REPERTORIO AMERICANO 173 en enorme cantidad, fueron encarcelados esa misma noche y durante los días subsiguientes. La dictadura inició una etapa terrorista tan intensa como no se tenía antecedente en la historia de los despotismos venezolanos. El tortol y el arsénico se pusieron a la orden del dia. Dos años después, un 75 de los encarcelados había fallecido de muerte natural. Los que salvaron su vida continuaron por muchos años soportando grillos y torturas en las celdas «rehabilitadoras. Desde entonces, hasta principios de 1927, no fue posible la reorganización de centros estudiantiles, ni mucho menos de una federación nacional de estudiantes. En la fecha apuntada, velando con hábiles sofisinas la finalidad de la agrupación en el proyecto de reglamento presentado a la censura oficial, logiamos permiso para agruparnos.
La se organizó de inmediato. Era necesario un distintivo del grupo; y la boina vasca arropó nuestras cabezas.
Menos trascendente que el capelo de Oxford o que el manto de Heidelberg, el distintivo universitario se conquistó de inmediato carta de ciudadanía caraqueña. No por acaso escogimos la gorra de Vizcaya como señal del grupo. Era un distintivo que no tendía a ais larnos de la multitud sino a meternos dentro de ella. Por su filiación proletaria nos distanciaba resueltamente de la chistera burguesa. Más allá del hecho simple de diferenciarnos de los hombres grises, que airgidos de apetitos y de miserias pequeñas cerraban los ojos ante la bancarrota de la república, se agitaba una cuestión de ideología en el criterio electivo que nos guió. Comenzamos a actuar, principios del 28 decretamos la Semana del Estudiante. El programa de festejos nada sugería. Era delicuescente, patriotero: ofrendas florales sobre la huesa de los libertadores, veladus líricas, batallas de flores, bailes sociales.
Muchachadas, sentenciaron los teorizantos de la acción, escépticos de prestado, discípulos de un Bergeret lamentablemente traducido al criollo. Desde la iniciación de la Semana, el gobierno y las multitudes supieron de que se trataba.
Alto y recio dijimos nuestra palabra de rebeldia, oida con espectante fervor por las masas. Resueltemente, en discursos y poemas, en veladas de teatro y en mítines de plaza pública, agredimos al régimen y a sus hombres. La reacción no se hizo esperar. Los cuatro universitarios que habíamos alzado demasiado la voz, los raflores, dejando muerto a uno de los más feroces lealcs» del régi que en forma más franca defini los nuestros y heridos o presos a men, con el respaldo de un escua mos la posición de la juventud, otros más. Perseguidos activamen drón de gendarmes montados, hizo fuimos a la cárcel, con 90 libras te los dirigentes del fracasado fuego contra la multitud. Nuede hierro a los pies. Solidarizán movimiento, nos exilamos los rosos ciudadanos y estudiantes cadose con los encarcelados, el resto que logramos evitar ser reco yeron, heridos por las descargas del grupo, respaldado en todo mo nocidos por el servicio de espio nutridas de aquellos «valientes, o mento por las masas populares naje establecido en todos los puer atropellados por las bestias de la urbanas, inició una serie de ma tos de la república. Otros ingre soldadesca. Los que se salvaron nifestaciones hostiles a la dicta Saron a la Rotunda o al Castillo de la masacre fueron encarceladura. Durante varios días hubo de Puerto Cabello, con el clásico dos; y en partidas sucesivas, enviaun paro general en Caracas. El par de grillos. esta etapa de dos al sitio de deportación donde obrerismo, escaso en un medio poco represiones violentas siguió un se encontraba ya el primer grupo.
industrializado, desorganizado al periodo de aparente inactividad Elanla quedó vacía. Si apenas extremo de no estar agrupados en los rangos estudiantiles. Todo continuaron concurriendo a ella sino muy pocos de entre ellos en parecía indicar que la actitud del uncs cuantos hijos de hombres del los rudimentarios sindicatos pro estudiantado había sido exaltación régimen. Durante doce meses, bafesionales de auxilio mutuo, aban jacobina de un momento. En los jo sol y bajo lluvias, mal alinendonó en masa los talleres y las primeros días de cctubre demos tados y peor tratados, los estu fábricas; y, sin cajas ni comités tró lo contrario. En un breve diantes estuvieron abriendo en de huelga que los respaldaran y memorial, donde se invocaba el plena montaña el camino por dondirigieran, empujados sólo por su derecho de petición que a los ciu de ya está en marcha la revolupropia desesperación, se lanzaron dadanos de la Unión garantiza ción. El golpe de los picos. 110 a las calles, a batirse a pedradas la carta política vigente, exigió mordía solo la tierra de la región contra las metrallas que hacían del gobierno la inmediata libertad dura y soleada; hasta la concienfuncionar «enérgicamente, los. de de los encarcelados, estudiantes, cia de las masas, despertándolas positarios de la paz. Los estu obreros, militares, profesionales. de su letargo esclavo, iban las diantes, en número de 300, e in La respuesta de la dictadura fué puntas aceradas. Desde comienzos contable cantidad de obreros, fue inmediata. 91 universitarios, los del año 29 los movimientos popul on encarcelados. En abril nos firmantes del memorial, fueron armados se sucedieron unos libertaron, presionada la dictadura arrestados por la policía y depor detras de otros. José Rafael Gapara hacerlo por la corriente de tailos a una lejana región del pa baldón, Arévalo Cedeño, Dorta, opinión interna y por las protes is condenados por la voluntad del encabezaron esos inovimientos. Urtas sustentadas en el exterior por «Jefes a trabajar en la construc bina, Machado, un grupo de unihombres, periódicos y asociaciones ción de un camino carretero. El versitarios desterrados, los obreros libres. los pocos días de estar 11. del mismo mes organizó el venezolanos de la Royal Dutch, libertados, en combinación con un resto de estudiantes federados una Asaltaron en junio la fortaleza grupo de oficiales jóvenes y con manifestación de protesta popular Wihelmipa, en la colonia holanlos cadetes de la Escuela Militar, por la deportación de sus compa desa de Curazao; y, luego de casasaltamos a tiros el cuartel de ñeros. Disciplinados por las con tigar con esa acción las complaMiraflores. Cuatro de los más im signas del comité organizador, los cencias del imperialismo con la penitentes lacayos de sable del manifestantes no lanzaban vivas. dictadura goinecista, llevadas al gomezolato quedaron tendidos. Una Era un desfile silencioso, austero, extremo de ser la policía cuirazodelación de última hora nos iin integralo por miles de ciudadanos, leña una avanzada en el caribe pidió cumplir la segunda parte de a cuya cabeza, con el pabellón de del régimen que despotiza a Venuestro plan asalto por sorpresa la iban los estudiantes. nezuela, invadieron sobre la costa del Cuartel San Carlos, donde es La barbarie entró en acción. Eusoccidental del país, en un barco taba concentrado todo el parque. toquio Gómez, pariente del dés mercante americano del que se y tuvimos que retirarnos de Ni pota, acompañado de un grupo de apropiaron a las guapas. En ngosto, Delgado Chalbaud y los expeRómulo Betancourt dicionarios del Falke desembar(Envio del autor) caron en la costa oriental de la epública; y si detailes de técnica hicieron fracasar la expedición queda de ella el ejemplo heroico SAN JOSÉ, COSTA RICA de los que se dieron en sacrificio, Agentes y Representantes de Casas de primer orden lecciones por aprovechar para cuantos estamos compactos y lesueltos a ir de nuevo a la acción The National Cash Register Co.
armada y pruebas renovadas de que el pueblo venezolano está dispuesto a cancelar con la revoluBurroughs Adding Machine Co.
ción, a todo trance, cuieste lo que cueste, al régimen feudal y des.
pótico que lo rige. El problema Royal Typewriter Co. Inc.
político de Venezuela por obra de la acción inicial del estudiantado, con la cual se solidarizaron de inGlobe Wernicke Co.
mediato las masas populares, queda planteado en tal forma que no tiene sino una sola y única solución: United States Rubber Co.
la revolución; y la revolución se hará, aun cuando se confabule contra nosotros la internacional imperiaJames Motley, New York lista y sus agentes reaccionarios JOHN KEITH RAMÓN RAMÍREZ y traidores que son hoy poder en toSocio Gerente Socio Gerente dos los pueblos de Latinoamérica. Cuncluirá en la próxima entrevuj JOHN KEITH Co. Inc.
Cajas Registradoras National Máquinas de Contabilidad Burroughs Máquinas de Escribir Royal Muebles de Acero y Equipo para Oficinas Implementos de Goma Maquinaria en General (1) Pocaterra incorpora este dato al expediente de la barbarie andina; y comenta: Xi las pestes antiguas, ni las kuerras modernas, arrojan un porcentaje tan Aterraitor de víctimas. La tyrannie au Venezuela. Gomez, la honte de amerique. Andre Delpeuche. Paris, 1928 Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica