Víctor Raúl Haya de la Torre

iRepertorio Almericano SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA Tomo XXI San José, Costa Rica 1931 Sábado 28 de Noviembre Núm. 20 Año XIII. No. 564 SUMARIO Despedida de Washington al pueblo de los Estados Unidos anzas de Edouard du Baron.
Haya de la Torre, puludin de nuestra América.
Poesias.
Inicial angélica Bibliografia titular.
Miedo y vigilia de Gustavo Adolfo Becquer.
Jorge Washington Arighetti Fernando Robles Emilio Ballagar Juan Marinello Historia de un nido, El escultor costarricense Juan Sánchez La vida de Faraday, el gran inventor.
Poesias.
El hermano Water from the Caribbean Un poemn japonés Tablero (1931. Azorin Amighetti Michael Faraday Mar Jiménes Romulo Tovar Juan del Camino Persiles Rafael Alberti Despedida de Washington al pueblo de los Estados Unidos.
EL Museo Histórico de Buenos Aires conserva un librito de 40 páginas en octavo, dado por la Imprenta de Niños Expósitos el año 1813 con este titulo. Despedida de Washington al pueblo de los Estados Unidos. Traducida de su original por Don Manuel Belgrano.
Es una traducción hecha por el General Belgrano del conocido Washington Farewell Address. Mitre se refiere a ella en estos términos: Belgrano aprovechaba los momentos de descanso en cultivar su inteligencia y fortalecer su conciencia por la meditación de los escritos de los grandes hombres con que se honra la humanidad. Entre éstos era Jorge. Washington el objeto de su par.
ticular admiración: así es que en los pocos días que permaneció el ejército patriota detenido en la margen izquierda del Pasaje. Enero de 1813) acabó de perfeccionar una traducción de la Despedida que aquel inmortal republicano había dirigido al pueblo de los Estados Unidos al tiempo de separase de los negocios públicos. Este libro, llegado a sus manos en 1805 y que desde entonces procuró generalisar entre sus paisanos y que le había acompañado en lodas sus campañas, era su libro de cabec ra. Habiendo emprendido su Iraducción, se había visto obligado a que.
marla, con otros papeles, en el combale de Tacnary. En Tucumán volvió a emprender nuevamente este trabajo, con el objeto de darlo a la prensa, realizando así bajo la tienda militar y en visperas de la gran batalla de Salta, la obra emprendida ocho años antes, bajo el sist, ma colonial, cuando la idea de la revolución aún no había germinado en su cabeza.
Esta traducción, que reproducimos inlegramente, con la introducción con que la presentó Belgrano, es en la actualidad desconocida casi por completo; sólo hace poco dió copia ella le revista Estudios, de esta Capital Nola de El Monitor de la Educación Común.
De El Monitor de la Educación Comun. Buonos Aires.
que se aprovechasen algún día, si el Todopoderoso los ponía en circunstancias, o transmitiesen aquellas ideas a sus hijos para que les sirviesen, si les tocaba la suerte de tra.
bajar por la libertad de la América.
Un conjunto de sucesos que no estaban al alcance nuestro, pues vivíamos sabiendo únicamente, lo que nuestros tiranos. querían que supiésemos, nos trajo la época deseada, y por una confianza que, no merecía, mis conciudadanos me llamaron a ser uno de los individuos del gobierno de Buenos Aires, que sucedió a la tiranía.
Las obligaciones no me daban lugar a repasar la traducción, para que se imprimicse, ya que teníamos la gloria de poder comuni.
car los conocimientos, y que se hicieran generales entre nosotros, y creído de que en la expedición al Paraguay podría haberla examinado y concluido, tuve la desgracia que ya he referido.
Mas observando que nadie se había dedicado a este trabajo, o que si lo han hecho no se ha publicado, ansioso de que las lecciones del héroe americano se propaguen entre nosotros y se manden, si es posible, a la memoria por todos mis conciudadanos, habiendo recibido un librito que contiene su despedida, que háme hecho el honor de remitirme el ciudadano don David de Forest, me apresuré a emprender su traducción.
Jorge Washington Para ejecutarla con mis prontitud me he Del famoso cuadro. invalido del americano doctor Redhead, que concluso, de Stuart. se ha tomado la molestia de traducirla literalmente, y explicarme algunos conceptos, y por este medio he podido conseguir mi fin, papeles, en mi peligrosa y apurada acción del no con aquella propiedad, elegancia y claridad de marzo de 1811 en el Tacuari.
que quisiera, y de que son dignos tan amplios Washington, ese héroe digno de la admira consejos; pero al menos los he puesto inteligi.
ción de nuestra edad y de las generaciones ve bles, para que mejores plumas les den todo nideras, ejemplo de moderación y de verdadero aquel valor, que ni mis talentos, ni mis atencio.
patriotismo se despidió de sus conciudadanos nes me permiten (1. al dejar el mando, dándoles lecciones las más Suplico sólo al gobierno, a mis conciudadaimportantes y saludables; y hablando con ellos, nos y a cuantos piensen en la felicidad de Amé.
habló con cuantos tenemos, y con cuantos puerica, que no se separen de su bolsillo este lidan tener la gloria de llamarse americanos, brito, que lo lean, lo estudien, lo mediten, y ahora, y mientras el globo no tuviese ninguna se propongan imitar a ese grande hombre, para variación.
que se logre el fin a que aspiramos, de consSu despedida vino a mis manos por los años tituirnos en nación libre e independiente, de 1805, y confieso con verdad, que sin embargo de mi corta penetración, vi en sus máximas Manuel Belgrano la expresión de la sabiduría apoyada en la exAlurralde, de febrero de 1813.
periencia y constante observación de un hombre, que se había dedicado de todo corazón a la libertad y. felicidad de su patria. 1) Aqal como en tantas otras ocasioner, apare on Pero como viese la mia en cadenas, me llenala modestia de Gleneral Belgrano. Puede ser que Reilhead u otros hubiesen tomado parte en la traducción ba de un justo furor, observando la imposibipero no cabe duda algina de que sabía bien la lengua lidad de despedazarlas, y me consolaba con que inglesa. Gutiérrez asegura que la conoole con perla leyesen algunos de mis conciudadanos, o para fección.
Introducción El ardiente deseo que tengo, de que mis conciudadanos se apoderen de las verdaderas ideas que deben abrigar si aman la patria, y si desean su prosperidad sobre bases sólidas y permanentes, me ha empeñado a escribir esta traducción en medio de mis graves ocupaciones, que en tiempos más tranquilos la habia trabajado, y se entregó a las llamas con todos mis Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica