242 REPERTORIO AMERICANO Hay que esperar el curso de las in sí, puedo decirtelo y demostrartelo todos hechos. mí me han quitado la frescura vestigaciones nó hay que los días, porque ando por arriba y por aba de antes. Aquella actitud permanente de entorpecer la acción de la justicia. jo de las cosas libres y verdaderas. Estos mi alma que fue casi mi orgullo: sentir. Están acusados por los delitos de rebe piės míos con sus pobrecitos zapatos viejos sin pensar. sentir. sentir. lión, motín, sedición y. ultrajes al Primer y prestados, compañeros amargos de mis Magistrado de la República. Delitos de vestidos rotos, de mis uñas sucias, de mi Voy y vengo con la voz caída sobre el pecho, con todos mis sentimientos nerviosos lesa gravedad. pelo con humo y de esta cara tan rara de y torcidos la soledad que me aniquila. por yo medio llorando, medio insultándu loca que se me ha hecho en 30 días.
Siento y pienso cosas tan feas que nunca los, he pedido tu libertad con argumentos sé que es sólo cariño lo que me hace tuvo, ni sospechó mi espiritu, y hasta físi.
legales, con argumentos revolucionarios, salir todos los días corriendo de mi casa camente estoy un poco torcida y angulosa.
con toda la razón y la desesperación de mi para llegar a la hora justa de la visita a Es la fealdad maldita de la miseria y el tragedia.
los presos. cuántas veces al tomar esos odio. La fealdad de los pobres y de los (28 de mayo. Ayer he ido de arriba camioncitos de Penitenciaria Niño Perdolorosos. Recuerdo la tarde de hoy con a abajo con esas cartas que me has dado para dido que se parecen tánto a esos perritos el placer envenenado por la tristeza de la pedirles dinero a tus antiguos amigos, pero flacos y pulguientos, pero que llevan por celda. Ese sobresalto espantoso del tiempo diez centavos la carga maravillosa de mi cotodos ellos ocupan altos puestos de Gobierlimitado. Esas dos horas dramáticas en no y ha sido para mí muy difícil verlos y razón para tu corazón. y ya en ellos he medio de una celda tatuada con palabrotás buscado angustiosamente los diez centavos explicarles, que tu sólo quieres de ellos una de criminales, de protestas rebeldes y hasta reservados para el pasaje y viéndolos lie pequeña ayuda económica en cambio de un el grito de viva cristo rey y la santísima trabajo tuyo, de un grabado en madera o pensado: si me los comprara de pan y tuvirgen de guadalupe Recuerdos de viera fuerzas para irme a pie un cuadro que tu pintarás desde la cárcel, las persecuciones a los católicos de Méxi¡Camioncitos de Penitenciaría Niño Perporque el niño y yo nos estamos muriendo co. Dibujos pornográficos, injurias; y dido. camioncitos desvencijados y miserade hambre.
quién sabe cuántas cosas más, dolorosas y Todos estarían dispuestos a ayudarte y bles. compañeros míos. que me llevan y tremendas, de los que por allí pasaron imme traen cuatro veces al día, y al dejarme. potentes, o capaces, resignados o valientes.
mucho. dicen, pero siempre que tú aban en el último viaje de regreso me han visto. nosotros enmedio de todo eso, con nuesdonaras esas ideas.
siempre agobiada, deshecha, temblándome Estoy muy cansada y mortificada de tros corazones que no sabemos dónde dejar.
las lágrimas sobre la cara. Viaje a veces, tener que entrar tantas veces en esas ofiY de repente el grito del celador que arrancon mucho calor y tierra sucia, y otras, con cinas con esta facha mía que despierta la ca el último beso patético de la tarde, curiosidad de los porteros y el desprecio tanto frio, como un pollito sin madre. dar de las mecanografas, esas señoritas horri y pensar que tengo que agrandarme y 15 de junio. Hijito mío, yo no le huyo calor a mis dos pollitos adorados, a mis blemente pintadas como las prostitutas.
a esta batalla tremenda. No me creas codos bebecitos barde, pero la desesperación y la tristeza Junio En tu carta me dices que me de junio. Esta noche solita extraño incesantes afean y desmoralizan el espíritu.
quieres más que nunca, y que me lo demos tano tu cabeza adorada, tu calor de hombre La flaqueza me viene de adentro y de afuetrarás cuando salgas. Perdóname que de fuerte, tus conversaciones tan vivas, que ra. Tengo dias imposibles de llevar adepronto lo dude cuando pienso en tu alma todo tú, eres un recuerdo quemante para lante y marcho como un muñeco de ventriarremolinada y nerviosa. Para creértelo mi soledad cargada de lágrimas. Tengo locuo, tieso y frío. Mi querido y admirablë de verdad necesitaria que tuvieras como yo un odio concreto y feroz contra la burgue camarada. ando. ando. ando los piés corriendo sobre la tierra libre. Yo sia que nos tiene desmembrados y des. camino sobre mi sien, sobre mi corazón, sobre mi vida. y me quedo parada de pronto. me detiene una conversación: Figuras de Landivar en el agua vanal, cuando yo quisiera estar llorando de rodillas En el homenaje que ante la cascada La Teardracua se tributo a su poeta en el segundo centenario Para Jesús Romero Flores Aquí Landivar. construyó un alcázar de hervoroso cristal para las nåvades del bosque virgiliano donde un dia vio a Pan sonar la melodica flauta del agua que, al ceñirse en los vergeles, canta como en la nave canta el órgano el canto llano con que saludaron a Dios, alla en las playas del Tirreno, ante el mar espejeante del espíritu, Ambrosio y Agustin. Aquí Landicar vió en el rostro del aire la sonrisa divifana del poema y con el paso de la clásiea danza las Nueve Musas que, en la niebla antigua, hacen surgir sus torsos y los verguen en el célebre exámetro. Aún resuenan sus risas y aún se escuchan sus palabras efimeras eternas como todo lo que se escribe sobre el agua. Un dia el poeta tembló de sumo gozo al ver que sus palabras tatuaban la epidermis del lirio del paisaje el que el orto ardiendo por la idea pura.
Canta en el alba San Francisco canta Platón, mientras se incendian los zafiros del crepúsculo, es un relicario el medio dia abierto en la Tzaráracua.
Se oye una clara música de estrellas.
La pupila del iris curiosea esmaltando dc lágrimas la espuma.
Canta el Poeta eniel bosque hay ecos de la pagana voz. se ha dormido el cefiro en los árboles que sangran y los restaura el bálsamo del tiempo. Ya Landivar no tiene más palabras porque es la voz de la Naturaleza convertida en pasión y en melodia.
La tarde con la aurora cn el poema celebran sus fastuosos clesposorios. Gloria al paisaje en que el Poeta puso un velo a sus imagenes fugaces, en la espuma, en el aire y en el agua. La sombra de Landivar se ha quedado en el cristal efimero y eterno!
udo ver 20 de junio. Mi querido prisionero, busco ademanes, cosas y palabras. todo lo que poseo para que entren hasta tu enor: me vacío, pero todo lo que vive rehuye instintivamente el ambiente de soledad trágica en que vives. Las flores que te llevo se mueren antes de llegar a tu celda. La blusa roja con la que quise animarte un día no parece roja, ni negra ni nada. Es un color triste y patético que se ha perdido de la rueda de los colores divinos del mundo para quedarse sin suspirar en una casa de muertos: Tus manos han olvidado movimiento maravilloso de la libertad y se caen siempre juntas en la misma actitud de pájaros doloridos, abrigándose entre tus piernas. Tu voz es la más esclava de todas, no es viril ni agresiva, ni clamorosa, ni triste; es esa voz censurada; baja y dramática de todos los encarcelados.
Vendrá tu libertad, pasará el tiempo y aún no podre recuperarte, mi pobrecito prisionero.
Rafael Heliodor Valle: setiembre, 1931. Envio del autor. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica