REPERTORIO AMERICANO 131 gurándole rentas más que suficientes; pero alentaba en el egregio orador, pienso que ha sido infructuosa esta medida. y los pa será releído con deleite: dres de familia continúan deplorando la falta de medios para dar a sus hijas la conHe aqui. decia la piedra angular de veniente educación. Yo que tanto anhelo un edificio que ha sido el objeto de mi más por que las preciosas jóvenes que brotan en constante anhelo.
este suelo, tengan una mente ilustrada que Hemos venido a colocarla, y a iniciar corresponda a su natural modestia y a las asi la obra de que tanto necesitamos y que, bondades de su corazón, he creído que el con la protección de Dios, ha de ser fecuoda medio más seguro de hacer venir al Esta. en bienes para la patria. Es el núcleo de do personas capaces por sus conocimientos las demnás que deben seguirla, destinadas y virtudes de regentear el Liceo de Niñas, a la educación de la mujer, a quien la Proes el de ocurrir a la benevolencia y ternuvidencia ha señalado funciones tan decisira de la muy ilustre, muy cristiana y inuy vas en la felicidad de la familia coino indigua esposa del sabio Rey de los franceses. fluentes en la tranquilidad y en el progreso de la Nación.
El acariciado proyecto fracasó por la Importantes son las que lo tocan hoy caída de la monarquía francesa. Ensegui como hija, y como esposa mañana; pero las da y por algunos años se retiró el Doc que después reasume en la condición de tor Castro, ya a la vida privada, o a. nadre, son do más alta trascendencia.
campos de la pública que no le daban En el regazo materno se forma el corafacilidades para el logro de sus vehemen zón del hombre, y de ese regazo ha de letes deseos en favor de la educación.
vantarse villano o caballero.
En mayo de 1866 subió el Doctor Cas Mucho tiempo la cabeza permanece abierta tro por segunda vez al solio presidencial. a las ideas, corta es la época en que el corazón En la siguiente legislatura presentó el lo está para recibir la semilla de buenos sendigno Ministro de Instrucción Pública sentimnietos; y esa semilla ha de desprenderse del nuevo Gobierno, Licenciado don Ju de los cariñosos labios de la buena madre. El lián Volio, con la memoria anual del ramo, que ha tenido la desgracia de no recogerla un plan meditado de total reforma de la puede más tarde cultivar y aun enriquecer enseñanza primaria.
su inteligencia; pero rara vez ésta, en su continua lucha, alcanza a librarle de que. pesar de la fuerte presión del Gola envidia y otras innobles pasiones, lo bierno, pasó la legislatura de 1867, sin arrastren al fango de la hipocresía, de la que el proyecto enunciado se convirtiera deslealtad y del crimen. Nada ganan la en ley. Al abrirse la siguiente legislatura amistad ni la patria con un sabio ruin, y protestó el Presidente Castro contra semiccasi siempre las difamaciones y las calumjante inercia o tibieza de esta manera: nias contra los altos funcionarios, los atentados contra el orden público, y el descréNo sin pena os digo que por falta de dito y decadencia de los pueblos, proceden facultades, el Poder Ejecutivo no ha podido de una cabeza instruida que obra al impulso hacer en el importante ramo de instrucción de un mal corazó. pública las reformas radicales que ésta de Si pues de la mujer depende en mucho, manda, y que se ha linnitado a ejercer al que las familias tengan padres y hermanos gunos actos de protección de poca trascen buenos, los hombres, amigos fieles, y la sodencia.
ciedad, gobernantes probos, jueces rectos, Imperiosa es principalmente la necesidad eclesiásticos dignos y ciudadanos útiles; de sistematizar la instrucción primaria, educarla y educarla bien es uno de nueslini mándola en todos los pueblos de la tros más imperiosos deberes.
República. esto ocurre el proyecto de ley Para llenarlo cumplidamente y bajo el que os presentó el Poder Ejecutivo el año más adecuado sistema, preciso es construir anterior y que de nuevo os recomiendo. antes un edificio que corresponda a la imNo obstante esto, debo manifestaros mi portancia del objeto, al progreso del país, deseo de que la instrucción pública to y a la consideración que se merece el bello dos sus ramos y escalas, quede exclusivamente sometida al Poder Ejecutivo y autoA ese edificio damos hoy principio, con rizado éste para arreglar e invertir los la mira de que también sirva a futuras gefondos de instrucción de cada provincia en neraciones, como un legado de la presente.
el objeto a que están destinados y para disEspesa capa de tierra y césped oculta poner hasta de 30, 000 pesos del Tesoro Nalos ciinientos de la Escuela Normal de cional en favor de la enseñanza pública del Niñas cuya construcción venía persiguienpaís.
do porfiadamente el Presidente Castro desde 1818. La pertinancia del Congreso resultó Don Mauro Fernández explica satisinvencible, y a lo único que accedió fuó factoriamente el hecho así: a esto: autorizar al Ejecutivo para invertir en el edificio del Colegio Normal de Miró siempre el Doctor Castro con marNiñas una cantidad de dinero no pequeña. cada predilección la educación de la mujer; Este edificio comenzó a construirse en y si las circunstancias de su época no le el sitio que hoy ocupa la Plaza de Arpermitieron realizar todos sus ideales, basmas, al Oeste del Palacio Nacional y Cuar tan para juzgarlos los progresos que a su tel de Artillería de la Capital.
iniciativa alcanzó la educación del bello En la solemne colocación de la piedra sexo y la simiente que más tarde ha gerangular de aquel templo dedicado a la minado en los campos fecundados con la elevación de la mujer, pronunció el Pre propaganda de principios que él difundió sidente Castro uno de sus más bellos siempre por la idea civilizadora que envoldiscursos. Como en él palpita el ardiente vian.
anhelo que desde sus tempranos años Se explica así su afán por la instrucción pública, la cual desde su temprana colaboración en las altas regiones del oder, recibió del insigne estadista empuje vigoroso; y sus biógrafos encontrarán en ese cainpo de sus trabajos las ideas más elevadas y los rasgos más salientes de una naturaleza superior encariñada con la idea trascendental de la instrucción popular.
Si la acción creadora del Doctor Castro en lo tocante a instrucción profesio.
nal fué robusto roble que arraigó profundamente en el terreno y dió copioso fruto, el éxito de sus esfuerzos en pro de la nacionalización de la enseñanza popular y cultura del bello sexo se demoró algún tiempo, por la frialdad e indiferencia de elementos que debían colaborar para el logro inmediato y completo de sus nobilisiinos ideales. Esto no guita que se reconozca hoy la inmensa gratitud a que es justamente acreedor el Doctor Castro, cuando no por otro título, por el do insigno luchador y esforzado propagandista. Sus ideas y aspiraciones no tardaron con todo en abrirse paso; tanto que, antes del transcurso de un año a partir de su separación del Poder, otro gran patricio, más afortunado, el Benemérito Licenciado don Jesús Jiménez, logró introducir en el texto de la ley fundamental que bajo su inspiración se diera, el grande, sano y salvador principio de la enseñanza primaria obligatoria, gratuita y costeada por la Nación, llevando a la práctica muchas de sus obligadas consecuencias; y pocos lustros más tarde fue dable la radical revolución intelectual efectuada por el denodado adalid de la denocracia, el invicto Fernández.
Castro y Volio, primero, Jiménez luego y Fernández por último, por su tenaz empeño en favor de la ilustración de las masas y por su veneración y cariño hacia la cultura del bello sexo, son igualmente dignos de intensa gratitud nacional. La historia imparcial y justiciera tiene discernida a esos preciaros varones corona inmarcesible; y mientras no se hunda bajo el océano el istmo que habitamos, en lo más hondo del corazón de sus compatriotas tendrá cada uno, y todos en conjunto, un altar para el culto de sus grandes merecimientos.
Es tan abundante el material, que sólo escribiendo un libro acertaría a presentar la radiante figura intelectual y moral del Doctor Castro en sus principales y más atrayentes aspectos. Tengo, pues, que prescindir de recuerdos deleitosísimos sobre el afable trato que del venerable Rector recibía el más humilde estudiante de la Universidad. El cuerdo consejo de aquél, antes que Rector, padre y amigo, estaba siempre a disposición del cuitado; como también su patrocinio, su biblioteca, y aún su mesa, donde era honrado y con todo esmero atendido, el tímido aspirante a bachiller, futuro magistrado, diplomático, orador, o magnate.
El Doctor Páez dió a Castro un título honrosísimo en ocasión solemne: Padre y Campeón de la garantía de la emisión del pensamiento. el gigante de la oratoria, Doctor Zambrana, formuló esta frase, digna del mármol: sexo. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica