REPERTORIO AMERICANO 377 Canciones de Navidad Envio de la autora deslumbrante, arcoirisada, La posada alumbró la oscura noche, Viento soplaba del norte, Jos pastores lo miraban.
Lloran pastores y reyes: gemidor entre las ramas de los viejos sicomoros jde alegría son sus lágrimas!
y robles de la montaña; la luna no aparecía. Nochebuena de Belén, oscuro el camino estaba: coros de ángeles que cantan!
Torrentes de luz celeste noche de invierno, sin luna, la humilde cueva inundaban.
inoche de buscar posada. Qué rosa que está la Virgen, como una rosa en su rama!
Burriquito, burriquito, el de las orejas largas, entre la mula y el buey, en el lomo desmedrado, nacido el Rey de las almas.
en las desinedradas ancas. Nochebuena, Nochebuena, a la doncella más linda noche de buscar posada; lleva que jamás, llevara: de buscarla y de pedirla iba la doncella triste, y de alegría de darla. la doncella iba cansada.
Mi niño duerme en su cuna.
Mi puerta está sin aldaba.
Quince abriles de su frente ¡Quiera Dios en sus mendigos cran quince rosas blancas; bendecir esta mi casa!
los luceros de sus ojos entre lágrimas brillaban; en el invierno del mundo Letrilla SIL cuerpo es nieve sin mancha: La madre doncella bendita entre las mujeres, como flor se abrio: era la llena de gracia.
niño le nació a la Niña bella.
Por milagro la doncella Ilustración de Herman Rosse para la edición de The Dios, que ha nacido iba a ser inadre, temblaba.
Canterbury Tales de Cbaucer, traducidos por Frank por nos rescatar. Hoja de álamo no tiembla, Ernest Hill al inglés moderno, pablioada por la casa Longmans, Green Co. de Nueva York. 1930.
le babéis de encontrar plata jy verde, verde y plata, en pajas dormido como tiembla la doncellacomo que si fuera ique el tiempo se le acercaba! Al pueblo fueron llegando, asi, desnudito, temerosa de que el Niño al pueblo, de casa en casa; sólo un pobrecito naciera en campiña rasa.
por las calles sin faroles hijo de cualquiera.
y por las puertas cerradas No había una almohada, Le hablaba el esposo bueno, en vano se detenian ni un pañal había; el que jamás la tocara, y dando voces llamaban: la Virgen María escogido por Dios mismo lloraba angustiada: no chirrió gozne por ellos, para servirla y guardarla, ni destrabaron aldaba.
Ojos hace el cielo: el de lu vara de nardo, todas sus estrellas el de lirios en las barbas, Del pueblo se fueron yendo, por mirar con ellas bien oiréis lo que decía.
del pueblo, por calle larga, a Dios en el suelo.
con dulcísimas palabras: y al fin de la calle encuentran, cuando ga se desmayaba ¡Quién le hubiera hecho. No se aflija mi Señora, la doncella, abrigo tibio, la almohada más silave no llore la Niña casta, bumildísimo, de pajas, del plumón que el ave vida de la vida mía la cueva que era el establo esponja en el pecho!
miás alma mía que mi alnia; de buey manso y mula mansa.
Lino. no te da antes de la media noche vergüenza ses lino si el Niño Divino bajo techo he de acostarla, Brilló una estrella en Oriente, desnudito está?
y el Sol que alumbre la Vida reyes magos la miraban.
Tu lana, cordero, ha de brillar en su cama.
Cometa de inmensa cola di. para quién es. Yo, para sus pies, esa lana quiero!
Dime, no te queda la hebrilla más fina para su cortina, gusano de seda?
Ojos hace el ciclo todas sus estrellas por mirar con ellas a Dios en el suelo.
Con amante voz le dice Maria. Luz de mi alegria, mi niño y mi Dios, lindo Jesusito, sientes mucho frío?
Vent, tesoro mio, ven acá, mi bijito: El Nacimiento Por di Lorenzo Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica