REPERTORIO AMERICANO 95 no. Qué hora es. OXXII en beneficio de los previlegiados de Espero y deseo la revolución española tesco, grávido de ideas, de voluntad; y adentro y del inperialismo de afuera. y la saludo en su albor como signo de en seguida, emprende nuevos vuelos, Los acontecimientos recientes, al agitar mayor fraternidad entre nuestros pueblos. nuevos vuelos, hacia el país munca allas doctrinas y los espíritus, acelerarán cauzado ni alcanzable del ideal. En esacaso el triunfo de las fuerzas del portos vuelos, si no se quiere quedarse en venir, en lucha, hoy más que nunca, con El pensamiento de Ugarte se pasea tierra, para ser tragados por la avalanlas fuerzas del pasado.
dominador por el vasto cielo de la es cha imperialista, hay que alistarse en Para formar criterio justo acerca piritualidad americana; aterriza en don la tripulación o, por lo menos, lanzar del movimiento del Brasil, yo no tengo de quiere, aun cuando no haya sitio nuestros impulsos como imponderables suficientes elementos de juicio. Pero. no adecuado para posar su avión gigan fuerzas actuando en su motor.
le parece que de algo muy grave debía haber sido responsable el derrocado réCésar Arroyo gimen, cuando el pueblo pacifista por Marsella, 19030.
excelencia, el pueblo que ni para independizarse de su Metrópoli portuguesa apeló a la violencia, se haya levantado en masa, en una revolución formidable. fulminante, encarnizada. ciega, casi desesperada. El caso del Brasil es el caso de las Lecturas para maestros: Nuevos hedemás repúblicas, porque todos estos chos, nuevas ideas, sugestiones, movimientos simultáneos, casi isocronos, ejemplos, Incitaciones, perspectivas, noticias, revisiones.
derivan de la misma inquietud del porvenir, del mismo imalestar nervioso que levanta las fibras de América. Los políticos pueden utilizar transitoriamente este estado de ebullición, pero acabarán En torno al mozalbete por ser absorbidos por él. Se acerca una De La Vo: Madrid hora en que todas las habilidades serán inútiles y en que el poder tendrá que De pronto, en una prosa oficial u ofi que comenzaban por ignorar que su miir a manos de hombres nuevos que trai ciosa donde se nos da cuenta de cual. sión no era precisamente modelar, sino gan ideas nuevas. No es posible admi quier reciente desman. surgen estas o otra más humilde: conducir, bien condu. tir, ni en sueños, que nuestras luchas parecidas palabras. Unos revoltosos, cir. Como no sentían la humanidad, como ciudadanas se reduzcan a servir alter principalmente mozalbetes. He aquí no respetuban la humanidad reputada nativamente los intereses de dos impe una buena ocasión para esbozar la his. como feudo de entidades invisibles. rialismos en pugna. La América Latina toria pedagógica del mozalbete español. como estaban hundidos hasta los ojos tiene que organizarse al fin bajo su proTracemos algunos de sus principales en un ilusorio concepto de lo torcido y pia inspiración, para favorecer los inte hechos, de lo recto; como todo su afán se conreses autóctonos. Esta será de norte a sur. Pobre mozalbete! Acababa de nacer centraba en hacer del niño fundamenla idea central, la fisonomía de lo que cuando ya se atentó contra su persona talmente un responsable perpetuo de viene.
lidad colocándola al amparo del mito desórdenes en que nunca tomó parte, el: Contemplemos ahora a nuestra Es que aquel día señalaba el almanaque; niño llegaba a mozalbete por caminos paña, tan nuestra como la Argentina o decidieron que fuese no como la sangre erizados de arbitrarias coacciones, perel Perú. Debemos convenir en que todos y el grado de evolución humana lo pro fecto ignorante de su verdadera calidad los valores políticos por llamarlos de ducían, sino como estaba decidido en humana, ajeno a todo auténtico sentido alguna manera. están en crisis; y que unos librotes escritos cuatro mil años de respeto, puesto que nunca fué sujeto la monarquía, lógica y fatalmente ha antes. Ante él nunca se preocuparon de de él, sino su víctima.
terminado su misión, tan nefasta en la fundir estos dos factores educativos: au «Cuando los niños escribe el pedahistoria de la raza nuestra, ya que ella, toridad y respeto. Croyeron que el res gogo Peter Petersen tienen que aprenla monarquía, fué la causa única de la peto era algo sólo exigible al niño, no der por coacción, el educador so hallará disolución de la gran Hispania, que al educador o al padre; nunca pensaron siempre ante las puertas de un corazón nos hubiera dado la hegemonía del mun en que fuese preciso todo lo contrario, y nunca encontrará la entrada, nunca do; y constituye ahora el principal obs en que al hombre elegido para fomentar penetrará en el espíritu del niño, en el táculo para la unión, que tanto anhela el crecimiento del niño le era impres mundo interior de éste. En el mejor mos, de España y América. Creo que cindible estar poseído de un profundo caso, la relación entre el educador y el usted convendrá conmigo en que todas espiritui de reverencia a la nueva posibi. alumno no pasará de ser correcta. La las soluciones políticas, a base de la lidad humana. Se respetaba más a un comunidad humana no se establecerá enmonarquía, son ya imposibles y que arbolito que a un alma infantil. Aquel tre ellos. Véanse en la Revista de Pepronio los hombres libres saludareinos. espiritu estaba desterrado de un mundo dagogia algunos fragmentos de los traalborozados al advenimiento de la Re en que regían toxtos arcaicos dictados bajos presentados en el quinto Congreso pública Española. Ya la alta voz del por el miedo en que se consideraba al Internacional de Educación Moral, y semáximo ideólogo, Don José Ortega y niño no como una actividad espiritual leccionados por el profesor Luzuriaga. Gasset, acaba de apostrofar así al pue libre, aunque endeble y necesitada de ¿Cómo iba a establecerso? El hombre reblo español. Españoles, vuestro Es pedagogo de conductor. sino como una cién llegado quiere y debe cxigirtado no existo iReconstruidlo. Delenda presa más por arrancar de las inexora apunta con razón el mismo Petersen est Monarchia.
bles zarpas de cierto monstruo antedilu que la pedagogía reconozca también la. Espero y deseo la revolución espa viano. Ante el niño, sus maestros se si fuerza que arranca de él. Educar no es ñola como una confirmación espiritual tuaban casi todos ellos 110 como sen imponer loyes, sino preparar al alumno de la renovación que se anuncia para cillos guías, sino como petulantes escul para que él mismo sea capaz. de dictarse nuestra América. Lo que nos ha ane tores. Hablaban de modelar al niño a leyes, de someterse a las mejores, de ser, miado y disminuido de un lado y otro veces el cinoel era una estúpida palme en fin, autónomo. Asi. concluye. se del oceáno ha sido la inmoyilidad que ta. y sus normas eran frecuentemente logra transformar la relación con el guía los grupos exiguos han impuesto a las inaplicables a la naciente estructura vi en la de un amigo, y se resuelve tammasas enormes, el egoísmo de los inteva. se aplicaban torpemente: con sólo bién el viejo problema de la disciplina.
reses dinásticos, económicos o politique realizar la metáfora del arbolito que se Este es el verdadero camino de la pedaros, la falta de esa amplitud de ideales tuerce desde muy pequeño, ya creíau gogia que es también el de la verdadera que se traduce en progreso, en demo esos hombres retóricos haber cumplido disciplina: el de la libertad. Porque licracia, en libertad.
su tarea. Ellos eran los torcidos, puesto bertad apenas es otra cosa que cierta Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica