IRepertorio Elmericano SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA San José, Costa Rica 1930 Sábado 17 de Mayo Tomo XX Núm. 19 Año XI. No, 491 Descartes: el matemático el filósofo La opinión iberonmericana.
Toledo.
Una epidemia mistica.
Entre Libertador y Dictador: La jungada.
Krishnamurti.
Difundamos el sentimiento vivo de la patria.
Una conversación con Eugenio Ors.
SUMARIO Luis de Larroder El equipaje de Nietzsche.
Benjamin Jarnes Victor de Valdivia El crepúsculo de las diotaduras (y José Rafael locaterra Max Jiménez Qué hora es. De la escuela, del maestro y del material de enseñanza (y 3) Januel Cossio Ricardo Palme La jornada de Cossio. Gome: de Baquero Jorge Obligado Sonetos.
Claudia Lars Mario Sancho Tablero (1930. Juan del Camino La Voz.
Rómulo Tovar im En este mes de febrero cúmDescartes: nando II; se uno después al plese el 280. aniversario de ejército del Delfín de Baviera, la muerte del padre de la filo el matemático y el filósofo y vive un invierno entero en sofía moderna. de René DesNeuberg, junto a la estufa De Rruista de Revistas. México, cartes. Siendo francés, como es dice uno de sus biógrafos. bien sabido, muere en Estocol« pensando. mo, adonde le llamó la Reina Regresa a su país de la BreCristina de Suecia, admirada taña y vende sus propiedades.
de su talento y de sus obras.
Marcha a Italia, vive en FloCuentan que en esa temporencia, presencia las famosas rada transcurrida en el Real bodas de los Dux con el AdriaPalacio, con toda clase de contico, cuando el mar recoge en sideraciones y de comodidades, solemne ceremonia la sortija se levantaba el gran escritor de rica pedrería que la Dogaa las cinco de la mañana y resa le lanza desde la empadiscutia en aquellas horas filovesada nave; y aunquo por sofía con la soberana. Mas, al aquel entonces Galileo ya es llegar el invierno, crudo y fuercélebre, Descartes no lo ve, y te, como es el de aquellos paíeso que sus doctrinas sobre el ses del Norte de Europa, enmovimiento de la Tierra tanto fermó de pulmonía, y como se se asemejan. Se acercan los le quisiera hacer una sangría, momentos de lucha: sus teose opuso al remedio, diciendo: rías filosóficas van a ser comSeñores, economizad la sangre batidas; su famoso Discurso del francesa. Los restos del preMétodo, documento notable «paclaro hombre de ciencia, pasado ra dirigir bien la razón y busalgún tiempo, se llevaron a car la verdad en la ciencia. París, siendo sepultados en la es objeto de ruda contienda.
iglesia de Santa Genoveva.
Descartes no contesta a las El retrato que ilustra esta impugnaciones; el jesuitismo le página, como los otros dos que acusa de ateo, y las doctrinas hay en el Louvre, acusan clacartesianas son prohibidas. Enramente la descripción más tonces su genio parece tomar exacta que se ha hecho de la alas, y lanza las famosas Olefigura de Descartes, por el coditaciones, y escribe y publica nocido escritor Mr. Fouillé. Temás adelante, a ruegos de la Descartes nía dico cabeza grande, tan Princesa Isabel, el Tratado so. llena de razón como de intebre. las pasiones del alma, y en ligencia. según frase de Balzac; la frente de jesuitas, cuya enseñanza critica des sus cartas a tan noble dama, y a la Rei. ancha y recta; los cabellos negros y caídos pués en sus obras, y los continuos viajes, na Cristina de Suecia, trata de conciliar sobre las cojas acentuadas; los ojos muy parece que fortalecieron su naturaleza, la moral de Aristóteles con la do los estoiabiertos; la nariz saliente; la boca grande; hasta el punto de hacer una vida disi cos y la de Epicuro, y so eleva a la conel labio inferior más pronunciado; la fiso pada en París, a los 17 años, dedicán cepción serena del amor intelectual.
nomía, en general, severa, desdeñosa. So dose principalmente al juego; lo que no No es mi ánimo, en manera alguna, lee claramente en ella la meditación pa le impide encontrar a un antiguo com en este rápido bosquejo, examinar las ciente, obstinada, que recuerda al buoy pañero y gran amigo suyo en el colegio obras, los pensamientos, los principios y arando el surco. Los ojos son escrutado ignaciano, a Mr. de Darsenne, que estaba las teorías del célebre filósofo. Sólo so res; parecen decir. qué es esto. sus en las Misiones, y luego es su secretario trata de recordar una gloria universal, biógrafos añaden que era cuidadoso en íntimo e inseparable.
con el motivo ya indicado de consignar todo, sencillo en el vestir, usando casi Por aquel entonces las matemáticas le un recuerdo a tan preclaro varón.
siempre trajes negros; sobrio en sus úl cautivan; retirado a su casa del Faubourg Pero lo dicho no es un obstáculo para timos años, comiendo poco: algunas legum Saint Germain, olvida sus desvaríos, hasta que señalemos los tres períodos de la bres, ninguna carne y un vaso de vino. que se alista en las tropas de Mauricio doctrina cartesiana. En el primero, parDe muy joven, Descartes, paliducho, de Nassau; y desde aquel momento sus tiendo del estudio profundo de las may con una tos seca y constante, no merece viajes por Europa son frecuentes: pasa temáticas, llega al descubrimiento de un a los médicos juicios muy optimistas, no algún tiempo en Breda, aprovechando una método que luego aplica a los fenómenos creyendo nadie que llegaria a los 5t años; tregua entre españoles y holandeses; asis físicos. En el segundo, alcanza su apopero la educación primera en un colegio te a la coronación del Emperador Fer geo en las Meditaciones Metafisicas. En. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica