Violence

REPERTORIO AMERICANO 275 Del acto inicial de la Ta cpopcua bº a115 bí mo a la cual trata y sirve. couna hija propia.
desobediencia revolucio De El Sol. Madrid Este hombre desnudo, waria en la India. La esquelético, en constante. mayoría del pueblo hinayuno, resignado a todú, adscrita a la propadas las pobrezas sociales,. ganda de Mahatma Ganes el estudiante multidhi, ha comenzado su millonario de Oxford, harebeldía pacífica contra ce veinticinco o treinta el dominio británico. Poaños, cuando, como refiere co a poco el pacifismo Romain Rolland, se gasde la rebelión de los tó una fortuna por hahindúes irá gravitando cerse un caballero inglés.
sobre la vida del país Entonces era un alma y perdiendo su carácter pura encerrada en todos pacífico. Porque esta delos prejuicios de su casta.
sobediencia, como todo Gandhi fué a Inglaterra acto revolucionario, 110 a estudiar Derecho, a puede ser, por su indole convertirse en un ciumisma, pasivo. Negarse dadano inglés, y regresó. a pagar impuestos y conconvertido en el apóstol tribuciones es un acto de la libertad de la Inesencialmente violento.
dia. Al salir de la India, La violencia de la actisu madre le hizo repetud política de un puetir tres veces el jurablo no puede medirse mento de no tener ningún por los gritos o los discontacto sexual con las paros. Por lo menos, en mujeres blancas, y la la India. La desobedienanécdota más pintoresca cia actual del pueblo hinde su estancia en Londú tiene, bajo su aparente dres es una carrera despacifismo, un recio conesperada a través de tenido de violencia. El Hyde Park para librarse Gobierno británico podrá, de las insinuaciones do tal vez, si quiere enfrenuna prostituta. Este chotarse a la situación creaque de su pureza con la da en la India, con un perversión occidental enpoco de astucia, suprimir cendió en su espíritu la el monopolio de la sal.
primera llama. InglatePero no podrá suprimir rra no era, como decía absolutamente todas las la propaganda británica tasas y contribuciones, en la India, la sociedad pues esto equivaldría a inmaculada. Los periocancelar su dominio.
distas ingleses han peAhora, sin embargo, dido la prohibición de apenas iniciada la reveEl Gandhi las películas. norteamelión, nos interesa más la ricanas en la India, porfigura del caudillo. Los que le descubren al pueacontecimientos irán marcando el pro tual. Toda su actividad política, viesdo blo hindú los vicios sexuales de las ceso del gran hecho histórico. Triunfará el primer momento hasta sus últimas mujeres blancas. Gandhi no necesitó la o fracasará la insurrección iniciada. Aho palabras de estos días, tienen el fuerto peliculería norteamericana para descubrir ra no hace falta entretenerse en la con y puro aliento de wa obra de redenla podredumbre social de Occidente. Le jetura. Ninguna especulación literaria es ción apostólica. Gandhi ha introducido bastó residir en Londres. cuando la tan innocua como la de conjeturar el en la lucha política una de las más sua descubrió, en vez de pervertirse como último resultado de los sucesos políticos. ves virtudes cristianas: la humildad. Ha otros miles de indios, su alma virgen En cambio, la figura del leader de la hecho de la lucha política un ejercicio se llenó de asco.
desobediencia civil tiene ya un perfil religioso. Su prédica ejemplar y ejem Pero sii desengaño más doloroso fué histórico perfectamente definido y per plarizada en favor de los «sin casta» descubrir el desprecio de Inglaterra por durable. Al Mahatma se le puede juzgar tiene, dentro de la arquitectura social la India. Cuando este indio ingenuo, ya independientemente de las conse de la India, tanta emoción y lanto va lleno de admiración y de reverencia a cuencias de su acción revolucionaria. lor espiritual como la prédica cristiana Inglaterra, vió en las aulas de Oxford Dentro de la India tal vez haya la obli por la igualdad de los hombres. Los pe y en los salones de Londres el orgullo gación de preocuparse y ocuparse en riodistas ingleses se burlan de él, porque de los mercaderes enriquecidos y enroanalizar la eficacia de sus métodos po después de su paso por los pueblos de blecidos por gracia de su dinero, comlíticos, aunque, según se percibe en el su ruta mesiánica se reproduce el des prendió la profunda desigualdad entre desarrollo de su campaña, sus métodos precio a los «sin casta. Pero esto es su país, purificado y ennoblecido por una coinciden con las aptitudes sentimenta una groseria espíritual. Nadie puede es depuración espiritual de siglos, y los les de su pueblo. Pero fuera de la India perar de su prédica el milagro de des poderosos dominadores occidentales. Su el estudio de la personalidad del Mahat truir con una sola palabra la estructura espíritu regresó a la India lleno de amarma no puede hacerse sino con una pers social milenaria del pueblo hindú. La gura. Sin embargo, todavía no pudo odiar pectiva histórica y con una intención igualdad cristiana le ha costado al mun a Inglaterra. Hoy mismo no la odia, y de ejemplaridad.
do veinte siglos de sangre y aún no ha hace cuanto puede por ovitar el odio Gandhi constituye hoy el testimonio sido conseguida.
de la India.
del más puro idealisino humano. Su lu Para la gloria de Gandhi basta con Su rebeldía se encendió cuando vió cha en favor de la libertad de la India su propia conducta. Este aristócrata, la inhumana explotación de los trabajano tendría fuera de su país tanta fuerza hijo, nicto y bisnieto de primer minis dores indios en Africa del Sur. Gandhi emocional sino estuviera saturada de tro, educado por primer ministro, es el fué al Africa del Sur como abogado, tan impecable y gloriosa pureza espiri padre adoptivo de una niña sin casta, a vestido de levita, a defender jurídiea Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica