156 REPERTORIO AMERICANO Le conocí en 1915, cuando la revista The Forum, de Nueva York, acababa de aceptarle para la publicación de su Cuento del Pais de las Hadas. Por primera vez una composición suya aparecia en una revista de importancia.
Poco después nos unimos para organizar pequeñas reuniones a que asistian hombres de letras de las dos Américas. Alli, si no me equivoco, comenzaron los del Norte a poner atención en la poesia rotunda y pintoresca de Chocano, cuya visión externa del Nuevo Mundo es la más rica que hoy existe, en verso castellano o en verso inglés. Entre los poetas norteamericanos, amigos de Selva, se contaban ya Thomas Walsh, pulcro y cultisimo, ameno conversador, lleno de anécdotas sabrosas; William Rose Benét, el místico del Halconero de Dios, con su moderación de modales y su elevación de ideas; el sencillo y sonriente Joyce Kilmer, caido luego en tierra de Francia.
Después Selva tuvo muchos amigos literarios, desde los pontifices cuya opinión consagra hasta los principiantes que admiran; estuvo de moda en los cenáculos; el decano de las letras norteamericanas, Howells, le dedicó caluroso elogio, sin conocerlo personalmente, desde su tribuna critica de Harper Magazine. En fin, hasta causó extraña conmoción, en una solemnidad panamericana, atreviéndose a decir verdades duras presencia de Roosevelt.
Memorable, aquel episodio. No estuve presente, pero la prensa y las cartas me informaron de lo ocurrido. La reunión fué en el Club Nacional de las Artes, en febrero de 1917, y la organizaron las principales Asociaciones de artistas y literatos. Presidía el poeta y novelista Hamlin Garland. Hablaron, entre otros, Thomas Walsh, el poeta; Alfred Coester, el autor de la Historia literaria de la América es. pañola; el popular dramaturgo Augustus Thomas; Ernest Peixotto, pintor y escritor. sus descripciones de nuestra fauna y nuestra flora. dice una de las cartas. de nuestras estaciones y nuestros paisajes, revelaban gran delicadeza de gusto. Jhon Rice, catedrático de literatura española, traductor de Chocano y de otros poetas de nuestra lengua; Kermit Roosevelt, hijo del expresidente. Se esperaba que, al final de la solemnidad, hablaria Roosevelt, y mister Garland así lo expreso; pero el improvisado discurso y los versos de Salomon de la Selva turbaron la atmósfera, y el estadista ilustre no tomó la palabra: Mr. Garland, intranquilo, cerró la sesión sin pedirle que hablara.
Salomón de la Selva era el último en el programa. La ceremonia habia sido larga. Ya habían dado las once me escriben. el público estaba fatigado por los muchos discursos, y, cuando se anunció a Selva, presintieron nuevo fastidio, al tener que oir a otro profesor. en aquel entonces, Selva enseñaba en Williams College. La gente comenzaba a marcharse.
Pero apenas Selva comenzó a hablar, nadie pensó en abandonar el salón, y hasta regresaron los que se habían levantado para irse.
El fuego de sus palabras se comunicó al auditorio, que le escuchó con atención y lo aplaudio con furia. Durante toda su disertación es.
cribe una dama suis cabellos estaban erizados. Inconscientemente escribe un poeta norteamericano. lanzó a Roosevelt una mirada de fuego. Nicaragua es pequeña en extensión. dijo Selva, según The New York Tribune. pero es poderosa en su orgullo. Mi tierra es tan grande como sus pensamientos; tan grande como sus esperanzas y sus aspiraciones. Amar a los he visto ensayar desde la lengua arcaica y los Estados Unidos como yo los amo cuesta gran endecasilabos pareados de Chaucer, hasta el esfuerzo cuando mi propio pais es ultrajado por free verse de nuestros días. No en vano dije la nación del Norte. No puede existir el ver que hay en su obra mucho más de lo que redadero panamericanismo sino cuando se haga vela su primer libro, cuya mayor parte puede plena justicia a las naciones débiles. los encerrarse dentro de las normas del siglo xix.
mismos couceptos aparecen en su poema, leido Hasta ahora, en verdad, cabe decir que Selva allí, bajo el título de El corazón del soñador no se ha decidido a romper con el siglo xix: conoce su propia amargura, donde habla de el marco de sus inspiraciones comienza genelos sueños de su adolescencia, cuando se re ralmente en Keats y Shelley y llega hasta Franpresentaba a la tierra del Sur como su madre cis Thompson y Alice Meynell. Diríase que y a la tierra del Norte como su novia.
espera dominar su forma antes de lanzarse de Cualesquiera que sean las injusticias come lleno a las innovaciones: su buen gusto asi nos tidas, debe reconocerse que al pueblo norte lo haría esperar; diríase también que, en medio americano le impresiona la voz de la justicia. del torbellino de la poesía «siglo xxx, unos cuanY el público que asistía a la ceremonia pan tos, entre los poetas jóvenes, prefieren atenerse, americana aplaudió furiosamente las palabras en general, a las formas consagradas. Así inflamadas de Selva. Roosevelt dicen las car piensa por el momento Salomón de la Selva, tas. se indigno; dijo, a los que aplaudian, que según lo explica en una de sus cartas, donde su proceder era antipatriótico. No saben lo ensaya definir su situación entre los grupos que hacen. insistía. lo cual una dama en literarios de los Estados Unidos, tusiasmada contestó. Aplaudimos la verdad. Los poetas vivos dice. podrían distribuirse en tres grandes grupos: los poetas de ayer, El primer libro de versos de Salomón de la los poetas de hoy y los poetas menores de Selva, Tropical Town and Other Poems, sor treinta años. Los poetas de ayer son, por prende por su variedad de temas y de formas. ejemplo, Edwin Markham, Howells, Henry Van Hay quienes se sienten desorientados entre Dike, George Santayana, John Erskine, y aún tanta riqueza, y no saben dónde hallar el hilo otros de tono más modernos, como Bliss Carman de Ariadna para el laberinto. esos podria (canadiense de origen. Richard Le Gallienne atormentárseles diciéndoles que aún hay más. inglés residente aqui) y Thomas Walsh. Esos mucho más, en la obra de Sal de la Selva poetas habían publicado libros antes de 1912. otros temas y otras formas que no hallan y no les afectó el movimiento modernista inicabida en el volumen. y que, desde luego, ciado en ese año por Harriet Monroe con su hay más, mucho más, en su personalidad. revista Poetry Para mí, la fuerza de unidad que anima su »El segundo grupo comprende a todos los obra está en el delirio juvenil que se apodera poetas que se entregaron a los nuevos metros del mundo por intuiciones rítmicas. Intuiciones o a la nueva retórica: Edgar Lee Masters, Amy de color, de forma, de sonido, de fuerza, de Lowel, Robert Frots, Edwin Robinson, Vachel espíritu: todo se inflama bajo su toque.
Lindsay, Carl Sandburg, y otros, que soil, inPero no es exclusivamente intuitivo, sino disputablemente, los poetas de hoy. Un hoy que posee cultura poética honda y gran caudal que pudiera terminar pronto, a causa de su de recursos artísticos. Según el consejo de intensidad excesiva. La erupción del verso libre Stevenson. incomparable maestro de técnica va disminuyendo: nunca llegó a dominar por literaria. se ejercitó en todos los estilos: le completo a ninguno de los cinco poetas El traje hace al caballero y lo caracteriza La Sastrería LA COLOMBIANA De Francisco Gómez le hace el vestido en abonos semanales, mensuales o al contado Hay un inmenso surtido de casimires ingleses Operarios competentes para la confección de trajes Haga una visita y se convencerá Avenida Central 25 varas al Este del Cometa San José, Teléfono 3283 Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica