REPERTORIO AMERICANO 361. El señor Abelardo ella entrega al alumno Párrafos sugestivos del Informe presentado Núñez, hoy Director Geuna constancia de depósineral de Instrucción Pú al Sr. Ministro de Instrucción Pública to formal de un franco blica de Chile, fué comien la Caja Central de por don Pedro Pérez Zeledón en 1887 Ahorros.
sionado por el Gobierno de su patria para visitar Si el niño deja la es.
en Europa y Estados de Norte Amécuela, por algún suceso extraorrica los principales establecimiendinario, como la muerte de los patos de educación. Tres años y medio dres u otro, al exigir el retiro del empleó en recorrer las primeras depósito, se halla con un pequeño Escuelas de Francia, Alemania, caudal.
Bélgica, Suecia, Noruega, DinamarAsí aprende el niño enropeo a CA, Inglaterra y Estados Unidos, salvarse de la miserin, mediante y hace poco tiempo vió la luz el la economía y la previsión.
primer tomo de sus Estudios soYo no pienso que la institución bre Educación Moderna que trata de cajas escolares de ahorros prie exclusivamente de la Organización da hoy, Jesile luego, introducirse de las Escuelas Normales.
en Costa Rica; fácil es prever los Cuando Mr. Bresler, Director del abusos que se cometerían y el desBoletin ile Instrucción Pública de prestigio consiguiente de la iden.
Paris, revista dedicada a España Pero no debe renunciarse a ello y las Repúblicas Centro y Sur Amede un modo Absoluto. Puede inricanns, puso en mis manos ese li.
troducirse, sin género de duda, en bro, crei adquirir una joya de preestablecimientos que se hallan bajo cio inestimable, como era la verla inmediata inspección del MinisJal. Las condiciones de las Repúterio, como sucede con el Liceoile blicas de Costa Rica y de Chile Costa Rica En vez de cinco cén.
son tan análogas, que el trabajo timos que se deposite no menos de del señor Núñez, hecho para la úlcinco centavos en manos del Ditima, responde cumplidainente a rector del establecimiento, o enlas necesidades y aspiraciones de pleado especialmente encargado ile la primera. Niqué pudiera yo decir este servicio. Cuando el valor do sobre organización de escuelaš norlos ahorros del niño monte a un males, visitadas nuturalmente de peso o dos, que se traslade el depaso, que algo pudiera acercarse al pósito a una caja más formal.
profundo y completo estudio del No es difícil que nuestros niños eminente educador chileno? Desde econoniicen cinco o diez pesos en entonces concebi el pensamiento el año. Mil y quinientos o tres mil de referirme en un todo, en cuanto pesos de ahorro en una sola es.
al ramo norinal, a la preciosa obra cuela, es resultado que lulagaría.
del señor Núñez. ella me refiero, La idea alcanzaría crélito y su pries, y ahorro todo comentario, porvenir sería seguro.
porqtre los que yo acertara a hacer Cierto es que la administración en este sentido, antes perjudicarían de estos pequeños ahorros es moel trabajo del señor Núñez, que lo lesta y costosa por demáis, dadas ampliaran y completaran.
Don Pedro Pére: Zeleilon nuestras costumbres; pero esas costumbres no se reformarán sino Cajas escolares de ahoPor ahi de los 60 años.
Falleció a los 76.
por este medio. y hay que emprenmros. Después de los trabajos de derlo con valor y energía.
Nr. Laurent para vulgarizar la Claro varón de Costa Rica. Falleció en esta ciudad la noche del 31 de ma No sólo los niñosjcuántos padres iilea del pequeño ahorro, ella ha yo pasado.
ganado mucho terreno en la prác¡Cuanto bueno observo anotó don eiro en su viaje (1887) por Francia, Bélgica, aprenderán entonces pensar, en Suisa, Estados Unidos, etc. etc. Lean los maestros preocuparlor el excelente Informe el ahorro!
tica.
del cuso. Cucinto de lo que aconsejó entonces y quiso para Costa Rica, por hacerre: De nada vale adquirir si no se esli todavía! El mayor de lor pecados en los dirigentes de un pris: desoir, no educarBiblioteca de Beblenheim. se, no dejarse quiar, aconsejar por los que de veras saben y dle verus aman RH patria.
aprende a conservar.
Puede su fundación servir de ejemEste aprendizaje debe hacerse plo para fundaciones de esta clase.
durante la niñez.
Habla Juan Macé.
El hábito del ahorro es parte Canto a los Padres de la Patria «Escogí en mi biblioteca diez de la educación.
volúmenes diez volúmenes que no Por lo tanto, entra de lleno este la memorin te don había leido, y que sabin que no asunto en el dominio de la Escuela.
Pedro Pérez Zeledón.
había de leer. Ocho de ellos deEn Francia hay en ejercicio ocho cian Boletin de la Sociedad de mil y tantas cajas, escolares de Sobre el maizal de militar penacho; Aclimalación. Llevé mis diez voahorros con más de ciento setenta en la quietud sanchesca del poblado, lúmenes a casa del einpastador y y siete mil libretas.
y en las desfloraciones del arado le ordené imprimir en el loino, en ¿Qué es lo que el niño deposita que se hunde entre la tierra, apasionado vistosas letras de oro, Biblioteca como base de su futuro capital?
con la pujanza lubrica del macho; Comunal de Beblenheim. Luego Cinco céntimos de franco, o sea en la esmeralda de mi monte erguido; fui a ver al Alcalde y le dije. quieum centavo de peso!
en el topacio de mi tarde quieta; re usted que formemos una BiblioEl sistema seguido en Angers es en la pupila azul de la violeta, teca Coinunal? El Alcalde no fue éste: el maestro pone en manos y en la penumbra maternal del nido; poderoso para decirme que no, tudel alumno un cuaderno, cada una en el quieto regazo del abuelo vo que consentir, la biblioteca de cuyas hojas tiene veinte casillas o en la inquietud del brazo que trabaja fué.
destinadas a recibir timbres de un o en la altanera palma que desgaja Sucedía en esto algo parecido valor ficticio de cinco céntimos.
sus hojas en un impetu de vuelo; a lo siguiente: Cuando el niño alcanza a llenar en todo, en el regazo de mi tierra, Mr. Millerand, amigo de Juan una hoja, el maestro la desprende vire la libertad.
Macé, le dijo un dín. Por Dios del cuaderno, y en sustitución de (Paga a la página 367)
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