172 REPERTORIO AMERICANO De El Sol, Madrid mos Un mágico prodigioso El Premio Nobel a Menéndez Pidal Tiene razón el eminente prodramática de la realidad y la fesor de la Sorbona. Recordando est que Ramon est un magicien merveilleuz. Martinenche emoción palpitante de la vida.
el título del drama calderoniano, Los meros eruditos hacen obra podemos decir que nuestro don de análisis. Pidal, ya en el anáRamón Menéndez Pidal, para lisis mismo, halla color y gracia.
quien ahora se pide con justicia Tiene páginas, prolijamente doel Premio Nóbel, es un mágico cumentadas, en las que los mis.
prodigioso.
pormenores nos cautivan Nos parece verle encerrado en como deliciosas miniaturas. Pero su cuarto de trabajo de la carreen seguida se eleva el, autor, tera del Zarzal. Si una muralla como artista de la Historia, a de libros le aisla allí del munsíntesis generales de interés egdanal ruido, las anchas ventanas tético y filosófico. Los fríos eruabiertas al campo le revelan en ditos realizan una disección del cambio la soledad sonora del incadáver del pasado. Menéndez finito universo.
Pidal llega con su docto escalAllí este moderno mágico pasa pelo hasta el corazón mismo para la jornada inclinado sobre la descubrir y. reanimar en él los mesa llena de papeles. Manuslatidos vitales de una resurreccritos, volúmenes impresos, notas ción.
y fichas son todos sus filtros y Así, en su libro sobre La letalismanes. Medita después la yenda de los infantes de Lara exnoble frente apoyada en la palma plora crónicas y romances hasta de la mano o dejando correr los reconstituir en lo posible la andedos por la barba negra con tigua epopeya castellana. Así, en hilos de plata. Si alguna vez el volumen titulado Poesia jugla sus ojos se rinden a la fatiga, resca y juglares, el detenido y una voz familiar, femenina, sigue concienzudo estudio sobre esos leyéndole libros viejos y libros cantores públicos, antecesores de nuevos.
los poetas modernos y quizá tamDe este modo, lentamente, sin bién ¿por qué no. como enotros sortilegios, sólo con el concargados de propagar noticias y juro interior, ese mágico prodiformar opinión, precursores de gioso realiza el milagro. Pone los modernos periodistas. le sirve Menende: Pidai ante nuestros ojos admirados, lo Por Solis Avila para trazar un animado cuadro que Martinenche ha llade la época. Si trata de El rey mado el milagro español. La Rodrigo en la literatura, vemos vieja tierra de Castilla se descómo una figura poética va evopierta a su voz. dice el profesor El señor Menéndez Pidal lucionando a lo largo de los francés y le revela los más hersiglos. Con sus famosas investimosos secretos dormidos en su. y el Premio Nobel gaciones sobre el Cid Campeador.
seno. De La Vos. Madrid da Menéndez Pidal una vida, Pero observemos por nuestra La resonancia extraordinariamente favorable que ha nuova a la personalidad legenparte un contraste halagüeño. daria del héroe nacional. ya encontrado en todas las esferas de la vida intelectual Aquí el portento es cabalmente española la candidatura lanzada por iniciativa del señor en su último libro, La España el contrario del que Calderón inmortaliza en El Mſágico Prodi. Ballesteros Beretta para el premio Nobel en favor de del Cid, no sólo nos revela plogioso. En el drama clásico, CiD. Ramón Menéndez Pidal, sobre patentizar el acierto namente aquella España medieval, sino que nos aclara mucho priano, al ir a abrazar a Justina, de la propuesta, armoniza perfectamente con la significación nacional de esta figura, de veras ejemplar y esde la España perenne, la de ayer la mujer amada, se encuentra y la de hoy, y algo nos dice pañolisima: dechado de españoles por lo mismo que muy con un esqueleto. Ahora, en camtambién de la España de mañana.
bio, por la. sabia magia de Mepocos tienen, como Menéndez Pidal, tan clara conciencia Con Menéndez Pidal hemos de serlo.
néndez Pidal, los huesos disperrevivido toda la Edad Media esLa lengua es el exponente de valor más estable, sos, los restos yacentes en el pañola. Más aún: leyendo, por cuantioso y profundo entre cuantos permiten apreciar la sepulcro de la Historia, se reúejemplo. La epopeya castellana, significación y precio de toda una cultura; esto: es, de nen, sc organizan, recobran carne asistimos conmovidos a la fortodo un pueblo. Es el legado remoto jamás consumido, y sangre, calor y movimiento, y.
mación de los poemas heroicos; ante nuestros ojos resucita toda que, por el contrario, se enriquece y, renueva al pasar los vemos deshacerse y perdurar de generación en generación. Patrimonio común de presuna España, una España heroica fragmentariamente en el Romancripción imposible, halla en la literatura culta o popuy poética.
cero; resurgir el Romancero en La labor ingente de Menéndez lar sus más bellos paramentos. Pues bien: nadie como los dramas de Lope y Calderón; Ramón Menéndez Pidal conoce los secretos y caliPidal no es sólo de erudita rerenovarse éstos con la inspiración dades de esa lengua y esa literatur. que sitúan a España construcción. Es además obra de romántica del duque de Rivas y en el primer plano de las grandes culturas modernas.
belleza, espléndida creación litede Zorrilla, y reaparecer todavía Es la conciencia viva de un alma histórica incorporada raria. Don Ramón, sobre ser sin hoy los mismos temas seculares, simultaneamente en un gran sabio y un gran ciudadano.
disputa el primero de nuestros los eternos temas de la tradición investigadores, el maestro indisnacional, en las poesías de Ecutible de toda la moderna es Las gentes suelen tener de los. eruditos una idea duardo Marquina y de Manuel cuela de filología española. es bastante adversa. Parten del supuesto de que cualquier Machado.
también el artista admirable que. fruto de la investigación científica debe estar, por ameno He ahí el milagro espanol a evoca esconas, pinta paisajes y y sencillo, al alcance de todas las manos. Ni esto es que Martinenche alude. Se ha ambientes, hace surgir figuras, siempre posible ni la ciencia tiene por que alternar entre hablado del milagro griego, comcaracteres, personalidades, y saca lecturas de simple solaz y despreocupado pasatiempo. probando la maravillosa persisdel polvo de los siglos la visión (Pasa a la página 178. Pasa a la página 179. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica