para imponer la solución a los rra y se encuentra con que a la perfecta or muy corriente por aquella época.
problemas de los ricos en sus relaciones ganización del Imperio de Liliput la aventa Bien, el hombre público que recibía los con el Estado. La plutocracia de Inglaterra, ja, en ciertos aspectos, su suelo nativo. Los más grandes honores en presencia de mique es igual a la de China y a la de Costa liliputienses desconocen algunos cultos. llares de almas complacidas, había burlado Rica, se cuidó de que no disminuyeran las No han hecho, por ejemplo, del hombre pú en Inglaterra, en la Inglaterra del Dean aureolas que la superstición iba colocando blico un ídolo. En cambio, Inglaterra sí tiene Swift, la legislación que imponia tributos en torno a la vida del hombre público que la idolatría del hombre público arraigada a los haberes de toda sucesión. Es posible Gulliver veía en una mañana gris de Loncon fanatismo. Extraño le parece a Gulliver que hasta ese instante fuera desconocida dres, cubierto de homenajes imponentes.
el suceso. No creía a Liliput falto de un la conducta del idolo. Sin embargo, nadie Esta gran fuerza fue en verdad la que más culto que es el sustento de los gobiernos y desconocía la vida pública del hombre que favoreció la idolatría del hombre público, de las clases dominantes. Sigue con su tanto lloraba. Gulliver, que llegaba de tiePero hubo también otras importantísimas atención mordaz las ceremonias. Tanto vió rras distantes. pudo enterarse de ella y no cuyo recuerdo es regocijante. Los abogaen el Imperio del cual regresa que le es fá halló explicación al homenaje. Se creerá dos eminentes que el hombre público había tenido a su servicio y con honorarios siencil establecer contrastes. Ha perdido Ingla que por ser Inglaterra, no es fácil que naterra uno de sus hombres públicos de más die logre imponerse y pasar por un ciudapre crecidos, se valían para hacer sus negocios renombre. No quiso Swift que su héroe dano eminente. Digamos primero a nuesy para manejar la política de Inglatepronunciara el nombre del connotado ciuda tros lectores que como el hombre público rra, del rico hecho hombre público. Cómo dano inglés. Sólo le dejó decir que había era de la plutocracia del Reino, en ella tuvo lo ponían en esta o en aquella posición y lanzaban a su alrededor elogios que aumenlo en su vida mucho deslumbramiento. Supo la más poderosa de las fuerzas que situarse allí en donde nunca se realiza na sentaran lleno de inteligencia y de saber.
taran la superstición común! El rico dejada en favor del bien público. por esta haA los ricos convenía crear la idolatría por ba hacer. Crecía asi su prestigio de hombre bilidad creció en prestigios y al morir se le el hombre público salido de su engranaje. público. De manera que al morir, los abollora y se habla de la pérdida irreparable Mientras se hiciera leyenda alrededor de gados contaban la parte que ellos habían en que queda sumido el Reino. Gulliver lee puesto en la creación del idolo. Sentían que todavía había que ayudar y soplaban sobre los periódicos y se entera de la inmensa la pompa del más grande de los homenajes.
fortuna que deja el hombre público. En LiLa credulidad tenía que ser deslumbradora liput, cuando muere un rico, las escuelas, y se decretaba toda suerte de honores, los los hospitales, los asilos, las bibliotecas honores máximos reservados en un país pasienten en seguida los beneficios. Toda forra sus forjadores, para los creadores de patuna que se reparte contribuye con buena trias. Gulliver veía todo aquello sobrecoporción al sostenimiento de la beneficengido.
cia y de la cultura. Quién sabe si aquel pueblo hiciera bien en dar leyes cercenaPensaba en Liliput y aturdido por los doras del patrimonio privado. Pero las dió discursos de los oradores oficiales, por según Gulliver y no puede el rico evadirla banda, por la pólvora, por la sumisión las. Muchos contrataron a los mejores abocuriosa, de la muchedumbre, encontraba gados del Imperio y los enceraron años enque con todo y ser tan diminuto el Imteros a que buscaran los medios para que perio de donde venía, había allí un bien inestimable. Era el bien de no existir la idosus riquezas no fueran gravadas con tributo alguno. Los jurisconsultos no hicielatría del hombre público. Liliput le dió un ron otra tarea que la de trabajar para que gran espíritu de contraste y lo aplicaba en los ricos de Liliput burlaran las leyes. Los la ocasión solemne del ceremonial dedicado ricos les daban honorarios crecidos y así al hombre público. Inmensa es la superstipodían pensar y cavilar. Pero en cuanto daban ción que todas las fuerzas mezquinas de con el procedimiento, el Estado se oponía un pueblo concentran en torno al hombre enérgicamente y la legislación seguía rique quieren levantar como pilar del Estado.
giendo sin menoscabo. Gulliver veía ahora De la vida sin preocupaciones ningunas por de la Inglaterra que desfilaba de nuevo por una patria, hacen al ídolo tonto. Es precisu reflexión, como se rendía culto al homsamente la figura más a propósito para prebre público que dejaba una inmensa fortusentar a los pueblos adormilados, sin culna libre de la contribución en favor de la.
tura. No hay relieve ninguno en el rico que beneficencia y de la cultura. También en vió Gulliver, como no lo hay tampoco en el su país debían los ricos de la Inglaterra de rico que siguen viendo todos los pueblos, o 1702 pagar ciertos impuestos al Estado.
LA SASTRERIA en el abogado, o el comerciante, o en el inMas, los abogados ingleses aventajaron en dustrial, o en el banquero elevados a la gran astucia e ingenio a los de Liliput y consicategoría de hombres públicos. Ciertos inguieron que el hombre público hiciera antereses de clase han adivinado que esas sutes de morir ciertas combinaciones que burFco. GOMEZ persticiones son favorables, que fácilmente laran la ley. Cómo lo supo Swift? Él dice crecen y deslumbran. Entonces las fomenque un abogado despechado se lo contó. Avisa a su clientela que se trasladó tan, soplan aire y humo dentro de ellas y al local frente al Siglo Nuevo, este abogado le encargó el hombre públicontiguo a la Iglesia del Carmen.
de pronto aparece el hombre público conco el manejo de aquel negocio. Pero en el vertido en ídolo. Qué hay en verdad en la Gran surtido de los mejores casimires ingleses.
momento de arreglar honorarios, hubo sus vida de esos ídolos? muchos la superstireparos y el despechado quedó eliminado.
Teléfono 3238.
ción los hace ver capacidades y prestigios.
Vino entonces otra notabilidad del foro y Pero los que quieran ver la realidad con el LA COLOMBIANA categoria de hormone publica. Cierto in Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica