292 REPERTORIO AMERICANO Entre Libertador y Dictador canos, ha ocupado esa no man land de nero de lo edificante, que será de mucho don Pedro Somellera, enemigo político polémica entre el dogma católico y el consuelo para los espíritus impresionistas y personal del doctor Francia, era cuanto dogma masónico. Ahora, por lo visto, el o impresionables, pero que no tarda en medianamente autorizado podíamos consentido de lo invisible afirma también afofar el más nervudo entendimiento. Pre sultar para formarnos concepto del Pasus apetencias en las zonas más cultas. cisamente ahora, cuando nos esforzamos raguay y del régimen dictatorial que, se produce en una dirección mística por curarnos del pensar confuso y del a poco de la caída en 1811 del gobery tortuosa, no ya divergente de la razón decir laxo, cuando se insiste en que el nador español don Bernardo Velasco. que toda credulidad religiosa en defini rigor y la economía verbal formen há implantara un doctor en teología.
tiva lo es. sino contraria a ella, contraria bitos entre nosotros, no podemos menos Realizada la Independencia del Paraa la higiene misma de la inteligencia. que condenar en nombre de la inteligen guay, se confirió el gobierno del país a Porque el filosofismo orientalista de que cia esta marejada de misticismo. Si en dos cónsules: el comandante don Fulse vale no se ofrece con la declarada y sus versiones originales no carece de in gencio Yegros, que se sentaba en un cófranca ilogicidad del dogma, sino emba tuiciones profundas, nuestros exégetas de modo sillón de vaqueta llamado la curul durnado de pretensiones dialécticas. No librito deseosos de darse tono filosófico de Pompeyo, y el doctor don Gaspar trata de salvar el abismo metafísico con sin sudar vigilias la dejan reducida Rodríguez Francia, que ocupaba la curul el sólido espigón conceptual de la filoso un oleaje superficial de palabras, a un de César.
fía genuina, sino que se contenta con mero halago histérico y fonético. Lo sen. En 1814 César echó la zancadilla a eliminar verbalmente el abismo.
timos por la salud mental de sus cate Pompeyo, y se erigió dictador.
Pertenece, pues, esta logomaquia al gé cúmenos. Desde ese momento dicen sus imparciales biógrafos Rengger. y Longchamp Francia cambió de vida, abandonando por completo el juego y las mujeres, y ostentando, hasta la muerte, la mayor austeridad de costumbres en De Tradiciones Peruanas. Tomo III. Madrid su existencia doméstica. Julio Hernández En los primeros años de su gobierno, el dictador profesaba la doctrina de la inviolabilidad de la vida humana: no Estando de sobremesa el Libertador El capitán volvió grupa, escoltado por levantaba cadalsos, pero aplicaba el torBolívar en Chuquisaca, allá por los años los dos vigilantes paraguayos, que no mento a sus enemigos, y hacia ostentade 1823, verso la conversación sobre las se apartaron un minuto de su lado hasta ción de refinada crueldad. Pidió un preso excentricidades del doctor Francia, el llegar a Candelaria, donde lo esperaban que se le mandase cambiar de grillos, temerario dictadar del Paraguay.
los veinticinco hombres de su escolta. y Francia contesto: Lo que algunos comensales referían Después de mil contratiempos, natu Si quiere esa comodidad, que se los sobre aquel sombrío tirano, que se ase rales a camino tan penoso como el del haga fabricar y que le cuesten su plata.
mejaba a Luis XI en lo de tener por desierto Chaco, puso Ruiz en manos del Corriendo los tiempos, rara fué la sefavorito a su barbero Bejarano, despertó Libertador la ansiada correspondencia, mana. en que, por lo menos, no decretara en el más alto grado la curiosidad de y obtuvo el ascenso leal y honrosamen un fusilamiento.
Bolívar.
te merecido.
Llama la atención que habiéndose Señores dijo el Libertador. daré Los, compañeros de armas de Ruiz Francia educado para sacerdote, hubiera un ascenso al oficial que se anime a lle acudieron presurosos a su alojamiento, estimado en poco a la gente de Iglesia, var una carta mía para el gobernador esperando oír de su boca descripciones si bien la mayoría de ésta, en el Paradel Paraguay, entregarla en propia ma pintorescas del país paraguayo y estu. guay, era corrompidísima. El prior de no y traerme la respuesta.
pendos informes sobre la persona del los dominicos se jactaba de ser padre El capitán Ruiz se puso de pie, y enigmático dictador.
de veintidós hijos; y eso tuvo en cuenta contestó. Qué ha visto por allá, compañero? el mandatario pa decretar la secula. Estoy a las órdenes de vuecelencia. Arboles, arroyos y dos soldados que rización de los frailes, y aun para prome custodiaban.
tender la abolición del celibato sacerdo11. Nada más?
tal. dos religiosos que en el púlpito Al día siguiente, acompañado de una. Nada más: se ocuparon de política les mundó rapar escolta de veinticinco soldados, empren. Qué ha oído en ese pueblo. Qué la cabeza y los puso a vergüenza públidió Ruiz el camino de Tarija para atra se dice de nosotros?
ca vestidos con una hopalanda amarilla.
vesar el Chaco. Después de un largo mes No he oído mas que el zumbar del Un cura procesó a una mujer acusada de fatigas, llegaron a Candelaria en el viento; con nadie he hablado, sólo mis de bruja, proceso que desaprobó el docalto Paraguay, donde existia una guardia dos guardianes hablaban; y como lo ha tor Francia, diciendo. Véase para lo fronteriza que desarmó a la escolta, sin cían en guaraní no les comprendí jota. que sirven los sacerdotes y la religión!
permitirla pasar adelante. El oficial pa. Francia. Qué tal se portó con ¡Para hacer creor a las gentes en el diaraguayo, custodio de la frontera, envió usted. Es bajo. Es alto. Es feo. Es blo más bien que en Dios. Desde ese inmediatamente un chasqui al gobierno buen mozo? En fin, díganos algo. día Francia se declaró jefe de la Iglesia, con el aviso de lo que ocurría. Qué les he de decir, si yo no he nombraba y destituía párrocos y prohiFrancia le mandó instrucciones, y el conocido al dictador, ni he pasado del bió procesiones, dejando subsistente sólo capitán Ruiz, acompañado de dos jine patio de su casa, ni visto de la ciudad la de Corpus.
tes paraguayos, que no hablaban espa si cuatro o cinco calles, y eso al ga Si el Papa viniera al Paraguay pueñol, sino guarani, continuó viaje hasta lope, más tristes que un cementerio? de ser que lo nombrara mi capellán; la Asunción, sin que en el tránsito se le El despotismo extravagante del doc pero bien se está él en Roma, y yo en dejara comunicar con nadie.
tor Francia estuvo más arriba que la la Asunción decía don Gaspar, famiPasó Ruiz por algunas calles de la curiosidad burlesca del Libertador. liarmente, a su barbero Bejarano y a su capital hasta llegar al palacio del dicmédico Estigarribia.
IV tador, donde sin permitirsele apear del Hasta 1820, Francia oía misa los docaballo, tuvo que entregar al oficial de La biografía del dictador paraguayo mingos y días de obligatorio precepto; guardia el pliego do que era conductor. y las vagas noticias que de las atroci pero en ese año dió de baja a su capeUna hora después salió éste, y dió a dades que ejecutó han llegado hasta no lán; y no volvió a entrar en los temRuiz una carta sellada y lacrada, que sotros los peruanos, dan a ese personaje plos. El comandante de una nueva forcontenía la respuesta del dictador a Bo y a su pueblo un no sé qué de invero taleza le pidió permiso para poner ésta lívar, y el sobre del oficio, con estas símil y fabuloso. El libro del médico bajo la advocación de un santo.
palabras de letra del autócrata paraguayo: suizo Rengger, el del literato español. Idiota le interrumpió el dictadorLlegó a las doce. Despachado a la una, don Ildefonso Bermejo, el del inglés Para guardar las fronteras los mejores con oficio. Francia.
Robertson y el opúsculo del argentino santos son los cañones. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica