REPERTORIO AMERICANO 261 enseñó lógica. Las natemáticas y la lógica. Logic. Tiene otros libros. Del último que he tan estrecha, que bien se ve al maestro de son, bien entendidas estas disciplinas, la mis mencionado he tomado el ensayo que le envio. lógica en el encadenamiento preciso de sus ma cosa. Esa es su segunda enseñanza. Él es. Fue publicado este ensayo por primera vez ideas y en la manera cóinu todos sus concepde los matemáticos que con Weierstrass, con en el Independent Review, de Londres, en tos se entrelazan derivándose unos de otros.
Dedekind, con Cantor, con Peano, con Frege, diciembre de 1903. En Mysticism and Logic Al releer mi versión la hallo tolerable. Me con Poincaré y con Einstein, integran el gran aparece como el tercer capítulo. En el prefa pasa lo que a aquel Creech traductor de Hogrupo cuyos triunfos, si hemos de creer lo cio de este libro, publicado en 1929, dice de racio y de Teocrito de quien nos cuenta Sir quie Havelock Ellis nos dice a este respecto, Free Man Worship y del capítulo que le Gilbert Murray que su Horacio y su Teócrito constituyen el más alto timbre de orgullo de sigue, sobre The Study of Mathematics, que traducidos podían parecerle a todo el mundo la civilización occidental en nuestra época. se basan en una metafísica, mas platónica malos versos y sin un ápice de la virtud de eso teniendo en cuenta la telegrafía ina que en la que ahora creo. Ya no considero el los originales. Pero para Creech, qué diferente lámbrica, el aeroplano, lo que se quiera. Como bien y el mal como entidades objetivas ente sensación! No se daba cuenta de la pobreza que estas maravillas las hicieron posibles ramente independientes de los deseos humade los versos. No sentía el velo del Creech esos hombres que viven en espiritual comercio nos, ni puedo hallar, un refugio emocional en entrometido. Para él, su Teocrito no era con los números. Enseñando estaba Bertrand el reino de la esencia con la misma seguridad Creech sino que Teócrito. purísimo, y si no Russell, enseñando y estudiando. cuando la intelectual que en un tiempo senti. Fue Santatánto, algo por lo menos empapado en la infame guerra de 1914 lo hizo estremecerse yana quien prímero me llevó a dejar de creer magia de Teócrito. No hay duda de que temde horror en su elevada cátedra. bajó de en la objetividad del bien y del mal, con su blaba de emoción al leer hasta los más calvos la cátedra y dijo que esa guerra y que todas crítica, en su libro inds of Doctrine, acerca de sus. versos. Pero era el original lo que le las guerras eran malas. Que se traicionaba de mis ideas de entonces; pero gradualmente causaba la emoción. El original lo tenía siemla dignidad humana. Que esa traición debía se ne ha ido forzando a una posición más pre delante de si en una especie de símbolo, cesar. esa es su tercera enseñanza. Le costo allá de la que el mantiene, puesto que para y hasta quizás realzada su belleza por la caro. La Universidad de Cambridge, con él, pero no para mí, el reino de la esencia es idealización y el cariño que naturalınente ceguera patriotera que posteriormente ha rec eterno e independiente de la existencia. nacen de un servicio largo y amoroso prestatificado, lo expulsó de su seno. Bertrand añade. Quizás el cambió en mi punto de vista do por una mente humana a otra. Ojalá que Russell salió a ver pueblos. Estuvo en los se debe al hecho de que el tránsito de los mi traducción, si no es ideal, no sea tan mala Estados Unidos. Estuvo en China. Hasta que años lo deja a uno más casado con la realique afeé sin remedio la hermosura austeraCambridge recobró la cordura y lo llamó de dad the actual, que cuando uno es joven. nada de honitura barata o fácil de la prosa nuevo a su seno sapiente y paternal y ya Creo que la Guerra me hizo sentir que no original; y me sentiría feliz si supiera que ha purgado de patrioterías. Pero ahora Bertrand habría objeto en el reino de la esencia si no servido para que los lectors de Repertorio Russell baja con frecuencia de su cátedra y hubiera nadie de quien preocuparnos. PragAmericano que no conocían a Russell le tomen viaja haciendo largos recorridos. En el otoño máticamente, sin embargo, aún veo cierto afición, y que los que ya le conocían apruey primera parte del invierno del año pasado valor en el estado de ánimo expresado en ban esto que hago. Quizás alguno de estos estuvo de nuevo, en los Estados Unidos, preFree Man Il orship, puesto que tiene el proúltimos nos diga con certeza si lo que parece dicando su tercera enseñanza: La paz, la buena pósito de ser de utilidad en épocas de gran cita, el discurso sobre la creación que Mafisvoluntad, el amor al ideal, el inutuo cariño zozobra y de reforzar una deseable especie de tófoles le endilga al Dr. Fausto, al principio que se deben los humanos los unos a los otros. obstinación con que enfrentarnos a los obsdel ensayo, es cita de veras o artificio del Si se le invitara venir a Costa Rica, creo táculos.
propio Russell. Usted buscó diligentemente que vendría. No digo una invitación tramita Este ensayo de Russell pasa por ser de las en su Fausto de Goethe y no halló allí ese da en Congresos y Ministerios, no, sino que más bellas páginas escritas en inglés en los discurso. De qué Fausto será? Tal vez del que una sincera invitación de parte, digamos, de últimos cincuenta años. No sé si lo habré todos llevamos dentro. Mafistófeles nos dice quienes entre nosotros se dedican a enseñar traducido de manera que su belleza literaria tantas cosas.
y aprender. Costa Rica le encantaría. Ya sea aparente. Es una prosa la de Russell tan sabemos todos los defectos del país. Él nos apretada, tan concatenada, con una secuencia Lo abraza su amigo, ayudaría a creer más en sus virtudes. Tal vez el Teatro Nacional no le guste. Tal vez Salomon de Ta Selva se asuste cada vez que vea esas estatuas que San José de Costa Rica. 23 de octubre de 19311, están dando saltos peligrosos y que de repente los dan de veras y se rompen la crisina y las canillas. Pero el Teatro ocupa sólo una manzana, y hay tantas manzanas en San José, Simón Bolívar en Costa Rica toda, cada una como para dár.
Por sela de premio a la sagaz Afrodita o a la Atalanta de los pies alados. Costa Rica es Carlos Pellicer buena para el alma; y no hay que dejar que. Del tomo II de Lecturas clásicas para nada nos amargne el hígado. Bertrand niños. Secretaria de Educación. México Russell ha escrito muchos libros; bueno, cosa Véase la entrega anterior. de doce volúmenes. Los inaestros de inatemáticas querrán conocer su obra monumental Desde que regresó a Caracas hasta media Miranda con una expedición compuesta casi toda de Principia Mathematica; los estudiantes, su dos de 1810, se dedicó al e. grandecimiento y de elementos extranjeros, organizada en favor of Relativity. Dicen por ahí que sólo cuidado de su Hacienda de San Mateo y a de la libertad. El general Miranda, venezolano unos diez individuos en todo el mundo pueden estudiar y cultivar su poderosa inteligencia y soldado glorioso y famosísimo en Europa y entender a Einstein. Por supuesto que no es con la lectura de los libros clásicos, que más tuvo un gran pesar al ver que los cierto. Propalan esa especie los perezosos que tarde había de servirle para iluminar su crite venezolanos, en su mayoría, no hicieron caso quieren escudarse en algo para no tratar de rio político y para embellecer su estilo de su expedición ni de sus esfuerzos generoentender a Einstein. Pero si fuera cierto, se critor admirable. Bella juventud la de este sos. Miranda disolvió su pequeño ejército y. ría porque no hay más de unos diez individuos humbre, iniciada intensamente en el matrimo regresó a Europa.
que quieran entender al gran físico judío. El nio que la muerte dividió y continuada en El 19 de abril de 1810, cuatro años después libro de Bertrand Russell es para los qne desean medio de grandes riquezas y placeres, viajes de la intentona del General Miranda, estalló iniciarse en esos altos estudios. Todos los que artísticos y amistades ilustres y envuelta siem en Caracas una conspiración que iniciaba la se preocupan con los adelantos del pensamiento pre en el fuerte manto de la pasión divina independencia de Venezuela respecto de Eshumano querrán conocer su Philosophy, li por la libertad, pana. Bolívar era uno de los jefes de la consbro que Henry Seidel Canby llama croquis En Caracas como en la mayor parte de las piración. Depuesto el capitán general Empadel pensamiento científico. introducción al ciudades grandes de Nuestra América, habían rán, se dió principio a la nueva organización propio corazón del pensamiento moderno. su estallado y fracasado casi todas las conspira de Venezuela. Se pensó inmediatamente en Our Knowledge of the External Torld; sus ciones y movimientos en favor de la indepen buscar el apoyo de Inglaterra y se nonbró Sceptical Essays, y Marriage and Morals, el dencia, antes de 1810. Venezuela, por ejemplo, una comisión especial, la que, en calidad de último libro que ha publicado, y Mysticism and había llegado en 1806 el general Francisco de Pleniponteciario, presidió Simón Bolívar a Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica, Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica es