256 REPERTORIO AMERICANO Dios y el Césari.
tercio o un quinto, pagan esa mitad o ese (Viene de la página 232) tercio o ese quinto como si fueran las misma unidad, exportando poco menos que que republicana, ni más moderada que radi tura del Estado u organización de la socie cuando tuvieron precios equitativos para cal, ni más defensora de la propiedad pri dad. Mejora al hombre interior, engendra sus productos. Sólo que el trigo ha pervada que del régimen socialista. Cuando dentro de cada uno al hombre nuevo, y como dido hasta dos tercios de su valor, y un los fariseos le plantearon la cuestión del tri al anciano Nicodemo, nos hace nacer otra tercio el café, y así todas las materias pributo, Jesús, sin tocar siquiera la moneda, vez, dejando luego que el individuo y la mas, las locomotoras y los automóviles siseparó de los asuntos terrenales el reino que colectividad, así regenerados en espíritu, guen valiendo lo mismo. Es la riqueza de no es de este mundo. Al César, lo que es del resuelvan libremente los problemas de la las colonias que cruza los mares para aliCésar. Quoe sunt Coesaris Coesari. a vida terrena.
mentar a las naciones dominantes.
Dios lo que es de Dios. Cierto es, sin embargo, que esa interna El standard de vida del obrero americano. Hay quien tiende hoy, como en el régi actitud del alma religiosa, sedienta siempre es el más alto del mundo. En Norte Amémen fascista, a convertir al César en Dios, de verdad y, de amor, siempre descontenta rica todas las gentes necesitan tener radios.
haciendo omnipotente al Estado, sin res de la realidad grosera y aspirando siempre automóviles y estilógrafos: la mayor suma petar en el individuo las santas libertades a más claros y libres horizontes, concuerda de juguetes y de baratijas, para crear el de la conciencia, del pensamiento y de la bien con los ideales de renovación política paraiso artificial, y hacerle creer al dueño palabra. Hay quien aspira, por el contra y social sustentados hoy precisamente por que es feliz. Norte América necesita los rio, a hacer de Dios un César; de la reli los hombres de quienes por desgracia pare altos salarios. Pero los altos salarios los gión, un instrumento de dominio, y de los cemos más alejados nosotros, los ministros pagan las colonias. Los paga la América pastores de almas, autoridades oficiales con del Evangelio.
del Sur dándo un tánto por ciento más de influencia en los ministerios y bastón de granos por cada máquina que importa. mando en vez del cayado evangélico. Así escribía, entre otras cosas del mismo Bajo el fulgor de la prosperidad o en 12 La libertad es la atmósfera en que res tono, el señor obispo de Luceria. veces hecatombe de la victoria de Versalles se pira el alma. El alma sólo es de Dios. quedábase unos instantes con la pluma en hicieron las deudas más grandes que haya Dios sólo es del alma, y no podemos en alto contemplando a través de las gafas, podido imaginar el hombre. Pagar los su nombre, sin profanarlo, intervenir en por la ventana de su celda de trabajo, el intereses es trabajo superior a todo esfuerzo los negocios mundanos y en las contiendas huerto contiguo, donde unos almendros, humano. Apresuradamente se rectificaron políticas.
que como los lirios de la parábola ni hilael año pasado todos los presupuestos de gas La religión cristiana, vuelo de la mente ron ni. tejieron, se habían cubierto de su. tos en los países débiles, pero ni el flajelo hacia la luz, ansia inifinita del corazón, blanca, fragante vestidura, anunciando ya de las economías, ni la severidad de los no prejuzga ningún problema de estruc la primavera impuestos parecen ser suficientes para cuLuis de Zulueta. brir las obligaciones. Los bancos centrales han tenido que desprenderse de su oro. lo mismo que España en el tiempo de los Carlos y de los Fernandos, Francia recoge Las nuevas colonias y paraliza hoy el treinta por ciento del oro del mundo, y los Estados Unidos hacen lo propio con el cincuenta por ciento. AusNunca la vida internacional había sido, cañaduzales de Cuba, se multiplicó la po tralia ha tenido que desprenderse de mucho tan presionante como hoy. Las grandes tencia industrial de los Estados Unidos. de su oro para pagarle a Inglaterra, y lo naciones sufren una conmoción interna sin. Pasó la guerra, pero el impulso siguió la propio le ha ocurrido a la Argentina, y de precedentes y cada uno de los fenómenos tente, y han venido a producirse muchas Colombia han salido ya treintá millones económicos que las torturan repercute en más cosas de las que el mundo alcanza a para los Estados Unidos.
las naciones débiles. Nuestras repúblicas consumir. Los almacenes de todos los puer El crédito se ha recogido como el resorte indefensas de Sur América, lo mismo que tos están repletos de granos. La venta mecánico que cierra de golpe una puerta.
Australia o que los pueblos del Africa, adquiere hoy las proporciones de una ofen Se cerró el crédito en el día y a la hora están pagando los errores y los excesos, el siva en que el que necesita vender algo no en! que cada país se había empeñado en alto standard de vida y las ambiciones de se detiene a considerar los precios que le obras que le permitieran cierto adelanto.
los Estados Unidos o de Inglaterra. Las ofrecen. En el curso de unos pocos meses, El adelanto que buscaban para borrar en naciones que quedaron sometidas por el Rusia ha hecho tres guerras. la guerra del parte las diferencias abismales que la protratado de Versalles, alimentan ahora los trigo, la guerra del manganeso, y la guerra peridad creó entre los pueblos débiles y las sótanos del Banco de Francia. En medio de la pulpa de madera. Ahora se organiza grandes naciones. en la conciencia de de una paz aparente no puede vivirse una para la guerra de los fósforos y para la los pueblos deudores se hizo la verdad de vida más angustiosa. Los hechos econó guerra del algodón. Los Estados Unidos que el ritmo de sus esperanzas y de sus micos han superado toda la filosofía en no quieren sino vender, y quieren vender ambiciones, la realidad de sus potencias y que se creyó fundar la independencia y la Inglaterra y Alemania y todas las naciones de sus capacidades, tenía que moverse al libertad de las naciones. Las deudas han de la tierra. La consecuencia de esto ha compás de la buena voluntad de los prestainstaurado un nuevo sistema de colonias, sido comprimir a las naciones que simple mistas. Como ocurría cuando la voluntad y los pueblos que avanzaban alegres y con mente producen materias primas, a los pue de los pueblos no estaba ni siquiera en la fiados han tenido que detenerse, en medio blos débiles que pagan con granos sus deu cabeza del Virrey de Santa Fé o del Virrey del camino de la vida. para mirarse en el das y sus máquinas, y convertir a unas de Lima, sino en las remotas cortes de Mahervidero de los créditos trazados por el pocas monedas el esfuerzo imponderable drid demonio del oro.
que han gastado ellas en colectar la inmen. Como la última expresión de todo el proAl favor de la guerra europea los pue sidad de sus cosechas.
ceso se han levantado las tarifas de aduanas.
blos cobraron un impulso: el impulso de El comercio ha venido recogiéndose. En Las tarifas son murallas más gruesas, más producir intensamente para salvar el défi poco tiempo las importaciones de Colombia altas y más resistente que las murallas de cit que dejaban los países sustraídos al se han reducido a la mitad, a la tercera la China, pero pueden construirse ciclo de las cosechas. Crecieron y se ex parte las de Australia, a la quinta parte rrar todo un gran país en veinticuatru tendieron hasta tocar con los bosques los las de Cuba. Pero estos países que ya no horas. Las tarifas son la carga definitiva trigales del Canadá, se aumentaron los tienen sino para comprar una mitado un que se pone sobre la materia prima de los Envio del autor y ence Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica