8 REPERTORIO AMERICANO ha Centenarlo: Visita.
Tres márgenes a Lessing su misma grandeza de.
Tienen los centenarios la los que se escapan del grande la inconfundible (1729 1929)
mito de la incompren virtud de resucitar los hombres al. De Nueva Revista Peruana. Lima, Perú.
sión. Lessing fué un combatido, un cabo de la centena o las centenas de odiado, tal vez, pero no un incomprenaños de su muerte o de su nacimiento.
dido.
Entre nosotros y estos ilustres homLa comprensión» no es un problema bres media un espacio salvable. Para de mayoría, sino de minoría. El com.
celebrar un centenario es preciso anu.
prendido de muchos no lo es nunca.
lar ese trecho y acercarnos ellos y noObra el apasionamiento de la masa y sotros. Pero. somos nosotros los que no la inteligencia. Si algo se le comdesandaremos cien, doscientos años para prende es por obra y gracia esclarecealcanzarlos? serán ellos los que avandora de la minoría. Sobre todo, el comcen cien años hacia adelante, para junprendido de los muchos, por su misma társenos? Es de averiguar si podemos generalización, ha dejado de interesar nosotros retroceder, si pueden ellos avana la inteligencia, categoría de selección.
zar. Una generación no puede desandar Y, por otra parte, el incomprendido de cien años, traicionando su momento. Si la minoría, de la inteligencia, es un lo pretende, si lo hace, llegará exhausta hombre que carece de sentido vital. AI a la humanidad condensada en la ilusque ro se comprendió uua vez, cuando tridad que busca. no podrá interpredijo su palabra,. cuando fué más hu.
tarla; ni tendrá siquiera el aliento para inano ya no se le comprenderá más.
hacerlo, porque, otra será. cosa impenEsa «comprensión» que muchos piden a sada la atmósfera que respire.
la mayoría viene de su fracaso ante la En cambio, el espíritu digno de un minoría; la única capaz de comprender centenario tiene siempre la virtud de Comprensión implica, pues, negación de escalonear los siglos. Su marcha es siemmuchos y conocimiento de pocos. Éstos pre hacia adelante, aunque día llegará. la minoria serán los únicos capaces en que subir los escalones se le irá de prodigar una verdadera comprensiendo más difícil, porque irán aumensión. sing fué el comprendido de tando gradualmente de altura.
muy pocos en su tiempo; hoy es el. así, las más o las menos de las comprendido de más. Entre el hoy de veces depende esto de su valor humasu valor auténtico y el ayer de su inino puede llegar a nosotros. Como su ciación y de su lucha, hubo un largo marcha, contada en tramos de centetrecho. en que fué el comprendido de nas. ha sido gradual, su respiración PIA todos era el «clásico. ha ido, sensiblemente, adaptándose al nuevo ambiente. Respirará ya, en nuesLessing: Inquietud. En Lessing tra época, con reposo. entonces, hubo una constante preocupación reli. huésped de nuestro recuerdo y de nuesgiosa. Había en él la religiosidad del tro pensamiento consultaremos en él, nuesque Lessing, en su tercer centenario, tenga que se rebela contra el dogma. Nuestra relitro propio problema, y el de nuestra época. otra clase de exaltación o no tenga ninguna.
giosidad puede no identificarse estrictamente Lo demás, lo de la vida privada de la humani Así, con relación a Lessing, la nueva gecon la suya. Pero en el fondo, tenemos tam.
dad que gira en su torno, su problema do neración alemana no festeja al literato, al bién la religiosidad del que se rebela contra méstico, no nos inquietará casi.
polemista, al crítico, al filósofo en particular, el dogma politico. Lessing no era tanto un Así celebraremos su visita, su centenario. sino al hombre, al agita. lor, Lessing en místico, cuanto un religioso. Lessing era un No habrá necesidad de ir al hombre, habrá cuanto espíritu. No el valor literato sino el exaltado polemista del dogma luterano en lo que esperar que él venga. no cometeremos valor humano. No se interesa como decía que tenía, justamente, de no luterano, de la imprudeucin de embarcarnos en la aven Goethe por lo que el hombre deja tras de si, traicionero con respecto a Lutero: Predicó la tura de hallarlo cien años atrás; habrá que sino por lo que bace y goza y por lo que vuelta a un luteranismo más puro, más priprocurarle toda la comodidad predisponiénexcita a hacer y gozar a otros. Toda una mitivo, más fiel, en un medio pleno de aspidonos espiritualmente para que se traslade conciencia inquieta, ansiosa de valores humacien años hacia adelante. No precisará ir a raciones divergentes, y, por lo tanto, indifenos, conduce a ello. La que pertenece a una rente. Tuvo, asi, delante de su activismo, un encontrarlo; él no olvidemos que es siempre generación que ha actuado y que ha visto y un gran intuitivo nos encontrará primero a medio hostil, tal vez, determinante. Su actiTo los acontecimientos más incongruentes en tud tuvo, forzosamente, que ser independiente.
nosotros.
un tiempo histórico ínfimo, tenía que deciAltera, en poco, el aforismo de Nietzsche: em. Si alguno se perdió en la tarea de querer dirse por el hombre. Era la última y la úniencontrarnos, bien perdido está. Posiblemente, pezar a ser solo era ya principiar a ser grande.
nica posibilidad que le quedaba. Posiblemente fuimos nosotros los que hicimos un quite es la única, donde ya todos los otros valores esY asi promueve Lessing la más tremenda piritual y no él el que se perdiera de cami taban echados. con la convicción profunda conmoción, desde los tiempos juveniles de Luno. Seguramente le faltó vitalidad para lle de volverlos recuperar.
tero, en los ideales culturales de la Alemania gar a nosotros. El destino debe saber dispo Acaso fuera de creer la afirmación rotunque se estructuraba. Razón para que sea conner las cosas muy bien.
da de que la juventu rechaza el orden es siderado como uno de los más grandes adaliSi centenario es visita, bicentenario será piritual de los hombres de Weimar. En des del «esclarecimientos. Aufklarung aleuna visita que se repite. que se repite a declarar que Lessing está más cerca de nuesmán. Era un hombre nacido para su momento una misma casa y cuyos habitantes, eso sí, to histórico. Se inclinaba violentamente a la tra época, de los jóvenes, que de los dese han cambiado. Para Lessing 1729, son más clásicos, están de acuerdo una mentaliacción y decía: Der Buchstabe ist nicht der estas caras de ahora 1929 muy distintas a dad universitaria como Dilthey. y un críGeito la letra no es el espíritu y no tenía la las de su anterior visita 1829. Él, sinembargo, tico literario avanzado como Diebold. Ya el serenidad suficiente, la calma, para escribir siempre halló gente. Otros tras una larga y alma olímpicas de Goethe no tiene, para los una obra con la perfección acabada que anagotante caminata, encontraron la casa irre alemanes de hoy, tanta trascendencia. Ellos se helaba para la suya el «faústicoGoethe. De misiblemente vacía.
inclinan por la tumultuosa demoniaca alma aquí que Lessing se dirija, antes que nada, a Lessing: Juvenilldad. En el hombre del de Lessing, plena de inquietudes, de luchas, los principios y no a las formas, al espíritu centenario ha de afirmarse un espíritu de de comprensiones. es quizá Lessing por y no a letra. es este el sustentáculo de su utopía, un valor de juventud. No el que tucritica: derribar los principios falsos y llevar viera, realmente, en su época, sino el que le (1) Wilhelm Dilthey, Das Erlebnis und die Dichtung, a efecto la investigación filosófica de la ver: Verlag Teubner. Leipzig. Berlin, 1916.
encuentre o le asigne, al cabo de la centena. 9) Bernhard Diebold en Frankfurter Zeitung Januar.
dad, prescindiendo, muchas peces, de su actila juventud correspondiente. Es muy justo 1929.
vidad literaria que relegó a segundo término Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica