. 86 REPERTORIO AMERICANO. Programa. Asignatura! Son después de pues no quiero pasar por malicioso. pero hay en la actualidad tantos fabricantes pluscuamperfecto. las palabras más feas cuántos partidos van a hundirse en ju todos son (en comparación con lo que que hay en castellano. bien decía Carlos las próximas Cortes. Alguno hay que teme ocurría en el siglo diecinueve) tan progreMarx que el que traza programas para el llegar a constituir mayoría en ellas; le te sivamente productivos, que, en realidad, no porvenir es un reaccionario. como no se me a la responsabilidad del Poder no com hay fundamento parti suponer que, aunque puede trazar para el pasado.
Ya que en partido con otro partido; le teme acaso a sobreviniese un milenio de circulación de este caso serían metagramas; y páseseme su propio programa. Que es lo que sucede oro y de corisumidores chinos, la desocupael voquible.
cuando éste, el programa, es un indice de ción tecnológica fuese por completa reab¡Cuántos partidos van a surgir de las soluciones en vez de ser una metodología. sorbida por la industria. Vencedores de la Constituyentes? El Diablo lo sabe. sólo ahora, lector desconocido tan heroico futuralesa, somos vencidos por el arte. Dios, los hombres, las personas, que van y respetable, pues que me aguantas, como Estamos vencidos no sólo en las fábricas a surgir o resurgir, que van a nacer o a re el elector desconocido, como mi elector dessino también en los campos; vencidos por nacer resucitar en ellas. entre tanto conocido, voy a formarme candidato en nuestro maravilloso arte agrícola. Gracias ya hay quienes están pensando en la per una campaña electorera más bien que elecsona a la que van a enterrar o a enjaular toral. De la que espero salir ganándome; nicos y a los entomólogos, la agricultura se a los ingenieros, a los químicos, a los botaen la Presidencia de la República española. ganándome a mí mismo, que no es igual ha vuelto, por primera ves en la historia, Yo, para eņtre mí, y por seguir moda, ten que ganar un acta de diputado constituyen racionalmente eficaz: hoy crecen dos brisgo dos candidatos: uno, si se tratase de te. si me pierdo, no si pierdo la elección, nas de trigo donde antes crecía una sola.
entierro, y otro, si se tratase de enjaule; sino si me pierdo, ya sé lo que me espera. Rsultado: todos los agricultores de Europa, pero. claro está. me los reservo y callo, Dios me libre, dustralia, América del Norte y del Sur Miguel de Unamuno están más o menos completamente arruinados. Hay que quemar el trigo o tirarlo al mar, o darlo a los cerdos y a las gallinas.
Pigmalión contra Galatea. La prosperidad de la avicultura inglesa se basa en la ruina de Manitoba y de Hun (Viene de la primera pagina)
gría. bien hay que almacenarlo, por ves mayor, el hombre triunfante se ve hoy como si fueran organismos separados, con millones de toneladas, en elevadores giganenfrentado a adversarios nuevos y desco vida independienfe de sus creadores; inde tescos, hacinarlo, con la patética esperanza nocidos, hijos de su inventiva. El momento pendientes y a menudo, como lo estamos de que algún día alguien ofreceri comprarde su primera gran victoria sobre las fuer viendo ahora, en pugna con ellos. Cuál lo a un precio que cubrirá los costos de zas naturales se ha trocado, por marcada es el resultado de semejantes progresos en producción. Nuevamente, en el propio moironia,. en su primera derrota grande, en. eficiencia? llayor producción por menos miento de triunfar sobre la naturaleza, el una campaña nueva contra un enemigo productores. Alás desocupados con menos arte nos resulta un obstáculo.
completamente diferente. El vencedor de dinero para. comprar mercaderías. Una Conocemos la enfermedad y sus causas; la naturaleza ha sido derrotado por el arte, mezcla de sobreproducción y de subconsu el remedio? Evidentemente, el remedio por las propias artes que él mismo creó con mo coactivos. En tiempos pasados se creia tiene que ser homeopático. La sola curación el objeto de vencer a aquélla. La humani que esa Olesocupación tecnológica. debida de tanto arte y de tanto pensamiento no se dad se tambalea hoy ante los golpes que a los progresos en el proceso de la manufac. logrará mediante más materia y más naturecibe en esa desastrosa lucha con las fuer tura, podía en cualquier momento ser elimi raleza (lo cual arruinaría en un instante cas organizadas de su propia inteligencia. nada automáticamente por el fontento de nuestro complicado mundo moderno. sino Cada una de las inquietudes principales nuc a demanda del artículo más barato, mediante más arte y más pensamiento. Verque nos perturban en este momento suma pues los mismos progresos que expulsan a dad que el arte es ahora el enemigo; pero mente incómodo de la historia, proviene los hombres del trabajo rebajan el costo de lo es sólo porque hemos sido artífices; por no de la naturalesa ni de la materia, sino los artículos que fabricaban; el menor costo decirlo así, a pedazos y nunca en totalidad.
del espíritu jo de las artes y ciencias que suscita mayor demanda y la mayor deman El hombre ha usado de su inteligencia para el espíritu ha creado.
dä reinstala a los trabajadores desocupados, crear mil artes separadas, que se ven com¿Por qué hay ejércitos de desocupados por lo menos hasta la próxima revolución pelidas por las propias leyes de su ser a en todos los países industriales del mundo? industrial. Tal era la tevría, teoria que por desarrollarse y a proliferar como seres ciPorque hay sobreproducción. No subcon algún tiempo confirmaron los hechos. Du os, independientemente de sus progesumo, como quisieran hacernos creer el Sr. rante el siglo diecinueve la desocupación nitore Estas artes separadas piden coKeynes y otros economistas. Durante el tecnológica fué eliminada por la demanda ordinación; en beneficio nuestro, hay que tiempo de prosperidad, los norteamericanos progresivamente creciente; pero ocurría que enfrenar y dirigir su desarrollo monstruoconsumieron más por cabeza que cualesquie en ese siglo había pocos productores y po so y desproporcionado; pero el arte de dira otros hombres en la historia de la humablación rápidamente creciente de consumi rigirlo y enfrenarlo está por intentarse: nidad, lo cual no impidió que sobreviniese dores. Había también, después de 1849, existe sólo en estado de germen y rudimento la crisis actuat. Por qué hay sobrepro abundancia de oro, con alsa de precios con apenas formado. Su formación plena haducción? Porque esas artes de nuestra in siguiente y mercado virgen en el Extremo bri de ser resultado de la labor combinada vención, mediante las cuales hemos domi Oriente. hora hay muchos productores de muy diversas clases de hombres: de ponado a la naturalesa, nos están a su ves que emplean maquinaria casi diez veces más líticos en cooperación con industriales y dominando. La celeridad con que progresa. eficas que la que empleaban los escasos cientificos, con financieros y economistas la maquinaria de la producción es mucho productores de la pasada centuria una y trabajadores manuales; del trabajo en major que la que suscita y estimula los ape población consumidora cuya celeridad de cooperación, repito, de muy diferentes clatitos, mediante la propaganda y la venta.
crecimiento ha declinado bruscamente. ses de hombres de toda nacionalidad, si es Resultado: demasiados productos y, en con la ves, el oro escasea y, por ende, los precios posible. Porque el arte de coordinar las secuencia, precio demasiado bajo, pánico y han bajado. el Extremo Oriente se ha artes será sólo muy parcialmente eficaz si restricción de la producción, desocupación y nello, por rasones políticas y monetarias, no lo practican las principales naciones del simultáneamente y sin tregua, perfecciona un cliente muy pobre. El restablecimiento mundo, obrando de concierto. Tiene que miento bien cimentado de las máquinas de la normalidad en China e India y la cir haber una adaptación mundial de lů pro(Una ves creadas, las hijas del genio inven. culación del oro atesorado ayudarían por ducción al consumo, suscripción de contetivo del hombre crecen por su propia cuenta, cierto a los manufactureros de Occidente; nios mundiales para el establecimiento de Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica